5
Taylor parpadeó varias veces pero intentó disimular, disimular la sorpresa y el terror que invadieron su cuerpo en cuanto escuchó aquellas asquerosas palabras. Nunca en toda su estancia allí se había rebajado de esa forma porque siempre, siempre, había logrado defenderse de una forma u otra cuando se veía en situaciones similares. Su cuerpo era su cuerpo, y nadie lo usaría a su antojo sin su consentimiento.
–¿Me has oído?—susurró aquel individuo con autoridad, cogiéndole de sus largos cabellos y estirándolos con fuerza mientras los otros dos lo agarraban de los brazos impidiéndole huir.
El rubio subió su clara mirada de nuevo, y mirándolo apáticamente gesticuló con sus carnosos labios una única palabra: "No".
Erick, entonces, sonrió algo cabreado y comenzó a desabrocharse el pantalón, si no quería lo haría a la fuerza y punto.En el despacho del director del centro se encontraba Noah ordenando unos documentos junto con aquel hombre, le había pedido que se encargara de unas tareas mientras transcurría la hora de gimnasia. El pequeño estaba contento y se sentía útil, quería caerle en gracia a aquel hombre porque podría serle de mucha ayuda en la resolución de su caso, y también debía de reconocer que era bastante extremadamente amable con él, quizá demasiado.
Y por los solitarios pasillos, Drake caminaba con ese poderío tan característico suyo. No sabía qué estaba haciendo, simplemente dejaba que sus piernas lo guiasen. Había visto como al dichoso rubio le daban en el rostro, y estaba tardando demasiado en volver a la pista. Él quería que regresara para destrozarle de un balonazo él mismo, o eso quería hacerse creer, no había podido evitar ir a por el culpable porque esa carita de príncipe solo la podía maltratar él. Se sentía un completo estúpido yendo a buscarlo, estaba rabioso, una mezcla de curiosidad, preocupación y ganas de reventarlo.
Después de unos cuantos golpes más en las costillas y de haberlo estrangulado varias veces hasta que por poco cae inconsciente, Erick volvió a formular la misma tortuosa pregunta y, tan orgulloso como siempre, Taylor volvió a dar la misma seca respuesta: una clara negativa. El castaño se hartó y le agarró fuertemente el rostro con una de sus grandes manos, le abrió la boca a la fuerza y con la otra bajó en busca de su miembro, para liberarlo al fin. Pero no pudo hacerlo, porque cuando simplemente había introducido sus dedos por debajo de la ropa interior, un gran golpe en la parte posterior de su cabeza lo derribó. Sin opciones de levantarse y devolverlo, una gran patada en sus partes más delicadas lo hizo hasta querer vomitar. Drake había llegado justo en el momento correcto y, joder, estaba furioso, quería matar a ese jodido chaval por tocar lo que no debía, lo que sólo podía tocar y destrozar él. Los otros dos individuos soltaron al rubio como reacción, y este no dudó en atacar a uno de ellos. Con Erick quejándose en el suelo, Drake atacó entonces a otro de los chicos, que golpeaba a Taylor para que soltara a su amigo.
Justo en esos momentos, el pequeño Noah salía del despacho algo extrañado, se sentía raro. Aquel hombre le había acariciado varias veces los muslos cuando estaba sentado a su lado, y con una sonrisa en los labios le explicaba cómo debía apilar unos formularios. Había decidido dejarlo pasar, no quería parecer borde o muy desconfiado y simplemente pensó que quizá era un hombre cariñoso. Con el ceño fruncido y una mueca de duda, fue sorprendido por un montón de chicos en el pasillo. No pudo contarlos todos, pero juraría que como mínimo eran diez. Estaban haciendo cola para entrar en dirección, uno a uno, a ser juzgados y a recibir castigos. Todos habían hecho alguna que otra trastada y los habían pillado, así que ahora tendrían que pasar semanas sirviendo comida, limpiando retretes, o quitando pintadas de las paredes y suelos del patio. No se conocían entre ellos, sin embargo, todos reaccionaron del mismo modo al ver al pequeño salir de la sala de aquel hombre.
ESTÁS LEYENDO
❝ YOURS ❞ ↯boyXboy↯
Romance¿Cómo lo hará el pequeño Noah para sobrevivir en ese centro penitenciario de menores? Las personas que hay allí son verdaderos monstruos y hay uno, en especial, que lo intimida más que cualquier otro. *Historia de temática homosexual. Si no te gust...