PELIGRO FAMILIAR

NUESTRA SALVACIÓN

No podíamos creerlo era... Nana Candy?  ¿pero cómo se involucraría en todo este rollo? Estaba agarrada de la mano de uno de esos hombres y con su otra mano sosteniendo la pistola

- ¡vaya Beatrice tu si que eres rápida! - miró a todos mis hermanos con indiferencia, a todos menos Alejandro y a mi- DIJISTE QUE NO LASTIMARÍAS A NINGUNO - soltando a ese hombre se acercó a nosotros - ESTE NIÑO ESTÁ MURIENDO - volteó a ver a Beatrice, quien  junto con otro de sus hombres había amarrado  a mi hermano, el cual todavía estaba tosiendo por la sumergida que le dió Beatrice

- ¿ y tu de qué te preocupas? Ya te preocupas te por ellos bastantes años ¿no? Además no olvides que también colaboraste para que estuvieran aquí- se iba acercando a ella, y la tomó del brazo,  - llegas tarde "Nana" jajajaj, ven tu y yo tomaremos una copa de vino ¿ qué te parece? - nuestra Nana también se había involucrado con este... este ... peligro familiar. Beatrice ordenó a uno de sus ayudantes que me amarrara de nuevo

- por favor deja que me quede a curar a mi hermano - lágrimas empezaban a brotar por mi rostro de desesperación mientras me apartaban de Alejandro, el ya estaba muy débil y no resistiría mucho si no hacíamos algo. Me forcejeaba pero todo era en vano- ayudalo por favor - mi tía sólo me miró sin ninguna expresión, mientras que Candy no volvió a vernos. Mi hermano se quedó tirado en el suelo frío

- deja de molestar niña o tu también estarás con una bala, pero  en la cabeza - dijo Candy aún sin voltear a vernos y mientras subía las escaleras con Beatrice y cuatro de esos hombres las siguieron - ustedes dos vigilen esta puerta - dos de ellos se quedaron ahí afuera de el lugar donde estábamos y cerraron la puerta

- HIJAS DE PERRA - gritó Mariana - CUANDO SALGAMOS DE AQUÍ VERÁN LO EQUIVOCADAS QUE ESTABAN AL METERSE CON NUESTRA FAMILIA

- deja de gritar, ni que de verdad fuéramos a salir tan fácil de este asqueroso lugar - dijo Antonio - total si nos tienen encerrados aquí es porque vamos a morir tarde o temprano - su rostro y cabello estaban totalmente húmedos

- si no van a dar ideas para salir de aquí mejor callense si? Conecten su lengua con su cerebro - musitó Ricardo- tal vez nuestros padres ni siquiera están enterados de que nos secuestraron

Pasaron algunas horas, por una pequeña grieta en la pared vi que ya había anochecido,Jackeline, Ricardo y Antonio hablaban entre ellos tratando de idear un plan o algo, mientras que Mariana y Daniel se quedaron en completo silencio, en cuanto a mi solo trataba de soltarme de esa silla a la que estaba amarrada

- n-no vamos a salir verdad? - dijo Alejandro quien se recargó en la pared con las pocas fuerzas que tenía y descansar un momento

- eso es ¿como carajos no se me ocurrió antes? Alejandro tu eres el único que nos puedes desamarrar - sonrió Antonio

- pero el ni siquiera tiene fuerzas cabrón, no ves que está herido? - Jackeline subió su tono de voz

- e-esta bien- Alejandro intentó levantarse y se dirigió con dificultad hacia mi lugar para empezar a desatarme las manos- pinches n-nudos que les pusieron- esbozó una pequeña sonrisa- me alegra q-que no me a-ataran a una silla - todos mis hermanos soltaron una pequeña risa

- jajaja se puede decir que por un lado tienes suerte Ale, tienes que pasarme un poco  - dijo Daniel -

Mis hermanos disfrutaron ese comentario haciendo que una sonrisa apareciera en sus rostros... ese momento fue muy breve ¿por qué? Porque alguien abrió la puerta

- ¡ay wey! ¿pero quién es? - dijo Mariana, volteamos a ver y nos percatamos que era Beth quien bajaba con dificultad por la herida de bala que tenía en la pierna, y junto con Carlos estaban alerta, ambos bajaban las escaleras con cautela

- ¡Beth! ¿pero cómo...- Daniel no terminó de decirlo

- shhh - Carlos le hizo una señal  con el dedo para que no hiciera nada de ruido, el y Beth empezaron a desamarrar nuestras manos, hasta que  Candy bajó  rápidamente las escaleras

- Beatrice está totalmente borracha, pero sus hombres no tardarán en darse cuenta de nuestro plan - todos nos quedamos pasmados

- oye creí que estabas de parte de los malvados jaja- dijo Antonio

- no hay tiempo para hablar debemos irnos - empezamos a subir las escaleras,  Mariana ayudó Alejandro llegando a los pasillos de la casa de Beatrice hasta llegar al salón principal

- corran la camioneta está afu...- Candy fue interrumpida porque unos nueve  cómplices de Beatrice aparecieron  - hola - ella sonrió y junto con Carlos y Beth empezaron a disparar poniéndose en frente de ellos, los tres al parecer tenían buena puntería pues consiguieron darles a casi todos, ya casi faltaban unos cuatro - salgan ya, suban rápido a los coches- todos corrimos a la puerta lo más rápido posible y efectivamente habían dos autos esperándonos, subimos a ellos, unos minutos después las tres personas que nos salvaron salieron, Carlos iba ayudando a Beth a subir a uno de los autos. Luego de eso nos fuimos de ese lugar, por fin todos sentimos esa serenidad reinante al saber que estábamos fuera de peligro... al menos hasta ahorita