💚💚MI PRIMER AMOR💚💚

LA VISITA

Pase esa tarde y la mañana del día siguiente en un estado de triste somnolencia antes de la comida me bañé y me peine con gel , me puse mi remera favorita y unos jeans cortos con unas zapatillas grises.

- ¿para que te vistes así?- pregunto mi madre

- es que tenemos invitados- dije en vos baja casi al borde de la desesperación.

- ¡valla tontería! ¿que invitados son esos?

La princesa madre y su hija llegaron media hora antes de comer. La vieja se había puesto encima su vestido verde que ya conocía y un chal amarillo. En seguida empezó a dar su monólogo, suspiraba, y lamentaba su pobreza. Daba la sensación de que no se le pasaba por la cabeza que era princesa.

En cambio Zaira se presentó con un aire de superioridad como una verdadera princesa. No la conocía ni tampoco a su manera de mirar y sonreirse, aunque esta nueva imagen suya me parecía bellísima. Llevaba una remera azul y un Jean muy corto sus cabellos rubios atados en una trenza me volvían loco.

Su figura contrastaba con la de su madre.

De ves en cuando la miraba y ella también me miraba pero de una manera muy extraña casi con hostilidad.

En el transcurso de el almuerzo seguía sin arrendarse por nada, comiendo mucho y haciendo elogios de los platos. Mi madre ya estaba cansada de ello, y le contestaba con un aire de ligero y resignado desprecio. Zaira tampoco le gustó a mi madre.

Zaira no me hacía caso. Al poco rato de terminar la comida la princesa empezó a despedirse

- confío en su protección, María y Carlos, ¿que puede una hacer?. Tuvimos buenos tiempos pero ya se fueron. Heme aquí con categoría de Alteza- río desagrablemente -¿pero de que sirve si no da para comer

Mi padre acompaño a la princesa a la salida. Yo me quedé de pie, muy triste por la actitud de Zaira. Fue muy impresionante cuando ella dijo con la vos cariñosa que si conocía:

- venga a mi casa. Veni sin falta

Yo solo pude demostrar mi sorpresa moviendo las brazos. Pero ella se fue ¿cuando tenía que ir?

- es una soberbia- dijo mi madre al día siguiente- ¿y porque presume tanto? con esa cara de modestia