Recibir ese mensaje por facebook me tomó por sorpresa. Si bien tenia pensado ir a hablar con Vivi sobre mi hija y la relación que yo pretendía tuviera con sus abuelos, me sorprendió que estuviese tan interesada en hablar directamente conmigo.
A las 18 comencé mi camino al cafe donde había pactado mi cita con mi ex suegra. Llegue unos minutos antes que ella y pedimos algo para tomar.
-¿Como estás? - preguntó sin rodeo alguno
-Bien, contenta por el casamiento de mi hermano ¿Como están todos los Driussi?- dije intentando eludir el tono de su pregunta que era naturalmente por mi estado de animo después de dejar a su hijo.
-Sabes que te pregunto Bar- la noté tan madre, tan preocupada y amorosa, tan ella que me imposible no abrir mis sentimientos a aquella mujer que quería tanto como a una madre.
-Yo estoy bien, una separación no es la muerte y yo lo voy a superar. Mi hija es feliz y tiene un padre que la ama al igual que yo, mis únicos intereses son esos.
-Me dijo que discutieron por Ana- dijo un tanto disgustada ¿Será que no le agrada que Sebastián esté con ella?
-No por ella- tome mi celular para mostrarle la imagen que me había indignado.- si no por esto- extendí mi celular y lo tomó mirando sorprendida la pantalla.
-Para que sube estas cosas a internet.
-No le importó que mi hija pueda lastimarse, es así. Yo cuando lo vi hable con Sebastián y le dije que cuide a nuestra hija, que la cuide de todos y ella está incluida en todos. Si para ella que su hija se trepe a ciertos lugares es gracioso, para mi no. Espero que respete mis formas o me voy a ver obligada a prohibir que se acerque a Sofi. Lo cual no quiero porque es la novia de su padre.
-No quiero que Sebastián esté con Ana. Yo creo que mi hijo se merece algo mejor. Como vos.
-Vivi, el es feliz con ella y me alegro muchísimo por el. Supongo que también voy a cruzarme con alguien que me ame y al cual ame como lo hice con Sebastián
- No se den por vencidos, Seba te ama y vos a él... No tiren al tacho todos estos años de amor Barbie.
-Yo creo que la gente no cambia, lo noté y no voy a sufrir por nadie.
-Las madres de mis nietas son para mi, hijas. Y no quiero verte mal, sé feliz Barbie, se feliz y hace feliz a mi chiquita. Sebastián me va a escuchar, puede tener la edad que tiene pero soy su madre y tengo la obligación de tirarle las orejas cuando lo merece. -Sonreí ante el comentario, la humildad y simpleza que veo en Sebastián, es la misma que toda su familia. Me encanta.
-Lo sé, yo te quiero mucho también, y espero qur ambos seamos felices. Para mí, mi principal objetivo es mi hija y su felicidad, sus cuidados y su vida. Lo demás después. Se que para Sebastián también. Debe ser difícil ser el único padre en algunas situaciones.
Seguimos hablando horas y horas hasta que decidimos ponerle fin a nuestro encuentro, no sin antes pactar que no le diría a Sebastián que vio la foto por mi, no era bueno.