Parte 1

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Era Viernes por la noche y mi padre me había llamado para pedirme que hiciera la cena, ya que el y Jenna no tardaban mas de hora y media en llegar a casa.
Me habían dejado sola durante tres semanas y media y hasta ahora me llamaba solo para decirque que estaban a punto de llegar y cocinara algo para ellos, genial, entre más pasa el tiempo peor me trata.

Cociné un spaguetti a la boloñesa con pan de ajo y acomodé la mesa para cuando ellos llegaran; justamente a las 11 se escuchó ruido en la puerta y los vi entrar. Mi padre me abrazó y me dió las gracias por la comida que preparé antes de sentarse junto a su esposa a cenar, pero ella nisiquiera me saludó.
-Estaré en mi habitación, me llaman cuando acaben para lavar los trastes- y subí las escaleras hacia mi cuarto.
Abrí mi ventana un poco para que entrara el aire de la calle y me recosté en mi cama.
Me sentía vacía...
Hace ya dos meses que Jenna despidió a la señora Brown que era la que me hacia mis platillos favoritos, lavaba, planchaba, y todo en la casa, y vivía aqui con nosotros, solo se iba algunos fines de semana a su pueblo. Pero me acompañaba a diario aqui y consentía como una abuela lo haría con su nieta. La extrañaba demasiado.

Despues de un rato ya no se escuchaba ruido y bajé, estaban los platos limpios y la mesa levantada y no habia rastro de mi padre y Jenna. En la cocineta estaba una nota, decia: -Sophi, yo limpié todo para que ya no tubieras que hacerlo tu, y llame a la señora Brown, ella regresa a trabajar a la casa desde el lunes. Fuimos a pasar el fin de semana con los padres de Jenna, regresamos el domingo en la noche, te amo hija. Tu papá.-

Me sorprendí un poco, mi papá trataba de mejorar un poco, tal vez el tiene una idea de lo sola que me siento y por eso llamo a la señora Brown para que regrese a cuidarme.

Tomé un vaso con leche y volví a subir a mi habitación, otro fin de semana ás que pasaba sola y encerrada.

Eran 25 minutos para la una cuando entre el silencio de la calle comencé a escuchar lo que se escuchaba todas las noches. Desde hace dos semanas o más, un chico que parecia ya un vagabundo por su ropa y cara sucia y cabellos despeinados se sentaba en la banqueta de enfrente de mi casa a llorar y cantar algo que sonaba como una canción de cuna, con una linda y frágil muñeca de trapo en sus manos, a la cual abrazaba y acariciaba como si fuera una niña pequeña de verdad.

Se veía lindo a pesar de estar sucio, es delgado, su cabello negro, con unos ojos hermosos verdes , labios rosados y bien delineados, y tez muy muy blanca.

Me gustaría ir y preguntarle porque llora, que es lo que lo hace sentirse tan mal, el porque esta solo o en donde se encuentra su familia, cual era la razon por la cual siempre estaba completamente solo y triste.

Y me decidí...iba a hacerlo...a bajar, salir y hablar con el vagabundo.

Tal vez el me ayudaría a sentirme mejor o por lo menos escuchar y desahogarme sobre mi vida y el sobre la suya...

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Espero les guste la historia, aun no soy experta en esto de narrar y escribir, pero sus sugerencias haganmelas saber porfa:3
Me gustaría mejorar, de igual manera dejenme su opinion acerca de la hitoria. Gracias :*

"La Dama y el Vagabundo"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora