Sin Señal © [Gay/BL] MA#2

》》Final Erick & Malcom《《

Bueno, como ven este es el final/no final (ya que tendrán apariciones y probablemente POVs luego) pero se va acercando el fin, falta un poco pero no tanto. Yo apostaría a menos de 10 capítulos (sin incluir finales alternativos)

En fin, comencemos

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Malcom's POV

Horas luego del incidente con el maniático y sobreprotector novio de Milo, logro arribar al sitio del mío el cual no espera mi visita, pero de todos modos decidí pasar. Una vez en la puerta no caigo en un rostro familiar observándome, supongo que se trata de una persona desconocida cuando finalmente oigo su voz.

"Parece que tu visita también es una sorpresa, ¿verdad?"

Sostiene la puerta mientras me regala una indigesta mirada. No entro, no muevo ni una minúscula parte de mis músculos, sólo lo observo en trance. Sus ojos marcaban parte de la noche, ya lo había notado antes. Zach era realmente buen mozo, no toleré admitir que desgastaba su hermosura nata en un  tipo ordinario como lo era yo. No tenía nada que destacar, mi inteligencia era lo único que me salvaba pero luego en cuanto a atractivo no había nada que envidiarme. Era Bat; el arrogante del grupo, el hastiado sujeto con una avalancha de problemas personales que irritaban y nublaban su verdadera personalidad.

"Así parece"

Pero claro, Zach no tenía esos preciosos luceros inenarrables y una piel morena divina, o un cabello codiciado que haría morir a cualquier persona calva. Zach no era, lamentablemente, mi Erick. Por eso aparté su mano de la manija y la cubrí con la mía, la cual se hallaba protegida por un deshilachado guante navideño que mi padre me había regalado luego de cumplir los quince. Zach me examinó con fuerza, tratando de descifrar qué hacía mal. Pronto comprendió al mirar mi bufanda, la bufanda que Erick me había obsequiado al perder la mía propia. Di un paso adelante, alejándome del pórtico y aferrándome fielmente a mi incomparable persona única, Erick.

Muy tarde, pero mejor que nunca, comprendí qué era lo que estaba esperando y estaba esperándolo a él. Alguien que notase mis empeños, que disfrutase mis enojos y que soportase mis rabietas, porque al fin y al cabo, lo hacía no con el fin de alejar sino con el fin de mantener a mi lado. Hoy lo decidí, opté por quedarme con él y no pensaba echarme atrás. Zach, de manera caritativa, ayudó con mis bolsas. Continuamos dialogando hasta que el ascensor llegase y en cuanto lo hizo, los dos dejamos atrás los malentendidos pasados, ya era tiempo de empezar una buena y nueva vida.

Arribamos al piso en donde residía Erick, todo estaba en penumbras. Encendimos la luz, los pasillos se iluminaron uno tras otro como solía pasar en una película demoníaca de horror. Nos mantuvimos al tanto del otro, chequeando nuestros pasos con pura precaución pero al mismo tiempo sin darle demasiada importancia. Pronto me planté frente a la sólida y consistente puerta que había cruzado múltiples veces, algunas ocasiones incluso dolido pero otras saltando de alegría. Esta vez no escaparía de la primera opción. Zach relataba sus bromas sobre mi inasistencia mental, pero esa mente de la que se burlaba intuía algo malo dentro de la habitación, sentía y percibía que por más que la curiosidad me delate no debía tocar esa puerta... ¿pero por qué no abrirla?

Y eso hice, saqué mi llave. El hemisferio izquierdo de mi cerebro pedía a gritos que escuchase su razonamiento, el cual esclarecía que entrar en una propiedad privada sin consentimiento era un allanamiento de la ley, lo cual se penaba con la cárcel. Sin embargo, el hemisferio derecho, el hemisferio de las emociones me alentaba a continuar con mi acto ilegal y en cuanto abrí la puerta sigilosamente escuché voces, risas y algo que hizo debilitar a mi corazón: gemidos y jadeos. Zach me miraba paralizado mientras yo sostenía mis cosas. Me quité bruscamente la bufanda y caminé hacia la habitación en la que tantas veces había estado, ya sabía lo que vería en su cama y no fue sorpresa cuando lo vi, frente a mis ojos, con un chico rubio casi canoso y pálido. O al menos fue pálido cuando me miró, al igual que Erick quien al verme casi lanza al chico por la ventana y se levanta colocándose su ropa interior. Obviamente, no esperé.

Tan pronto como lancé su bufanda al chico nuevo como ramo de bodas me aferré a las distintas emociones que enfrentaba en esta situación: decilusión, furia, tristeza, agonía, todas cosas pesimistas y depresivas. Zach al verme salir de su habitación con la cara empapada en lágrimas me cubrió con su chaqueta, por más que tuviera una puesta. Si Erick fue tras de mí o no permanece en misterio, pero no me rindo al caminar y seguir caminando hasta que sin darme cuenta alcanzo llegar al lamborghini de Zach, quien abre las puertas gustoso.

La noche no tenía mucho para contar, mas que los sollozos que recibía por mi parte. La mano de Zach era cálida y me ofrecía un sustento duradero pero fue su abrazo lo que hizo que me partiera en sus brazos, sin importarme las formalidades lloré en su pecho apesar de apenas conocernos y de no haber tenido la oportunidad de charlar, debía llorar.

Las cosas se calmaron, eventualmente. Ni Zach ni yo intercambiamos palabra tras separarnos, simplemente me condujo de vuelta a la universidad.

"¿Estarás bien?"

Pregunta una vez me bajo en mi destino, le sonrío con un grave pesar y suspiro. Siento los párpados cayéndose de mi cara, al igual que mis ojos debido al llanto. Le entrego la mejor sonrisa que puedo dar, y tras aquello asiento con la cabeza.

"Intentaré"

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Al día siguiente me levanté temprano, cosa rara en un murcielago diría Milo, y voy en camino a la oficina de la rectora quien, tras varios golpecitos en la puerta, abre. Se sorprende al verme, pero no me echa en absoluto. Sonríe y me invita a pasar con su agradable y reconfortante aire materno.

"Señora, no planeo molestar pero... ¿habrá vacante disponible para algún traslado?"

Y ella deja de servir el té para tornar su sonrisa a una increíble melancolía, luego asiente.

"Sí, hay vacantes"

Y con ello dejo ir un grave error en mi pasado, ahora enfocándome al presente y el futuro que me aguardaban con inexplicables anécdotas y errores, pero ya estaría listo. Ya estaría listo para mi próxima guerra romántica.

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Recuerden, no es el final final, sino que ya no habrán más capítulos narrados desde su punto de vista :'v

Dos capítulos seguidos ke sta pazando aki xdxd

En fin, loz jamoh chuches ♡ adieu

xx