Problemas Amorosos [DHMIS]

Jugando con magia

― ¿Que?

― Yo me enamore de ti desde que te vi, ¿okey? ¡E... eras perfecta! Amable, considerada, ¡casi me matas! Ningun otro maestro a llegado ni a acercarse, pero entonces llego Meat y te empecé a perder, ya lo entiendo, te amo ―Le interrumpio Paige.

― Pero yo no Tony.

...

Tony quedo callado, con su corazon destrozado una vez mas, no hacia mas que mirar a Paige, cerca, casi pegados sus rostros, pero la chica libreta solo miraba con indiferencia y una mirada fria.

― Yo, me canse de esperar... Y crei que te habia pasado lo mismo, lo siento Tony... Pero no pasara ―dejo el reloj y abandono el lugar, mientras Tony se sentaba de nuevo, solo, acompañado de nuevo solamente de unas botellas de cerveza.

~~~

― ¿Entonces que tenemos que hacer?

― Ya te dije, hay que recordarle a David el amor que tenia hacia Cold ―El chico mariposa y la fan de las laptops estaban mirando por una ventana a David y Cold, quienes preparaban la cena ya que casi era hora de dormir, Cold tenia mas una cara triste, quiza ya se habia dado cuenta que Meat no le prestaba atencion como antes.

Shrignold de repente tuvo una idea.

― ¿Y si les preparams una cena romantica?

― ¿Como en las peliculas?

― ¡Si!

― Shrig, eso nunca funciona.

―Vale la pena intentarlo, laptop ―Entonces chasqueo los dedos y aparecio una mesa com unos platos de cpmida, con dos sillas y una vela, que acompañados de la noche y luz de la luna hacian el ambiente perfecto, faltaba que los dos hombres cooperaran.

― Okey, ¿desde cuando puedes hacer eso?

― Oye, no soy una simple mariposa, cada quien sus secretos ―Dijo sonriendo, mientras su "amiga" lo miraba con cara molesta― Como sea, me encarge del ambiente, te toca encargarte de la pareja, ¡suerte! ―Agito sus pequeñas alas y antes de que esta pudiera decir algo el ya se habia ido.

― Genial... ―No lo penso mas y entro a la casa― Erh... ¡Psst!

Llamo la atencion de ambos cocineros y con la mano les hizo la seña para que salieran, corriendo para que no la miraran al salir, los dos hombres al estar afuera se quedaron mirandp la mesa a mitad del patio.

― Uh... Esto es algo raro ―Dijo con su timida voz Cold.

― ...¿Quieres sentarte? ―Le habia preguntado casi por impulso, al voltear a ver a Cold, se encontro con su rostro con un rubor en sus mejillas mientras asentia repetidas veces con la cabeza.

Logragon que se reunieran, pero ¿y luego?

Una cancion comenzó a sonar, era Shrignold quien puso una cancion.

Your my sunshine
My only sunshine

― Esa... Cancion...

You make me happy
When skies are grey

― Fue la que cante cuando... Oh Cold...

You'll never know dear
How much I love you
Please don't take my sunshine
Away

Cold se encontraba soltando algunas lagrimas, siempre se trataba de encontrar positivo, pero no podia mas, no era tonto, el sabia de las citas de su novio con Paige, pero hacia la vista gorda, mientras que los recuerdos de David habian sido alterados siendo inconsciente del daño que le hacia su pareja.

Pero esa cancion, fue suficiente para hacerle recordar.

~Flashback~

― Eso fue lindo, David

― Bueno, eso no es todo ―Tomo de la cintura al albino quien se puso nervioso al estar tan cerca sus rostros― Te gustaria, ¿ser mi novio?

~Fin de Flashback~

~~~

― ¿Recuerdas ese otro que esta bajo el hechizo?

― Uh, si.

― Pues no sera tan facil saber de quien esta enamorado el, no tengo tanta informacion de su vida amorosa como los de ellos.

― Bien, pero hay que darnos prisa antes de que haga algo que lamente.

~~~

― ¿Que? No,  no,  no, Larry, ¡no tienes que irte! ―Le rogaba la chica a su amigo, quien empacaba sus objetos materiales para volverse a ir.

― E-Estoy muy desconcentrado Cany, no te preocupes, volvere, eso creo ―Lo decia mientra la tomaba de los hombros para intentar calmarla y seguir reuniendos sus cosas.

― ¡Nop! ―Cerro la maleta de su compañero― TU te quedas, y me cuentas que te pasa.

― Cany, suelta mi maleta.

― Ño. ―Se sube a esta.

Larry suelta un suspiro y carga a Cany para dejarla en el suelo y seguir juntando sus materiales.

― Larry, porfavor no te vayas, minimo dime que te sucede. ―Le abrazaba el pie mientras que en el rostro del chico aparecia un rubor azulado apenas notable.

― Sueltame, porfavor.

Continuara...