1.Capitulo

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Me gustaría decir que me desperté por los tenues rayos de sol que atravesaban las ventanas o por el sonido de los pájaros cantando, pero siento deciros que para nada ha sido así.

Para empezar, hoy es mi primer día de clase, lo que significa madrugar, sinónimo de "Edén reventando despertadores contra la pared".

Segundo, al tener que madrugar, como es lógico, no me he despertado por mí misma, si fuese por mí dormiría hasta las once... Vale, a quien voy a engañar, la una del mediodía como muy pronto.

Y por último, yo creo que nunca he escuchado cantar a los pájaros lo suficiente alto como para despertarme, vamos, si el despertador apenas lo escucho.

Volviendo al presente, está sonando el irritante e insoportable despertador, y como ya lo he explicado, al no ser muy buenos amigos lo he tirado de un manotazo, ocasionando que se rompa.

Oh, oh, estoy en problemas.

-¡Edén! ¿Que ha sido ese golpe? ¿No habrá sido otra vez el despertador, no?- grita mi madre desde la planta baja, seguida de una carcajada de su pareja.

-Eh... No, no... ¡Que va!-

Os explico mi madre se gasta más presupuesto en despertadores que en comida, y eso ya es mucho decir.

Ella y yo tenemos una confianza inmensa, sé que siempre voy a poder contarle todo lo que quiera de cualquier tema, sea algo importante o inverosímil.

Ella y su pareja son las personas que me ayudaron respecto al bullyng, lo hicieron más ameno y consiguieron que no lo pasara tan mal.

Después de esta pequeña desviación de lo que estoy haciendo, volvamos a lo importante.

Hoy es mi primer día en el instituto "High Know" , sinceramente tengo los nervios a flor de piel, todas las personas son nuevas, es decir, yo no las conozco de nada, a parte de que voy a estar bastante pérdida respecto a aulas, profesores y donde este la cafetería.

Oh me estoy empezando a agobiar y eso no es bueno,
debería relajarme antes de que me ponga a hiperventilar.

Lo mejor es que deje de pensar en eso y me empiece a poner la ropa, no quiero llegar tarde el primer día de clase y causar mala impresión.

Como es típico en mí, me pongo mis vaqueros cortos, con mi sudadera holgada rosa y mis Super start blancas.

A decir verdad... No sé si se le puede decir que estén blancas, tiran más bien a un color...Caqui.

¡Eden concéntrate!

Como siempre me pongo a divagar del más mínimo detalle, y me distraigo de lo primordial.

Bajo las escaleras como si de una estampida se tratase y desayuno a una velocidad muy poco propia de mi, dejando sorprendidos a mi progenitora y su novio, a los cuales les doy un beso en la mejilla ante de salir de casa.

Una vez en la calle comienzo a caminar hacia el instituto con los cascos puestos, por lo que me han dicho queda a diez minutos de mi casa.

La canción "Snap out Of It" de Arctic Monkeys retumba en mis oídos cuando veo el instituto, es mucho más grande y con mucha más gente que en las fotos.

Durante un par de minutos me quedo observando el edificio, hasta que pienso que es mejor que entre, más que nada por no parecerme a una turista por Berlín o por las calles de Nueva York.

Lazos rojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora