[Drabbles] Because Of You

XIV: Fan [+18]

Palabras: 1100 aprox. 

Personajes: SungKyu; SungYeol; YeolGyu. 

Resumen: 

"SungYeol visitaba a menudo el bar". 

N/A: El penúltimo drabble, y gracias por darme ánimos. Me sentí tan rara escribiendo esto.  Y esto es por las ideas de JaangJang. 

Sus amigos lo invitaron a un concierto de un cantante pionero del indie-pop en un pequeño bar. Llevaba unos tejados rasgados y una camiseta azul que le hacían ver un poco fuera de tono con sus amigos que vestían costosas chaquetas y jeans que SungYeol desearía tener.  Se sentía ligeramente mejor cuando veía a WooHyun con un camisa rosa brillante y pantalones claros, no podía tener dinero, pero al menos podía seleccionar mejor la ropa para la ocasión. 

Trató de ocultar una sonrisa cuando WooHyun se sentó junto a MyungSoo, y luego, se oía como alguien acomodaba el micrófono, y una tímida voz se escuchó por los altavoces que estaban por todo el sitio. 

"Mi nombre es SungKyu, y espero que la música sea de su agrado" El chico formó una pequeña sonrisa, y SungYeol quedó asombrado por la voz de aquel personaje en el escenario. SungKyu tocaba el piano, mientras armonizaba las notas de una melodía suave y delicada con su voz. 

SungYeol cayó ante SungKyu, y una boba sonrisa se posó en sus labios cuando la presentación acabó, aplaudiendo con más ánimo que el resto. Gritando, y levantándose de su asiento bajo la incrédula mirada de sus amigos. SungYeol se convirtió en un cliente frecuente del bar, gastaba su dinero de su trabajo de medio tiempo en comprar una gaseosa para que no lo echaran por no consumir algo en el local, y a veces iba solo o acompañado por alguno de sus amigos, pero ellos comenzaron a notar la razón porque SungYeol no perdía día que no dejara de ir. 

Hasta que un día quiso conocer  a SungKyu personalmente, el chico que SungYeol estaba obsesionado. Así que lo esperó detrás del escenario, pero  éste lo ignoró, pasando por su lado como si no existiera. 

"Hey..." SungYeol llamó al otro, y trató de sujetar el brazo de él para impedir su paso. Aunque no esperó que SungKyu forcejeara, y lo mirara con enfado. 

"¿Qué estás haciendo?" 

"Yo, solo quiero hablar contigo" Repuso, SungYeol; imitando el tono enojado que SungKyu utilizó para preguntarle. Sin embargo, el cantante no dijo nada, y solo siguió su camino hacia su camerino, dejando a SungYeol abandonado con muchas palabras atoradas en su garganta. 

SungYeol empuñó sus manos, y pateó la puerta del camerino antes de partir. Jurando que SungKyu le pagaría por dejarlo de ese modo. Ni siquiera se había tomado la molestia de escucharlo, y todas las veces que fue a ese bar habían sido en vano para llamar la atención del cantante. 

SungKyu cantó la última canción que correspondía a la semana, sintiendo que garganta dolía por hacerlo cada día de la semana, pero debía pagar su vivienda, y también mantener a su novio que insistía en pedirle dinero prestado. El cantante sabía que HoWon estaba convirtiéndose en un alcohólico, y la mención de las deudas eran una mentira para que le diera dinero. 

Tampoco quería conocer la verdad, porque temía que su novio lo engañara en sus tantas salidas, por eso, no le preguntaba acerca de aquello. Además, cada vez que intentaba hablarle de su problema con el alcohol, solo le gritaba y lo golpeaba. SungKyu estaba sintiéndose cansado de todo, pero no sabía que hacer. 

Aún lo amaba, así que no podía abandonarlo. HoWon solo necesitaba ayuda, ayuda que SungKyu estaba dispuesto a darle. 

Agradeció al público, y salió detrás el escenario. El día viernes era una jornada extensa, porque trabajaba horas extras, y su cuerpo podía sentir el cansancio de tocando el piano por más horas que las habituales.  Ingresó a su camerino dispuesto a descansar, pero se tensó cuando escuchó el mismo ruido en su puerta cuando la cerró detrás de sí. 

Tal vez eran imaginaciones suyas, pero había comenzado desde aquel día que había visto al cliente que intentó conversar con él. El mismo día que HoWon lo golpeó porque pensaba que lo estaba engañando en su trabajo, y SungKyu aún se sentía adolorido por los moretones que HoWon le había dejado. No quería darle otro motivo más, por lo que dejó al chico sin contestarle, esperando que HoWon no los viera juntos. Se había sentido culpable después. Entendía que el chico no tenía la culpa, pero sentía miedo de arruinar más su relación con HoWon. 

Al menos, ese día era el único día que HoWon no iría a buscarlo al trabajo para pedirle dinero, ya que el viernes, el menor acostumbraba salir a bares con el resto de sus amigos. Abandonando a SungKyu hasta el día siguiente. 

 Otro ruido más se escuchó, uno más cerca de SungKyu, ignorándolo cuando notó que su móvil no estaba sobre la encimera frente al espejo. Se despojó de la chaqueta que utilizaba en sus presentaciones, colgándola en el perchero de la puerta, pareciendo raro que se perdieran sus pertenencias en más de una ocasión esa semana. Aunque, cuando buscaba en otro sitio que no recordaba haberlo dejado antes de ingresar al escenario, aparecían. Y justamente, el móvil estaba dentro del mueble, inspeccionándolo con curiosidad cuando descubrió que el artefacto estaba apagado. 

SungKyu levantó su mirada al espejo, inclinando su rostro, queriendo ver su aspecto antes de irse a su hogar, pero jamás esperó ver un chico detrás de su espalda. Soltó un grito que el intruso acalló con un pañuelo en su boca, sujetando sus muñecas con la otra mano. SungKyu reconoció al chico que le había pedido hablar, quien sonrió por la mirada asustada del cantante desde el espejo. El cantante comenzó a sentirse más débil, suponía que lo habían drogado por el aroma intenso en el pañuelo, y el desconocido no dudó en amarrar las muñecas de SungKyu con una cuerda al creer que la droga estaba funcionando, porque el forcejeo de SungKyu era menor. 

Una vez hecho, SungKyu giró su rostro, incapaz de contenerse a las caricias que el otro daba en su cuello, mientras observaba de reojo cómo descendía una mano hacia la camiseta, descubriendo la piel blanca de su abdomen. 

El chico soltó una risa cuando escuchó una queja de dolor por parte de SungKyu al atrapar un pezón con los dedos. De un momento a otro, inconforme con aquello, bajó los pantalones de SungKyu, quien estaba ligeramente fuera de sí después de unos minutos. Se resistía, pero SungKyu apenas podía moverse, debido a que la fuerza de sus músculos era casi minúscula por el efecto de la droga. En cambio, los toques del contrario eran bruscos, haciendo que el dolor en la piel del cantante se intensificara por las mordidas que dejaba SungYeol en su torso, y lamiendo algunos marcas que el propio novio de SungKyu había hecho. 

"Ahora sabrás que no debes ignorar a un fan, SungKyu" Murmuró con una sonrisa, SungYeol.