My Boy

Uno

Estoy en el estacionamiento de la escuela, el profesor de historia falto, lo que significa que tengo 2 horas libres antes de entrar.

-Nick, vamos por un helado ¿Quieres venir?- estos son mis amigos. Aiden, su hermana Abby, Taylor y Will. Vamos al parque de enfrente, al carrito de helados.

Tomamos los helados y los chicos querían dar una vuelta pero yo me quede a pintar el gran paisaje del parque. Luego de unos minutos veo que algo cambia en él. Es ella debajo del árbol llorando, otra vez.

-¿Siempre qué encuentre estarás llorando?- me hice el chistoso para animarla. Ella suelta un pequeña risa ronca- ¿Puedo sentarme?

-Eh, sí.

-¿Tu nombre?

-No es de tu incumbencia además no te llame aquí para que vinieras.

-Solo quería ver si necesitabas algo, pero me estoy dando cuenta de que no la necesitas, adiós.

-Lo siento, no quería sonar así es solo que he tenido un mal día. Me desquite contigo, lo siento. Me llamo Alexa ¿y tú?

-No es de tu incumbencia- digo con la voz chillona y ella me empuja con su hombro.

Sé que estarán pensando que dos personas que se conocen hace dos segundo se comporten así pero créanme, si la viera ustedes harían lo mismo.

-Es asombroso.

-¿Ah? ¿A qué te refieres?

-A tu paisaje, es realmente maravilloso, se nota que te gusta esto.

-Es más que eso, no solo me gusta es... no sé cómo describrilo.

Ella toma mi cuaderno y ojea los demás dibujos. Para en uno, lo observa, acaricia la cara de mi madre, es su retrato.

-¿Ella quién es?

-Es mi madre, siempre la hago posar para mí- ella ríe y continúa dando vueltas a las hojas, hasta que llega al fin.

-Escucha, debo entrar a clases pero si estás aquí cuando acabe tal vez podríamos ir a tomar algo, hay un lugar muy bueno aquí cerca.

Alexa arquea su ceja y me mira con una sonrisa.

-¿Siempre invitas a chicas desconocida a salir?

-Sí, si son tan lindas como tú- rueda sus ojos y asiente con gracia.

-Estaré aquí con una condición.

-¿Y esa condición es?

-Que me dejes tus cuadernos, quiero seguir viendo tus obras- hace un gesto gracioso con sus manos, le entrego mis cuadernos, me acerco a ella y beso su mejilla.

-Cuida de mis bebes.

-Sí, ya vete.

El día va bien sino fuera porque ahora me toca matemáticas con el viejo Blorsh. Es un dolor en el culo.

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Está en una banca, dándome la espalda. Me acerco tratando de producir el menor ruido posible y tapo sus ojos.

-Si gritas no te hare daño- susurre.

De un momento a otro, solo veo el cielo, llevo mi mano a mi ojo izquierdo.

-Eres un idiota, no debiste hacer eso.- ella me ayuda a levantarme y se ríe.

-No es gracioso- trato de parecer enfadado.

-Si lo es, vamos a ese lugar que dices que esta por aquí.

Cuando llegamos le digo que busque una mesa que le guste, que yo iría a pedir las bebidas y algún bocadillo. Voy hacia ella y dejo las cosas en la mesa.

-Supuse que te gustaría los pastelitos de vainilla, tienes cara de que odias el chocolate.

-Supones bien, me sorprendes.

-Bueno, ¿Eres de aquí?

Ella se tarda unos minutos en contestar.

-No.

Bien, no debo tocar ese tema ya me quedo claro.

-Tu turno, pregunta lo que quieras.

-Mmm... ¿Cuántos años tienes?

-Dieciocho.

-Yo igual- me mira- Sabes, no quiero ofenderte pero... aparentas más, eres enorme- hace señas con sus manos. Yo solo sonrió, siempre me dicen eso.

-Lo sé, me lo dicen mucho.

Pasamos es tiempo charlando de cosas sin sentido. Pero algo que me intereso es saber cómo aprendió a golpear así. Cuando salimos de allí me ofrezco a acompañarla a su casa, pero lo rechaza. Está bien, ya es mucho por hoy.

-Ya es muy tarde para que coloques hielo sobre eso- señala mi ojo- quedara morado.

-No importa, así no me olvidare de ti- ella se parte en una carcajada.

-Te golpeare la próxima vez para asegurarme- se acerca y besa mi mejilla- Nos vemos.

-¿No me darás tu número? ¿Cómo se supone que me veras otra vez?

Ella extiende su mano y le doy mi celular, guarda su número y me lo entrega. Sonríe y comienza a alejarse.

Abro los contactos y cambio su nombre por el de "Golpeadora". Sonrío y voy a casa.

¡¡Primera parte!! ¡AHHHH!

¡Yo estoy emocionada, espero les guste!

Un abrazo.