-¡Bro! No te veo hace un siglo. -dijo Hunter acercándose a Matt dándole un abrazo con palmadas en la espalda.
-Si, bro, hasta te pusiste mas guapo.
-Ay, gay jajajaja.
Reí a carcajadas. Ambos son muy divertidos.
-Hunter, presentame a tu amiga.
-Matt, ella es Carolina, mi novia y Carolina, el es Matt, mi primo.
-Si, ya lo sabia, ya nos presentamos.
Contesté. Matt es un chico muy blanco de ojos azules y cabello rubio. Y enamora fácil a las chicas. El tiene ese don y lo sé con solo mirarlo.
Nos quedamos un momento mirandonos mutuamente. Como 3 minutos maximo.
Como nadie hacia ningún movimiento, me atreví a moverme y bucear un rato. Cuando salí a dar un respiro, noté que Matt y Hunter me observaban desde una esquina de la piscina. Salí con el ceño fruncido y agarré una toalla que se encontraba colgada al lado de la puerta de cristal.Voltee a ver por curiosidad y seguían mirándome. ¿Acaso soy una atracción para ellos? Ay Carolina, no seas pendeja, les gusta ver tu cuerpo, me decía mi conciencia. Maldita conciencia que tiene la razón. Subí a la habitación y me di una ducha. Con la toalla alrededor de mi cuerpo, encendí la televisión y me acosté un rato tomando soda de uva.
-¿Puedo pasar? -al otro lado de la puerta era... ¿Matt?
-Mmm... depende.
-¿Depende de qué?
-Depende de lo que quieras decirme... o hacerme.
-Pues... no es nada malo. Dime, ¿puedo pasar?
-Adelante.
Matt abrió la puerta y quedó pasmado mirándome.
-¿Qué tanto miras? -pregunté con el ceño fruncido.
-Me hubiera gustado verte con un vestido blanco y el cabello con un peinado algo formal pero me gusta más verte así. Te ves sexy.
Bajé la mirada. Que tonta. Olvidé cambiarme. Matt es un pervertido. Lo acabo de conocer y ya me dice estas cosas. Me levanté rápidamente de la cama, busqué entre mis maletas algo de ropa y fui directo al baño a cambiarme.
-¡Espera! -me detuvo Matt antes de llegar al baño- no te cambies.
Alcé una ceja... ¿Qué? Yo no estaré semi-desnuda frente a él. Traté de ignorarlo y safarme de él pero me fue imposible. Es demaciado de fuerte.
-Carolina, te acabo de conocer y ya quiero tener una vida entera junto a ti. Me enamoré de ti apenas te vi en la piscina y...
-No, Matt, no estás enamorado de mí. No te puedes enamorar de una persona que acabas de conocer. Es imposible.
-Nada es imposible, amor.
-Matt, por favor, suéltame el brazo que necesito ir a vestirme.
Ya estaba frustrada y se me notaba en la cara. Matt estaba algo decepcionado y me soltó. Se fue sin decir ninguna palabra. ¿Decepcionado? ¿De qué? No le entiendo. Me vestí y salí por algo de comida. Me moría de hambre. Llegando a la cocina, escuché a Hunter hablar por teléfono e inmediatamente me escondí detras de la pared que divide la cocina con el pasillo principal.
-Si, lo haré... Volveré en una semana y arreglaremos todo, ¿si?... No te preocupes mi amor, mi princesa, mi todo... Te amo... Adiós.
¡¿QUÉ?! Hunter tiene a otra... ¡HUNTER TIENE A OTRA! Pero que desgraciado y poco hombre es.

ESTÁS LEYENDO
¿Bailamos?
Teen Fiction¿Mi pasión? El baile. ¿Como pasó? Pues, cuando tenia 5 años descubrí que mi talento era bailar. Desde ahí comienza mi historia. Una historia llena de amor, tristeza, corage...