Semanas después de la desaparición de Tyler
-Si te dijera que puedo manejar el tiempo, como te quedás, uououououo
—Josh, vamos, tienes que llevarme al circo, sólo les queda una semana más
—Exacto... —Dijo soltándose del agarre de la niña, recargándose en el sofá para cambiar de canal —Una semana. Puedes esperar unos días a ver si Spencer va con sus hijos y te lleva
—Has cambiado, Josh
Ni siquiera estaba en modo de discutir y decir que no era cierto, porque lo era, y no le importaba en lo más mínimo. Si no era la voz de Tyler la que se lo restregará en la cara, no importaba
—Lo siento, preciosa. Pero hoy no me siento con ganas de ir
—Nunca te sientes con ganas de hacer nada
Dijo la niña en una voz muy baja para ir a encerrarse en su habitación.
Josh, hace años, había comprado una radio (no, esa no se la robaron) y Ruby la había encontrado, adueñándosela. Le gustaba encenderla de vez en cuando. Eso hizo. Puso una estación cualquiera, quería distraerse un poco del aburrimiento
—Exactamente, Lucy —Escuchó. Ya estaba acostumbrada a oír cosas sin sentido al encenderla —¿Qué haría usted si pudiese hacer eso? Teletransportarse a donde usted quisiera... Con sólo un poco de imaginación. Decir, "Ahora, seré el protagonista". —La pequeña sonrió ante aquello. Ella siempre fingía ser alguien más mientras jugaba, le era divertido.
Cambió la estación a otra de música, tenían aquella canción vieja de Green Day que su padre siempre le ponía, así que se puso a cantarla, tomó un cepillo y fingió que era un micrófono. Siempre le gustó cantar.
Entonces cerró sus ojos, imaginó que unas cuantas personas la miraban, que le ponían atención. Jugando. Imaginó ser la protagonista.
Al terminar de jugar por unas cuantas canciones salió de su habitación para ver cómo su hermano bebía una cerveza, tirado en el sillón con una cara tan neutral. Una lágrima se escurrió por su mejilla, y recordó el programa de radio, ¿Qué pasaría si pudiera pasar lo que ella quisiera? Ella quería que los demás vieran como se sentía. Que se pusieran en su lugar. Así que lo imaginó. Imaginó que la gente podía ver lo que ella.
💔
Un mes después
Ruby ya ni siquiera necesitaba concentrarse, entraba en su realidad cuando quería.
Cada diez minutos pensaba en que la gente podía ver y escuchar lo que ella, en que si le contaban un buen chiste, pensaba en que el resto del mundo viera aquello, se imaginaba que los demás podían estar en su lugar.
Cada que escuchaba una canción cantaba como si la miraran, como si su vida fuera un reallity show. Todo perfectamente organizado para ella ser la protagonista.
💔
—Hola papá, pasa. Ruby está en la escuela —El hombre entró con una cálida sonrisa —¿Cómo sigue tu esposa? ¿Ha mejorado? —El contrario puso una mueca y movió su cabeza hacia los lados
—Algo, digo, lo normal. Pero, creo que requiere más tiempo de lo que ambos creíamos
—¿Necesitas que siga cuidando a Ruby? —Preguntó el menor alzando las cejas con disponibilidad —Por mi está perfecto, he acomodado mis tiempos para ajustarlos con los de ella. De hecho, ahora que lo veo... —Miró su celular —En unos minutos me tengo que ir a trabajar
—¿Que hay del bar?
—Lo dejé por los tiempos
—¿Que no te ayudaba tu novio? —Ambos se miraron unos segundos, el semblante de Josh era nulo, no había nada más que respiraciones de sentimiento muerto —Lo lamento, hijo
—No. Está bien
—Pensé que ustedes iban por buen camino. La relación tenía futuro
—Sí, bueno. Yo también lo creí
—¿Terminaron? —Josh se alzó de hombros
—Supongo, desapareció de mi vida de un día para otro. De vez en cuando veo sus fotos en Instagram con su ex —Hizo una mueca mostrando los dientes y su padre arrugó la nariz
—Eres mucho mejor que quien quiera que sea su ex
—Él es mal alto...
—Y tú tienes cabello de colores. Digo, el cabello de colores es cool —Dijo haciendo una pose de los 80's
—Oh, vamos. No hagas eso
💔
—¿¡Comprará el pent house para ti!? Mierda, yo quiero eso
—Lo sé, Dallon. Vendrá el mes próximo a pagar el lugar. Dijo que tenía que irse pero me dio más dinero y juguetes para Ruby
—Genial... Yo tengo un padre tacaño y ojete... ¡Perdón papá! Está conmigo ahora —Murmuró contra el teléfono
—Bueno, te dejo con tu padre... Ponme en altavoz
—¿Qu...? De acuerdo... Listo
—¡No le crea! ¡Usted es adorable, señor!
Dijo Josh y cortó la llamada.
Las hamburguesas para la comida estaban listas, así que fue al cuarto a llamar a Ruby, la puerta estaba cerrada
—No, no puede hacer eso... Que torpe... ¡Mejor golpéalo y ya! Eso... Muy bien, pero ahora tienes que correr para alcanzarla —El teñido entró para ver a su hermana conversando con la televisión.
Le fue extraño, pero él lo hacía de vez en cuando de manera que sonrió y le señaló el pasillo
—A cenar
—Que asco
—¿Perdona?
—Bueno, es que se te queman las hamburguesas. A Tyler sí le salían.
Josh pasó saliva para no traerse a si mismo el recuerdo de Tyler, de como cocinaba siempre, de sus waffles, Oh, sus waffles y las verduras al vapor... Él. Todo él.
—Bueno, pero Tyler no está aquí. Ahora, a comer —Sentenció frío y cerró la puerta trás de él
—¡Oye! ¡Yo también iba a pasar!
