Mittenwald |Camren|

Cap. 6

*Pov Lauren*

¿Cómo podía estar nerviosa con el simple hecho de almorzar con esa chica?. Ni yo me lo explicaba. Me encontraba sentada en la mesa del comedor mirando un punto indefinido en la pared café pálido y pensando en qué pasaría al volver a ver a la chica que me hacía sentir cosas diferentes, que nuca antes había sentido.

Mi mente estuvo pensando en ése tema durante unos veinte minutos, cuando se escucharon tres golpes en la puerta.

Reaccioné rápidamente pasándome la mano por el pelo y mirándome en el reflejo de un pequeño espejo que había junto a una repisa. ¿Qué estaba haciendo?, ¿A quién quería impresionar?, mi mente estaba en una constante batalla emocional.

Estaba tan concentrada en mi conversación interna que no me percaté de la llegada de los invitados.

-Lauren- llamó mi abuela- Ya llegaron, pasa a saludar a la sala- me dijo con una sonrisa.

Me paré de la silla, estaba muy nerviosa. ¿Por qué?, ni yo me lo explicaba. Mis piernas temblaban levemente y ya podía sentir mis mejillas calientes como si fueran a explotar.

En cuanto dí un paso dentro de la sala todos voltearon haciendo que me cohibiera aún más.

-Alejandro, Francesca. Ésta es mi nieta, Lauren- dijo mi abuela apuntándome logrando que yo agachara la cabeza completamente roja- Lauren. Ellos son Alejandro y Francesca, los padres de Camila- levanté la cabeza para saludarlos con una mano, un pequeño "hola" y una sonrisa.- Y ella es Sofía- me apuntó a una niña de unos ocho años con algunos rasgos parecidos a los de Camila.- La hermana de Camila- la pequeña me saludo con una gran sonrisa y agitando una mano rápidamente y yo imité el gesto. Moví mi vista hacia Dinah que me miraba con una cara divertida y a Camila que simplemente me miraba, sin ninguna expresión en particular. Su mirada chocó con la mía y rápidamente la esquivé, a lo que ella soltó una pequeña sonrisa sin apartar la mirada. Me estaba poniendo muy nerviosa.

-Pasemos a la mesa, la comida ya está lista- dijo mi abuela guiando a los invitados a el comedor. Agradecí internamente a mi abuela y me giré para entrar lo más pronto posible.

Habían ocho sillas con sus respectivos utensilios para comer. Mis abuelos trajeron la comida en diferentes fuentes, había pollo con verduras, frijoles y patatas, comida típica Cubana. Ellos se sentaron el las cabeceras de la mesa y yo me senté rápidamente en uno de los laterales de la mesa, junto a mí se sentó Dinah y Sofía y frente a mí estaba Camila y sus padres. No podía tener más suerte.

Mis abuelos comenzaron a servir la comida y se inició una charla entre los padres de Camila y mis abuelos. Yo estaba completamente anexa a esa conversación, mire hacia mi lado y pude ver como Sofia hacía dibujos con su comida, era extremadamente tierna. Al otro lado estaba Dinah quien comía rápidamente como si su vida dependiera de ello, a lo que yo reí disimuladamente. Y frente a mí estaba Camila quien comía lentamente, parecía disfrutar cada bocado, cuando iba a tomar unos cuantos frijoles con su boca, sacaba ligeramente su lengua, me quedé completamente embobada mirando su boca y como después de ese bocado se lamía los labios dejando éstos más brillantes y más rosados que nunca. Al darme cuenta de lo que estaba haciendo y lo que estaba provocando en mí la acción de Camila, desvié rápidamente la vista con la mejillas encendidas y comencé a comer en grandes cantidades suponiendo que eso aliviaría lo extraña que me estaba sintiendo en ese momento.

-Camila- escuché levemente que mi abuela llamó a la chica- ¿Cómo ha estado tu novia? hace tiempo que no la veo por estos lados.

No le estaba poniendo mucha atención a la conversación hasta que mi abuela dijo aquello. Me atraganté ligeramente con un frijol haciendo que tomara el vaso para tomar agua y Dinah se riera de mí.

¿Novia?, ¿De verdad?. Esa chica podía tener a cualquier chico a sus pies y... ¿Decidía ser lesbiana?. Me molestaba mucho. Y lo peor era que me molestaba mucho por una razón completamente inexistente. En ese momento mi mente daba mil vueltas y no había razón lógica para que me molestara que Camila tuviera novia. ¿Estaba celosa?... ¿Celosa?... ¿De una chica con la que ni siquiera he intercambiado más de diez palabras?, ni de mis exs novios tuve celos, pero... ¿Por qué con Camila se siente así?... ¿Qué estaba haciendo Camila conmigo?.

-Cara ha estado muy bien, Daniell- respondió Camila mirando su plato. Cara, ese era el nombre de su novia.- Hace una semana se fue a Munich por el campeonato de Basketball, por eso no ha estado conmigo en el trabajo.

-Caundo esté de vuelta dile que se pase a saludar- en ese momento  me sentí extrañamente molesta con mi abuela-.

-Le haré saber- dijo Camila con una pequeña sonrisa de lado, muy linda por cierto.

El resto del almuerzo pasó con conversaciones entre los adultos, los más jóvenes escuchando, algunas repentinas bromas de Dinah y unas cuantas miradas hacia Camila cuando ella no se daba cuenta.