Fools [One Shot] Damon & Elena

Fools - Parte Única

"Tu alma gemela no es alguien que entra en tu vida en paz, es alguien que viene a poner en duda las cosas, que cambia tu realidad, alguien que marca un antes y un después en tu vida."

-Mario Benedetti, El último romántico.

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-Joder -digo jadeante al ver como Elena se desnuda cerca de la ventana para ir a la cama.

Su piel se ve tan hermosa bajo las suaves luces de su habitación, que en realidad no iluminan mucho, pero mi vista de vampiro me permite ver hasta sus perfectos poros levantados por el frío de esta fría noche de invierno.

Me siento miserable por espiar a la novia de mi hermano desde afuera de su casa, pero es que ella es idéntica a Katherine y mi corazón ha comenzado a confundir mis malditos sentimientos por ella.

Esto no está bien... Elena es la novia de Stefan, no es Katherine por mucho que se parezcan.

Yo no voy a meterme en esa relación, no otra vez. Ya sufrí lo suficiente en el pasado por una situación más que similar.

Doy un respingo y me muevo a velocidad vampírica para poder ocultarme detrás del árbol en el que estoy. Elena está asomándose por la ventana casi como si supiera que algo anda mal.

¿Ella me habrá visto? ¿Se habrá dado cuenta de mi presencia? Eso sería catastrófico.

La observo en silencio y veo sus lindos ojos marrones, esos que me ven con odio y repulsión cada vez que me dejo llevar por mis impulsos sicópatas... esos ojos que ven con amor a mi hermano, esos ojos que siempre me vuelve loco en silencio.

Y si, estoy enamorado de una mujer que nunca podré tener. Una bella chica que siempre escogerá a Stefan. ¿Patético no?

Luego de unos segundos, Elena retrocede y cierra las cortinas. Ruedo los ojos sabiendo que eso no me detiene para poder verla, no desde que me dejó entrar a su casa y desde que me di cuenta que no cierra su ventana por completo.

Luego de esperar unos minutos tratando de agudizar mi oído, escucho la lenta respiración de Elena, lo cual significa que ella se ha quedado dormida al fin.

Como cada noche desde que ella me invitó a pasar, entro a la habitación por la misma ventana que ella ni siquiera intentó cerrar hace un rato y tal como una brisa repentina me quedo paralizado junto a la cama viéndola muy cerca de mi. Había estado deseando este momento todo el maldito día.

Elena duerme plácidamente boca arriba y sonrío al verla tan tierna y despreocupada en sus seguramente dulces sueños.

-¿Por qué rayos eres la novia de Stefan? -susurro con el corazón doliendo mientras la observo dormir un poco más de cerca.

Stefan no sabe acerca de las visitas nocturnas que le hago constantemente a su novia, y si se entera, de seguro me clava una jodida estaca en el pecho.

Esta fuerte atracción hacia mi "cuñada" me ha hecho arriesgar mucho, pero Elena lo vale todo, vale ese inmenso riesgo de perder a mi hermano otra vez... Elena se ha metido en mi roto corazón y me ha hecho sentir otra vez. Ninguna mujer además de Katherine me había hecho sentir esto jamás.

Elena es casi como un ángel para mi, desde la noche en la que la conocí en medio del camino, supe que algo nació dentro de mi.

Esa noche ella estaba triste, preocupada y cabreada con su novio, el idiota de Donovan.

Ella estaba confundida y le dije lo que supuse quería escuchar. Vi en sus ojos que quería lo que todo el mundo quiere, un amor que te consuma, pasión, aventura, y un poco de peligro, todo lo que yo podría ofrecerle justo ahora.