Capítulo 4

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                 (narra Percy)

                       FUEGO

Estaba aturdido, no podía creer lo que acababa de pasar, había caído, como un imbécil y ella, la colegiala tonta se había burlado de mi, pero tenía que admitir que haberla besado fue fantástico, ella era tan atrayente, sus labios dulces tan adictivos, ella era mi perdición, salí del bar, sin despedirme, no quería permanecer allí, todo me resultaba tóxico, conduje distraídamente a mi departamento, las calles aun con transeúntes, las luces de los edificios, pase muy cerca de la Atlantic Tower y la Acrópolis Tower, cuanta razón tenia Malcolm, pronto llegara tu tormento, esas palabras se repetían en mi mente como recordatorio de lo estupido que he sido, ni siquiera sentía culpa por Rachel, nunca la había sentido, pues sabia que lo nuestro no era real, llegue a mi departamento, no tenia sueño así que me recoste en un sofá cerca de la pared de vidrio observando las calles nocturnas de Manhattan, pero no importaba cuales fueran mis intentos, siempre mi mente acababa reviviendo lo que paso en el baño de ese bar, ciertamente lo que paso allí fue mi culpa, si no hubiera sucumbido ante la tentación que ella me resultaba, no estaría lamentandome, pero es que no podía imaginarme con ella, eramos tan distintos, a mi me gusta tener el control y ella parece indomable, ella es revoltosa y obstinada y yo perfeccionista, ni siquiera podemos llevarnos bien por mas de tres minutos, solo había algo en lo que congeniábamos, ambos eramos amantes del poder y el control, me lo había recordado durante el beso, siempre hay que tener poder y control, y yo había olvidado eso, le permiti tener el control, una niña tonta había logrado sacarme de mi zona de confort y yo había estado a gusto con ello, y si antes la odiaba ahora estaba seguro que eso se había duplicado, incluso había sentido celos, nunca había experimentado los celos y ella logro hacermelos sentir, eso no era buena señal, no podía pensar en ese beso sin sentir que desde ese momento la había reclamado como mía, tal y como lo hacia con las demás, solo había una diferencia, ella no era como las demás, que hacían todo lo que yo decía y no cuestionaban nada, ella era diferente, lo que hacia que tener algo con ella fuera aun mas tentador de lo que ya era, ahora mismo deseaba ir con ella y culminar lo que habiamos empezado, mi celular comenzó a sonar, frustrado me di cuenta que era Rachel.

- ¿que sucede Rachel?

- solo queria decirte si quieres venir a mi departamento, Percy tiene mucho tiempo que no estamos juntos.

- esta bien, voy para allá.- dije con voz cansada.

- te espero, no tardes.

Colgó y yo tome mis cosas y sali rumbo a su casa, el trayecto fue rápido, al llegar Rachel me esperaba con una sexy bata negra semitransparente, pero esto no logro ningún efecto en mi, mi mente viajo varias horas atrás, aprete fuertemente los ojos tratando de sacar aquellos pensamientos, ella se acerco a mi y me beso apasionadamente, pero yo no estaba allí, yo estaba con la colegiala, le seguí el beso a Rachel, pero para mi ya no era ella, torpemente fuimos caminando a su habitación, cuando su cabello callo sobre la almohada, ya no era pelirrojo era rubio, la besaba pero mi mente pensaba en otra, sus besos no conseguian encender mi pasión, cuando la colegiala con solo una palabra en el oído lograba hacerlo, sus labios no eran adictivos ni tan suaves como los de Annabeth, era cruel estar con ella pensando en alguien mas, sabia que estaba teniendo sexo prácticamente con un cuerpo sin cara, que la imagen de otra persona compartiendo el momento conmigo era solo una ilusion, que era Rachel no Annabeth, y cai en la cruda realidad cuando Rachel se recostó a mi lado, me di cuenta que todo había sido producto de mi imaginación, que con la que había estado era Rachel no ella, mi cerebro me estaba pasando  una mala jugada, aleje a Rachel y me levante, estaba frustrado, no podía dejar que esto me sucediera, camine al mini bar de Rachel y me serví un poco de Whisky, me pase las manos por el rostro tratando de aliviar un poco mi frustración, pero nada, nunca me había sucedido esto, senti unas manos recorrer mi torso desnudo, cerré los ojos, de nuevo mi imaginación jugando conmigo, voltee el rostro, Rachel me abrazaba por detrás, me incomodaba su contactó.

Crazy In LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora