"Imposible"

5

¿Qué mierda me sucede? Me he abrazado con él mas de un millón de veces (Si si, estoy exagerando) bueno, pero nunca sentí esto. ¿Qué está haciendo en mí? –ay Fernanda mejor olvídate de toda posibilidad de algo. No pasará- Yo no he dicho nada imbécil subconsciente, gruñí.

Me recosté en la cama. Y mi teléfono sonó.

<Mensaje de May> Amiga ¿Es verdad que Héctor volvió? Omg .

Le respondí: Si, ven a mi casa por favor.

En 5 minutos ella estaba aquí, oh May.

-¿Qué paso?-se sentó en el mismo puf que Héctor hace horas.

-Héctor intentó besarme-dije muy rápido.

-¿Qué, qué?-preguntó boquiabierta-¡P-pero es tu primo!

-Lo sé, intentó. Pero no lo dejé. Aunque se disculpo conmigo cientos de veces...

-¿Lo perdonaste?

-Obvio Mayte, volvimos a ser los mismos de siempre. Pero cuando me abrazó para despedirse, sentí algo muy extraño....-confesé. Tal vez el hecho de que sepa que le atraigo a Héctor, me da esperanzas de algo. Hablo de que tal vez ese comportamiento despertó algo en mí.

-Oh no...-susurró ella llevándose la mano a su boca.

-¿Qué?-pregunté desconcertada, su cara de tragedia era inusual.

-¡Te gusta tu primo! ¡¡Fernanda, tu primo te gusta!!-gritó muy fuerte.

Yo me lancé a ella y le tapé la boca salvajemente.

-¡Cállate! ¡Y no, no me gusta! ¿¡Estás loca!? ¡ES MI PRIMO!-aclaré volviendo a mi lugar.

-P-pero... ¿Y lo que sentiste?-preguntó ella obvia.

-No lo sé, seguro era...-pausé y balbuceé tonterías, no encontraba las palabras adecuadas-¡Ay no lo sé! ÉL NO ME GUSTA QUE TE QUEDE CLARO. –le aclaré alzando la voz.

-Okay, me queda claro. –contestó ella de vuelta. Sabía que aún no lo quedaba claro, Mayte era muy...Insistente. 

-Hablemos de otra cosa...-pedí cruzándome de piernas.

Pasé toda la tarde con May y pude despejar mi mente y no pensé en este enrollado asunto con Héctor.

Aunque no sé qué <asunto> si solo me intentó besar, y no pasó. Él se disculpó y yo acepté. No entiendo porqué sigo pensando en eso.

Uhm claro... "Despertó algo en mí" no estoy segura de lo que sea, pero ahí esta y no desaparece.

May cenó en mi casa y luego se marchó. Yo me duché y me fui a dormir.

Me levante a las 9am, me duché y me vestí. Bajé a desayunar y me quedé sentada en el sofá viendo las noticias matutinas.

Suena el timbre.

Mi mamá sale disparada desde la cocina a la puerta principal. Y abre la puerta.

-¡Hola tia! ¡Buenos días y bendición!-escuché la voz animada de un chico.      

Sé que tengo la habilidad activa de reconocer esa voz donde sea y cuando sea.

-Hola hijo, pasa-escuché a mi madre y luego me volteé y me encontré con un Héctor sonriente.

-Mija-me saludó-Buenos días.

Me levante y lo abracé.

-¡Buenos días!-exclamé besándolo en las mejillas, como siempre.

Aunque mis pensamientos estén un poco fuera de vía, yo lo trataré como siempre lo he tratado. No quiero que se dé cuenta de algo.

Nos sentamos donde yo estaba antes.

-¿Qué haremos hoy?-le pregunté curiosa.

-No lo sé, ¿Qué quieres hacer?-preguntó el sonriente.

-¿Te soy sincera? –hice una mueca y él asintió.

-Claro.

-Quiero dormirrrrr -sollocé fingiendo un bostezo.

-No linda, hoy no dormiremos. Haremos otra cosa. -Cuestionó el casualmente.

Sonreí picara.

Si, mis pensamientos están cambiando cada vez que habla. ¡Ya MARÍA FERNANDA! ¿Qué me pasa? ¿Por qué estoy pensando en eso?

Rápidamente quité mi sonrisa y me puse seria.

Él se empezó a reír.

Y no me quedó de otra que hacerlo también. Me sentía estúpida.

-Dijiste que podía elegir-hice puchero. E ignoré lo que acababa de pasar.

-Sí, pero no dormir mija. -dijo Héctor.

-Okay, bueno podemos ir...-Uhm, ¿A dónde?-No sé... ¡Al parque!-dije no muy convencida.

Oh sol, y arena. Gritos por todos lados. ¿Por qué dije parque?

-Está bien-accedió él sonriendo.