Capitulo I

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Yo, Jungkook, nací en un pueblo pequeño, alejado de la ciudad, llevaba una vida buena y sana.
La escuela era una de las cosas que mas disfrutaba, pues debido a que era un pueblo pequeño, casi todos los estudiantes nos conocíamos entre sí.
Estudiaba con mis mejores amigos de la infancia, todo iba bien... Mis notas eran las mejores.
Mi familia era pequeña, era hijo único, todo era perfecto.
Pero, saben que no todo es como en los cuentos de hadas, tu vida no puede ser perfecta para siempre.
Recuerdo claramente ese día, eran dos días antes de mi cumpleaños número 14. Yo había asistido a la escuela como normalmente lo hacia, aunque la única diferencia es que ese día tocaba quedarme hasta tarde en la biblioteca.
Al salir de la biblioteca, como quedaba un poco de tiempo, decidí aceptar la invitación de uno de mis mejores amigos a una heladería.
Ya cuando estábamos ahí, recibí una llamada de mi madre.

Madre: Jungkook, hijo donde estas?... -su tono de voz parecía ser serio-

Jungkook: estoy en una heladería madre, pasa algo?

Madre: tu padre y yo necesitamos hablar contigo, te esperaremos.

Jungkook: esta bien madre, ya falta poco para acabar mi helado... Saldré a casa ni bien termine.

Madre: esta bien hijo. -colgó-

Debo confesar que aquella llamada despertó un mal presentimiento en mi... Que acaso estaba mal en mis notas? Eso no era posible, y no es que sea un presumido, pero últimamente mis notas habían mejorado.
Aunque para ser sincero hubiese querido que no estén bien, y tener la seguridad de que mis padres se referían a eso... Pero no lo era, así que estaba aún más preocupado.

Jaejoong: Kook, estas bien?

Al parecer aquella preocupación se veía reflejada en la expresión de mi rostro, pues hasta Jaejoong, mi mejor amigo de 18 años, lo había notado.

Jungkook: -en mi rostro dibuje una pequeña sonrisa- si, lo estoy... -reí ligeramente- woah!... El helado si que esta delicioso.

Jaejoong: eish... Te conozco niño bobo, se que no estas bien... Pero supongo que no quieres hablar de eso... -rió ligeramente- así que... Si!... Esta delicioso...

Jungkook: -reí ligeramente y seguí comiendo mi helado-

Sus padres y los míos se conocían desde antes que él naciera.
Él y yo éramos como hermanos, aunque no de sangre, solíamos hacer casi todo juntos.

Jaejoong: realmente estaba rico...
-había terminado su helado- mm... Aún no terminas? No te gusta?... -ríe-

Jungkook: si me gusta... -metí a mi boca una gran cucharada de helado-

Jaejoong: cuidado, come despacio Kook... -sonríe-

Él tenía razón, estaba demorando en terminar aquel helado.
Tal vez inconscientemente lo estaba haciendo lento, para que el momento de ir a casa no llegara... Algo, en el fondo, me decía que no vaya...
Esta sensación ya lo había sentido anteriormente.
En aquella ocasión mi madre también me llamo, justo cuando estaba en clases de matemática, cada vez que recuerdo aquel día, en mi garganta se forma un nudo que empieza a apretar conforme más recuerde.
Como se trataba de una llamada de mi madre, pedí permiso al profesor para salir un momento.
Una vez afuera conteste.
Cuando conteste, solo me basto unos segundos para notar que mi madre estaba llorando, y cuando comenzó a hablar lo confirmé.
En esa llamada mi madre me dijo que mi abuelo paterno, que había permanecido en el hospital durante casi 1 año, había fallecido.
En ese momento mi celular escapó de mis manos, y cayó al suelo, al mismo tiempo en que mis lágrimas comenzaron a caer, y mis rodillas empezaron a temblar, de tal manera que permanecer de pie se me hacia difícil, y esto hizo que cayera de rodillas y comenzara a llorar sin poder controlarme.
En ese instante, mi profesor salió del salón y se me acercó rápidamente.
A pesar de que mi voz se había echo entrecortada, el profesor pudo entender lo que decía.
Lo que él hizo, fue postergar mi examen, y llamar a Jaejoong, que estaba en otro salón.
Cuando él llego, pudo notar mi estado así que sin dudarlo, se dispuso a acompañarme.
Y bueno, cuando llegue al hospital... Ya
se imaginaran lo que paso, siento no poder terminar de contarles, pero ha lar de eso aún duele...
Como ya les había dicho la sensación que tenia ahora era muy similar a esa, y eso me asustaba.
Al terminar mi helado, no tenía más excusas, así que le dije a Jaejoong lo que había pasado y me despedí de él.
Empecé a caminar en dirección a mi casa...
Al llegar, entre y observe a mis padres, al notar la expresión de sus rostros me puse aún más tenso.

"LO DESCONOCIDO QUE CONOZCO" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora