😽 Tercer miau 😽

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A la mañana siguiente, Jongin se despertó en una cama vacía.

—¿Soo? —llamó el niño.

Silencio.

Una vez que se dio cuenta de que no había un gatito durmiendo junto a él, el chico empezó a entrar en pánico un poco.

—¿Soo? —gritó más alto—. ¿Dónde estás?

Rápidamente se bajó de su cama y buscó a través de su habitación. Miró debajo de su cama, luego sobre su escritorio, debajo de su escritorio, en su clóset y en la caja de juguetes.

El gatito no se encontraba en ninguna parte.

Así que Jongin corrió rápidamente a la habitación de sus padres, pero sus papás tampoco estaban en su habitación. Afortunadamente, el chico de pelo negro podía oler el olor a tocino que venía de abajo.

—Papis deben estar preparando el desayuno —dijo Jongin mientras corría escaleras abajo.

Yìxīng estaba cocinando el desayuno y Junmyeon estaba en el sofá viendo las noticias. Ambos llevaban suéteres de parejas que decían «La Navidad es la bienvenida de un bebé que se salió totalmente de control». La usaban cada año y Jongin todavía no entendía lo que significaba.

«¿Bienvenida de un bebé? ¿Por qué se saldría de control?», Jongin pensaba cada año para sí mismo. Pero no este año. Estaba demasiado ocupado tratando de encontrar a su gatito desaparecido.

—¡Papi! ¿Has visto a Soo? He buscado por todas partes y no puedo encontrarlo —Jongin parecía estar a punto de llorar.

—¿Revisaste en el baño...?

—¡Gracias, papi!

El chiquillo siguió murmurando «baño» para sí mismo mientras corría de nuevo por las escaleras. Una vez que llegó a la puerta de su cuarto de baño, estaba jadeando suavemente de todo el correr que hizo.

Luego procedió a abrir la puerta con violencia.

Y los ojos de Jongin se ensancharon ante lo que vieron.

Había un niño pequeño, más bajo que él, sentado solo en la bañera. Tenía orejas de gato blanco pero el pelo negro y rizado, así como una larga cola blanca que estaba envuelta alrededor de la pequeña figura del muchacho. También estaba completamente desnudo.

—Espera, ¿por qué t-tienes orejas de g-gato y una c-cola...? ¿Quién eres?

—Miau —responde el chico. Sus ojos se iluminaron y sus oídos se animaron al ver al otro muchacho entrar al baño. Saltó rápidamente de la bañera y se acurrucó en la pierna de Jongin.

Jongin se cubrió los ojos una vez que se dio cuenta de que el chico estaba desnudo y vaciló en mirar hacia abajo cuando el niño gato soltó un suave ronroneo.

Reuniendo todo su valor, Jongin miró hacia abajo y notó que el chico tenía ojos verde oliva y sus ojos se ensancharon en shock.

—¿Soo? —murmuró para sus adentros. El "chico" parecía entender lo que decía su dueño y lo miró felizmente. Le dio una sonrisa brillante a Jongin.

—¡Miau!

—Esto no puede estar sucediendo.

—¿Miau? —dijo Soo, inclinando la cabeza un poco como si no entendiera lo que decía su dueño.

—¡PAPI! ¡MAMI!

❤🐻❤

—Así que déjame ver si lo entiendo. ¿Anoche deseaste que Soo se convirtiera en un niño humano? Entonces, cuando te despertaste esta mañana, desapareció, y lo encontraste en el cuarto de baño, ¿así como así? —Junmyeon repitió ridículamente, mirando al chico gato que estaba lamiendo su mano delante de él con total incertidumbre.

Mi Purr-fecta Navidad » KaiSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora