NO ME DECEPCIONES

Capitulo 2 ¨EL PRIMER BESO¨

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Tengo unos padres muy notables, mi padre es un sabiondo a pesar de que no termino la primaria, y mi madre es una gran cocinera con un gran corazón aunque bastante distraída y a veces un poco injusta e ilógica.

Mis hermanas son mayores, una se llama samantha aunque de cariño le decimos Sam, tiene 27 años y la otra se llama Lourdes y a ella simplemente le decimos lou tiene 24 años. Mi hermano el cual no conozco, se llama bruno y a él no le llamamos de ninguna forma especial, solo bruno. De bruno desconozco sus datos, solo sé que él es más pequeño que Sam pero más grande que lou.

Mi madre se llama cristina y mi padre se llama Everardo.

Bueno basta de presentar y hablar de mi familia, no me quiero poner sentimental.

Bien como dije antes, estoy a punto de cumplir los 19, ¡Que loco! A pesar de mi corta edad, tengo una mente a veces como de treinta o treinta y cinco.

Pues ahora los chicos y chicas de mi edad lo típico que hacen es fumar, alcoholizarse, drogarse y tener sexo sin protección.

Pero en cambio yo, soy muy diferente, para que voy a mentir, claro que he hecho maldades, pero he cambiado. Y vaya que me resulto muy difícil hacerlo, pero lo conseguí, ahora estoy a punto de ingresar a segundo semestre de mi carrera de Filosofía. A pesar de ello me sigo sintiendo como una niña de 15 años, pues soy de estatura baja y de mente bastante abierta, lo se soy un poco bipolar. Pero en serio a veces tengo mente de 35.

Actualmente estudio en la universidad de ritchton, tengo compañeros de 18 hasta de 25 años. Me gusta llegar temprano a mis clases, me gusta llevarme bien con las personas pero soy un poco anti-social. Me gusta la música en inglés, soy fanática de Charlie puth, ¿ya se los había mencionado? Creo que no, pero en serio amo su música, sus letras son palabras que te transportan a otro mundo, pero algo que también amo es el olor de la tierra mojada, normalmente aquí en Portland siempre llueve.

Mi madre es estadounidense y mi padre mexicano, así que hablo dos idiomas.

Estoy tan acostumbrada al clima que siempre suelo vestir con chaquetas, calcetas de colores y pantalones de algodón suaves, sin olvidar claro mis vans de color ambar. Soy un desastre pero acepto mi propio desastre.

Mi desayuno todas las mañanas es macarrones con un plato lleno de verduras sin olvidar el licuado de espinacas que a diario me prepara sam después de sus sádicos entrenamientos. En mi casa no les gustan los animales, pero tengo un hámster llamado ¨Dan el teran¨, lo llamo así por Daniela, una chica hermosa de mi clase, ¿No les he mencionado que soy gay? Pues lo soy. Olvido muchas cosas, pero estoy escribiendo esta historia y creo que tengo que ser yo misma, por lo menos aquí...... ¡sí!

Nadie en mi casa sabe que soy gay, ni mi padre, ni mi madre, ni nadie.

Solo hay una chica en la que confío, ella se llama Ana maría, pero solo le llamare Ana.

Ana supo que era lesbiana desde los 12 años, pero empezó a aceptar su sexualidad a los 14, ella ahora tiene 21 años y es mi vecina, ella estudia periodismo y en las tardes inglés.

Ana es la persona que me ayudo a descubrirme, Un día ella organizo una fiesta en su casa, me invito. En esa fiesta acudieron como cien personas, la mitad de ellas eran lesbianas, la otra mitad eran hombres homosexuales con sus parejas, había besos por doquier.

Ella en esa fiesta se me acerco

-Conmigo no tienes que fingir ¿vale? - dijo Ana con tono de comprensión.

-¿De qué hablas Ana? - pregunte confundida y a la misma mes nerviosa (me sudaban las manos) - No entiendo

-Noto que mueres de ganas de besar a alguien y estar en el lugar de varias esta noche – dijo sonriendo, joder esa sonrisa que a cualquiera incita.

Rayos, realmente estaba nerviosa en ese momento.

-ja ja ¡Estás loca y borracha amiga!- exclame riéndome nerviosamente.

-Ven acá- me abrazo fuertemente- estoy ebria, pero te conozco desde que tenías 10 años mi pequeña merry.

Sonreí con una mueca y un gesto de confusión

-vaya Ana – me limite a seguir sonriendo- pues no sé qué decir, sí que estas ebria

-sígueme- me dirigía abriéndose paso, hacia su habitación.

Entonces la seguí

-Yo sé que es difícil, y apuesto que ni siquiera has tenido tu primer beso homosexual ¿Verdad merry?- dijo sonriendo comprensivamente y con tono suave.

-Me siento confundida- dije con toda sinceridad.

-No te voy a besar pero sé que mueres por probar, pero dejare que seas tú quien tome la iniciativa- dijo acercándose hacia mí y planto su mirada fijamente en mis labios.

Entonces teniendo sus labios tan cerca de los míos me limite a esquivar su mirada pero fue en vano, al devolver la mirada sus labios y los míos se separaban por milésimas, se acercaban lentamente y fue ahí donde tuve mi primer beso con una chica.