Capítulo 34 (Parte 2):

198 8 0
                                    

Cap. #34

*/*/*Parte 2 */*/*

"¡Justin!" Le grité a través del cristal.

Pero él ignoró mi protesta, sin dejar de caminar hacia Austin, que parecía un poco desconcertado. Me vi obligada a sentarme y ver como Justin tenía su "pequeña charla". Estaba de espaldas a mí, lo que yo sabía que era un movimiento deliberado, de esa manera yo no sería capaz de ver su rostro.

Justin estaba exagerando. Austin había sido muy dulce hoy en el trabajo. Habíamos hablado entre atender a los clientes, algo que hacía con la mayoría de los empleados de la tienda. No era nada especial, sólo estábamos siendo amigables. Pero, por supuesto, Justin llevó las cosas fuera de proporción, y su lado protector que se cernía sobre mí una vez más. Yo seguía sentada en el lado del conductor cuando Justin se acercó al coche. Apretó el botón de la llave, abrió la puerta. Tan pronto como se abrió me encontré fuera. Mi actitud era un poco hostil hacia él, negándome a mirarlo a sus ojos cafés claros mientras abría la puerta de atrás para recuperar mi bolso. ¿Cómo se atreve a encerrarme en su coche? ¿Qué demonios estaba pensando?

"Rose. ¿Dónde diablos estas yendo? ", Preguntó Justin.

Traté de alejarme, pero mi muñeca se convirtió en prisionera de su mano grande. Él me tiró, apoyándome contra el lado de su coche. Mis dedos estaban todavía bien envueltos alrededor de la correa de mi bolso.

"Déjalo."

La voz de Justin era baja y yo sabía que él estaba tratando de mantener la calma. Al instante solté mi bolso, oyéndolo caer al suelo, con los ojos fijos únicamente en su rostro. Su cuerpo caliente se presionó al mío, impidiéndome escapar. Mi corazón latía rápidamente, la respiración saliendo en bocanadas cortas. Ambas de mis muñecas estaban puestas ahora contra el metal de su coche mientras me miraba. Sus ojos oscuros. Miré nerviosamente hacia la derecha para ver a Austin que seguía ahí parado, sus ojos bien abiertos mientras observaba nuestra interacción. Me había acostumbrado a los gestos dominantes de Justin, pero sólo Dios sabe cómo otros retrataban su comportamiento posesivo. Rápidamente me volqué cuando escuché lo que casi sonó como un rugido de la parte posterior de la garganta de Justin. Su mandíbula estaba tensa, su agarre apretándose.

"Eres mía". Él confirmó profundamente.

Su rostro se relajó un poco, formándose una sonrisa en sus labios carnosos mientras miraba a Austin. Su expresión era casi incitante antes de que su enfoque volviera de nuevo a mí. Me sorprendió cuando sus labios descendieron con fuerza a los míos. Su lengua caliente entrando en mi boca, explorando. Mis ojos estaban completamente cerrados mientras él continuó utilizando su fuerza, manteniéndome entre su cuerpo y el vehículo. Creo que Justin era consciente de mi resistencia hacia sus avances contundentes, mi postura no tan dispuesta como él hubiera deseado. Fue entonces cuando se decidió a levantar a mis manos, las puntas de mis dedos rozando los mechones lisos antes de que soltara su agarre. Mis dedos se enrollaron al instante en su pelo, tomando en puño los mechones suaves. Tiré de ellos con fuerza. Mi intención era que él reconociera mi objeción a su dominancia autoritaria, sabiendo muy bien que era para el beneficio de Austin, que supuse seguía mirando. Justin estaba reclamando su territorio sobre mí. Pero en vez de retroceder como yo esperaba que lo hiciera, el ronco gemido que emitió me tomó por sorpresa. Las vibraciones pasando por mi totalidad mientras él pusiera sus grandes manos debajo de mis muslos. Fue entonces cuando me acordé de que a Justin le gustaba cuando yo era dura con él, mis acciones totalmente contraproducentes. Mi cuerpo fue levantado, Justin obligándome a envolver mis piernas alrededor de su cintura. Yo no podía dejar de jadear mientras sus labios carnosos colocaban besos a lo largo de mi mandíbula antes de succionar en el lugar justo detrás de mi oreja. Mis pequeños gritos de protesta transformándose en gemidos. Justin sabía exactamente lo que estaba haciendo.

"Dilo". Él exigió sin aliento.

Yo me quedé callada. Su sendero tortuoso continuando por mi cuello. Mis dedos aún apretando sus mechones castaños claros, su cuerpo fuerte presionándome más hacia el lado del coche.

"Dilo". La voz un poco más dura de Justin contra mi piel.

Yo sabía que su nivel de molestia fue aumentando mientras sus labios se apretaron con fuerza a mi piel sensible. Mi boca se abrió en cuanto su intensidad aumentaba, las acciones de Justin implacables mientras él seguía severamente succionando. Sus dientes rozaron la piel enrojecida. Todo fue demasiado para mi mientras forzaba a salir las palabras que yo sabía que él estaba esperando oír.

"Yo-yo soy tuya... Justin soy tuya." Mi voz susurró.

Al instante se desapegó antes de poner un delicado beso en mi cuello. Mis manos débilmente apretándose contra su pecho.

"Bájame".

Mis pies tocaron el piso segundos después, empujando mi pelo a un lado y mirando mi reflejo en una de las ventanas oscurecidas del vehículo. Justin me había marcado. Afirmó su poder sobre mí. Lo que me molestó más fue que el horrible chupetón estaba exactamente en la misma posición del que él me había dado cuando nos conocimos. Rápidamente recogí mi bolso del suelo, ignorando las súplicas de Justin. Austin ya no estaba en la tienda, yo estaba agradecida por su ausencia. Mis pies me llevaron al otro lado de la pista, lejos de Justin.

"¡Rose!"

Me detuve, con lágrimas en mis ojos. Mis dedos rápidamente borrando la evidencia de mis emociones frenéticas.

Dark Con Justin Bieber. -Adaptada por: -MaryRose.-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora