"Contra mi voluntad"》BTS《》jhope y Tú《 [Terminada]

Cap 26. ↠Especial.↞

↠ Sigue TaeHyung en la naraccion;

- Dile a New Sun, dile a Yoon Sun que la amo - ; Levantó su mano diestra en la cual había un anillo, de una fina decoración en su dedo.

Supuse en ese momento que sería de compromiso entonces la pena me invadió más, cuando cerró sus ojos el miedo a que no volviera a despertar recorrió mi cuerpo, estaba perdiendo a los más cercanos uno por uno.

Mi mano cubierta de sangre tocó la otra y ambas sostuvieron mi celular, frágilmente mientras temblaba llamaba a una ambulancia.
— Rápido por favor, necesito una ambulancia al frente del banco.

Después de hablarle con desesperación a la joven que me había atendido, le insistí a mi amigo que no cerrara los ojos; Cuando alce la mirada para ver a mi alrededor habían algunas personas que se acercaban pero la presencia de Hoseok ya no se sentía, no se veía, desapareció de un segundo para otro.

Todo me parecía correr en cámara lenta, como inútil seguía mirando a la gente, ahora las lágrimas caían solas, de hecho jamás dejaron se correr, hasta mi respiración se escuchaba más fuerte que el bullicio u/o cuchicheo de las personas a mi alrededor.

Miré una de mis manos, el nudo de mi garganta se hacía más grande, tragaba saliva para intentar calmarme, era imposible.

Todos los detalles que la sangre dejó en mis manos se notaba mucho. Pareciera.. Como si alguien le hubiera puesto "play" a la realidad, porque el efecto de cámara lenta se desvaneció cuando oí la sirena de la ambulancia.

➽ 24 Hrs, después.

El tiempo se me hacia infinito en la sala de espera de aquel hospital, y aunque me encontrase en esos momentos tan preocupantes.. Me seguía preguntando por ella, los suspiros mentales incrementaban a diario, a cada hora, segundo o minuto de mi existencia.

La única preocupación externa del hospital que tengo es.. Que Hoseok le hiciera daño.

Y ahí me encontraba yo mientras los segundos pasaban, apoyando en la pared de la sala de espera, cabizbajo, serio, mi vista sólo se delimitaba al suelo hasta que unos libros cayeron.. Pero.. ¿De dónde?, alce mi mirada rápidamente y entonces pude darme cuenta de que era una chica en el suelo, me agache para ayudarle con los libros, aprovechando la ocasión de leer las portadas.

— Son libros muy buenos, ¿Ya los leíste todos?

Esa joven sólo me miró, al parecer avergonzada por la situación, se levantó.
- S-Si.. A menudo los vuelvo a releer..

— Ya veo..
Cuando la miré fijamente me pareció familiar su rostro.
— ¿Te conozco de alguna parte?

- No - Una sonrisa se desplegó de sus labios. - No creo, para mi es primera vez que te veo..

Sonreí levemente al oírla, le entregue sus libros y suspire.
— ¿Y que hace una linda chica con libros en un hospital?
Mirarla me recordaba a Sayuri y a Camila.

- Pues sólo estaba de visita a un tío y estaba de salida cuando caí - suspiró.

— Ya veo, deberías de tener más cuidado o usar unos tacones que si se te sean cómodos —
No sé como pude distraerme hablando con ella, sentí que el tiempo se tomaba sus medidas para avanzar rápido y hacer que me pierda porque desde que comencé a mirarla.. Ha pasado una eternidad.

¿Será que podré olvidarme de Sayuri? No.. Pero ya intenté eso con Camila y no tuve resultados muy.. Satisfactorios que digamos.

*Narra Sayuri*

Me quede encerrada en esa fría y obscura habitación toda la noche.

¿En dónde está Hoseok?

No lo sé, no sentí si quiera el ruido de la puerta principal abrirse, lo más probable es que se la haya pasado entre las sabanas de la cama de otra mujer por los malos ratos que le hago pasar.

Ah.. TaeHyung.. ¿Porqué no fuiste tu el chico con el que me tenía que casar?

Hubiera estado más feliz..

Hubiera.. Hubiera sido capas de entregarme.. Pero por esas mismas razones no quiero que Hoseok ingrese a ésta habitación, si es necesario morir de hambre entonces lo haré, está dicho.

Aunque no dure ni tres días..

Todo es más difícil de lo que pensé..

El vestido de novia me estaba asfixiando, sentía que el aire se plegaba en las cuatro paredes de la habitación, sentí pasos provenientes del pasillo entonces me atreví a abrir la puerta y mirar, era Hoseok que estaba acercándose, cada vez más cerca..

¿Porqué no cierro la puerta?
Que.. Me está pasando, me siento lenta..

Hoseok con todas sus fuerzas abrió la puerta y yo retrocedí pasos, un fuerte olor a alcohol se sentía aunque estuviese a metros de distancia.

— Estas ebrio.. — Susurré.

Él me miró y en ese momento fui demasiada lenta para reaccionar, tenia un enorme escote en el vestido, el cabello desordenado y él sólo se acercó a mi, con fuerza me tomó de la cintura dejando besos en mi cuello.

— Hoseok.. Sueltame.. — Comenzaba a sentirme incomoda, trataba de alejarlo peor mi fuerza no era suficiente.

Sus besos recorrían mi cuello y hasta donde llegaba mi escote, sentí su mano bajar la cremallera de mi vestido entonces me altere.
— ¡Hoseok sueltame!

Las lágrimas corrían de mis ojos.

- Deja de quejarte, los dos disfrutaremos de esto..

Me sorprendí al oírlo, ya era demasiado tarde, me lanzó sobre la cama posicionándose encima, lo empujaba, golpeaba, gritaba, lloraba, pero nada era suficiente, ya me había quitado todo, todo, no había quedado en nada, era el fin.
— Hoseok por favor.. —

Él se detuvo y apretó fuerte mis muñecas, evitando dejándome escapar.

- Escuchame, estaré ebrio pero estoy seguro de lo que te voy a decir, no me voy a arrepentir después.. -

Estaba llorando, mi corazón estaba latiendo muy fuerte pero era diferente.. No era miedo

- Sayuri, me gustas, por eso te perseguía tanto.. -

Me quedé sin palabras, ¿Que se supone que tengo que sentir o decir? Creo que.. No, no puede ser.

- Hablame.. Dime algo.. -
Susurró apretando más mis muñecas.

Me quejé de dolor.

— ¡Duele! —

Él me soltó y me quedé más tranquila.

- Aunque no digas nada.. No sales de aquí sin que primero seas mía. -