El Club de los Desquiciados

Juego escondidas y atrápame si puedes con Mat y Harry

Cómo fueron los siguiente días en el colegio? Divertidísimos!!! Nos las pasamos jugando a las escondidas! Harry y yo nos escondíamos y Mat no debía encontrarnos! Sip fue bastante complicado, principalmente teniendo en cuenta que estábamos obligados a vernos durante el almuerzo, la cena y el desayuno, pero al parecer no se había presentado, o se enteró de que jugábamos a las escondidas, se escondió y le pidió a otro que cuente. Suena más probable la opción de que se enfermó.

Debía tomar coraje. Se supone que debo salvar a todos los desquiciados, pero si moría en mi intento de salvar al número dos, no podría seguir salvando a más no? Por lo pronto, mejor me concentraba en salvar a Harry, no tanto de los otros, sino más de Sally. Sally había sido su fiel compañera desde los ocho años, y al parecer por como íbamos, va a ser su única compañera a lo largo de TODA su vida. No puedo permitir que eso suceda. Asi es como decidi que ivamos a ir integrándonos de a poco...

Primera fase para ser amigo de una persona. Háblale mirándola a los ojos.

La parte intelectual de por qué se debía hacer esto lo entendió fácilmente, y hasta me la explico a mí, pero la practica...

- Harry mírame a los ojos, juro que no van a tragarte la parte negra, parecen agujeros negros, pero no lo son, lo juro!! Es más para demostrártelo meteré mi dedo en mi o...

- No espera Emilia!!

Por si no lo han adivinado, llegó tarde, ya había metido mi dedo en mi ojo, y justo cuando los moratones casi desaparecían! La buena noticia es que Harry tuvo que mirarme a los ojos, específicamente mi ojo derecho para asegurarse de que no me había lastimado de gravedad. Misión contacto ocular completada!! Literalmente.

Me encontraba en mi cama, mirando el techo con mi ojo izquierdo, y la bolsa de hielo con el derecho, cuando sonó la puerta y entré en pánico! Aseguro que nadie sabe mi número de habitación, a no ser que sea Mat, quien en venganza me atacara aquí, en el piso 19, porque sabe que no seré capaz de avanzar sin rodar por las escaleras!! Con los dos ojos en perfecto, o bueno, casi perfecto estado, me llevaba por delante las cosas!! Imagínense ahora..., saben qué? Mejor no lo hagan, me duele de solo pensarlo.

Me levanto, tomo el libro de química en mano, a modo de defensa personal y abro la puerta encontrando a...

- Harry?

- Hola...Me preocupe porque en internet encontré un artículo que decía que podías quedarte ciega, asique quise venir a asegurarme de que no fuese el caso y..., no te molesta que este aquí cierto?

Mi cara al abrir la puerta fue de miedo, luego de asombro y posteriormente la sonrisa del Wason.

- Por supuesto que no! Me alegro mucho de que estés aquí!! Asa y siéntete como en tu casa!!

Entro con la cabeza gacha, incomodo, pero luego se sentó en mi cama y comenzó a observar divertido la colección de cosas coloridas que habían.

- Veo que tú tienes una gran variedad de colores favoritos.- Dijo Harry mirándome a los ojos! Su voz era musical, dulce, una voz amena de escuchar.

- Sí, la verdad es que me gustan los colores vivos, las cosas alegres, esas cosas. A ti que te gusta?- Sus ojos me miraron con un brillo especial, como si toda su vida hubiese estado esperando que le preguntasen eso.

- Veras, desde pequeño me encanta cantar, pero en cuarto grado en una presentación de la escuela me quede sin voz y no pude seguir con el show. Arruiné ña función para todos los niños, y luego de eso no pararon de molestarme.

Lo miré, parecía verdaderamente triste al contármelo, agradecí que se soltase conmigo, pero estaba segura que esa no era la razón por la cual se había aislado de la sociedad, sus hermosos ojos mostraban a un chico duce que había pasado por una experiencia traumática que aun hoy, no podía superar, y por eso prefería escapar de la realidad con Sally.

- Me apena mucho. Por culpa de eso se perdieron conocerte. Podrías cantarme algo?- Me miró sonrojado y negó con la cabeza. Precia ser que este sería todo el progreso que podía llegar a esperar el día de hoy...

Son las 8 a.m. y hace 5 minutos que debería estar en clase de física. Diantres!

Anoche Harry se quedó hasta altas horas de la noche hablando conmigo, descubrí que adora el rock, los libros de suspenso, misterio y ciencia ficción, no se encuentra realizando ningún deporte, ama el football y lo convencí de hacer las pruebas de esta tarde para entrar, y en estos momentos lo estoy pisando porque se quedó dormido en el piso de mi habitación..., esperen que?!!

Recuerdan que Harry estaba en el piso? Y yo parada sobre él? Pues se movió, yo caí, me rompí la nariz, Harry me alzó, corrió escaleras abajo (19 pisos para ser exactos) y me llevó a física en brazos. Debo admitir que, por lo rápido que corre, y como me lleva como si no pesase nada, me hace pensar que bajo su apariencia de chico nerd y huesudo, hay un futuro rompecorazones musculoso.

Entramos en la sala de física, nos retaron en la sala de física y no entendí nada de física. Gracias a Dios, Harry se ofreció a explicarme luego de las audiciones, las cuales se realizarían antes de comer. Es decir, moriría de hambre hasta que aceptasen a Harry en el equipo.

Le desee suerte a Harry y me dirigí a las butacas. Una vez allí, comencé a ver a los jugadores, grandes y musculosos, y allí se encontraba la pared humana, al parecer era el capitán, quien muy amablemente les ordenó a los novatos correr 30 vueltas..., pobre Harry, y pobre de mí, parecía ser que no iba a poder almorzar en una largo tiempo...

Estaba por morirme de aburrimiento, ya que, llevaban 15 minutos corriendo en círculos, como perros persiguiendo sus colas cuando alguien se sentó a mi lado. Ojos azules, cabello negro, y una sonrisa? Mat tendrá un gemelo simpático? Por si acaso no te confíes de él y baja a ponerte más cerca del resto de las personas. Esas eran las indicaciones que mi cerebro me dio, que estaba perfectas, pero que no tuvieron en cuenta un pequeñísimo factor, que Mat había sujetado mi mano y de un tirón me había vuelto a sentar. La única forma de irme de allí sería en ambulancia y sin dientes...

- Hola. Tu eres Emilia cierto? La chica del otro día. Soy Mat Jordan. Encantado de conocerte.- Extendió su mano y su sonrisa más brillante. Yo acepté su mano y sonreí normalmente.

- Emilia. El placer es todo tuyo.- Él rio, yo temblé. Viéndolo de cerca no parecía alguien amenazador. Sus ojos eran verdaderamente preciosos, azules verdosos como el mar, y tanto su risa como su sonrisa son sorprendentemente cálidas, y sus manos no tenían un aspecto aterrador cuando no estaban cerradas en puños, hasta parecían amables, cariñosas, el tipo de manos que quieres que te abrasen cuando te sientes solo y triste. Parecía ser que podríamos llegar a llevarnos bien, que podría salvar a mi desquiciado número 2 sin perder mi vida en ello.

- Me parece que hemos comenzado con el pie izquierdo. Yo también quiero ser tu amigo.

- Soy surda, por lo que siempre comienzo con el pie izquierdo, y que clase de truco es ese de que quieres que seamos amigos? Por mi encantada, ya que eres un desquiciado y debería salvarte, pero no puedo arriesgarme a que mates a Harry mientras me distraigo, cosa que pasa muy seguido y...

- Ya para el carro. Como es eso de que debes salvarme porque soy un desquiciado?- Yo y mi bocota!! Ahora debería explicarle todo! Y es una historia muy larga! Y Harry ya terminó la prueba...momento!!

- Harry!! Como te fue!?

Y así es como Salí corriendo detrás de Harry para saber los resultados, y Mat me siguió para obtener la respuesta a su pregunta, y Harry huía de mi porque...Porque huía Harry de mí? Ya que, en algún momento se cansaría de correr!