CAPÍTULO I

35 2 0
                                    


Estoy haciendo las maletas mientras escucho música a todo volumen en mi habitación.

La verdad me da igual mudarme, no me afecta en lo más mínimo debido a que no tuve amistades en la High School ni en el vecindario o al menos no amistades verdaderas, sólo me hablan porque mis padres tienen dinero. Maldita gente interesada e hipócrita. Pero en fin, prefiero andar sola que mal acompañada, aunque si me gustaría tener ese tipo de amistades que te quieren por lo que eres y no por lo que tienes. Mmm no sé, tal vez en California me vaya mucho mejor, o al menos eso espero.

•••••

Escucho el sonido de la alarma.

6:30. La apago y me quedo un rato tirada en la cama mirando al techo. "Ya es hora de irse"

Me levanto al baño con él ánimo de perro con el que suelo levantarme todas las mañanas. Me duché, lave mis dientes y fui a la habitación para vestirme.

Ya escuchaba en la parte de abajo a mis padres haciendo las últimas cosas.

Decidí colocarme un pantalón de corte alto, un tops blanco y un suéter rosa pastel amarrado en la cintura con unos Vans del mismo color del tops. Mi cabello no estaba del todo bien para llevarlo suelto así que decidí hacerme una trenza floja con un maquillaje suave, muy poco llamativo.

!!!SHERLINEE!!! Escuche gritar a mamá así que baje rápidamente.

-¿Éstas lista ya? -Preguntó sirviéndose una taza de café.

-Ujum. -Conteste aun medio dormida.

-Que linda mi niña. -Dijo papá mientras besaba mi frente.

-Gracias. -Conteste tapándome la boca mientras bostezaba.

-Bien, ya estamos listos, nos vamos. -Dijo papá.

El viaje no estuvo tan mal, excepto por las dos horas y media de retraso que tuvo el avión y un señor con sobrepeso, que iba a mi lado, durmiendo con la boca abierta casi babeándose, pero fuera de eso, todo bien.

Llegamos a la nueva casa, la verdad no estaba nada mal, había una sala lo suficientemente espaciosa con grandes ventanales y cortinas largas muy lindas que hacían juego con el color de las paredes y los muebles. La cocina era también espaciosa a pesar de que se unía con el comedor. Abajo había dos habitaciones y una de ellas con baño propio. En la parte de arriba había tres habitaciones y las tres con baño. Escogí una de las habitaciones de arriba y decidí dormir un rato, estaba un poco agotada por el viaje.

Al despertar note que había un papel sobre la mesa.

"Tu padre y yo tuvimos que ir a la empresa por cuestiones de trabajo. En la cocina esta tu cena, nos vemos más tarde"

Por suerte ellos habían venido un mes antes para asegurarse de que la casa tuviera todas las comodidades.

Busque mi laptop y me puse a ver una película en Netflix mientras comía la cena.

No sabía qué hacer, la verdad me aburro mucho cuando estoy sola, y aunque ya debería estar acostumbrada simplemente no termino de estarlo.

Unas horas más tarde siento que llegan, así que baje y escucho que discuten. Oh Dios, de seguro es por una tontería

-¡Te dije que debimos haber ido al banco antes de ir a la empresa! -Escucho a mamá gritar.

-¡Ay por favor Alice! ¡Podemos hacerlo mañana!

-¡Mañana tengo más cosas que hacer Cameron!

-¡Estoy cansado Alice! Iré a dormir.

-¡No me des la espalda cuando te hablo Cameron Thompson!

RELEASEDWhere stories live. Discover now