Cuando Te Darás Cuenta de Cuanto Te Amo

Una Fiesta

- Vos queres que te de el madraso de tu vida! - Solo es Lana.
- Solo vine para ver que hacías y te descubrí cantando- Dijo entre risitas.
- Me pegaste un susto, pendeja. - Suspiro aliviada de que nadie mas me haya visto.
Suena el timbre otra vez y entro al salón como de costumbre, siento tanto sueño que se me cierran los ojos con cada palabra que dicta la profe.
Garabateo un poco en mi libreta, no puedo decir que se me de muy bien dibujar... siempre soy hiper superada por cualquiera. Me amargo ante el hecho que soy una buena para nada.

*****
- ¡Mama! ¿Donde esta mi vestido rojo? - Le grito desde mi cuarto el cual es una habitacion algo pequeña, muy aniñada pintada de rosa bebe, aun contiene peluches y una casa de muñecas. La comparto con mi hermana menor Paloma.

- No esta en tu armario? -
- No! Espera lo encontré!-

Ya es Viernes por la noche y Martina me había invitado a una de sus fiestas de todos los findes. Prácticamente toda la escuela estaba invitada pues ella es muy popular y como no va a serlo si es muy bonita tiene el pelo pelirrojo y unos ojasos azules rasgado en los cuales los chicos se pierden en ellos, es pequeña y de baja estatura claramente la chica por la que todos babean.
En fin. Mejor dejo de bajarme la autoestima.
Tomo mi vestido de color rojo y me lo pongo, es al cuerpo y de mangas largas lo combino con unos zapatos negros y un dije al mismo tono. Voy muy casual.
Me miro al espejo y para mi suerte no tengo ni un grano en la cara, antes de cualquier cosa lavo mis dientes que quedan limpios no blancos pero no son amarillos ni se ven sucios, son normales. Regresando al espejo resuelvo no ponerme base  inclusive creo que no tengo.
No se maquillarme de ninguna forma siempre hago la típica de aplicar rimel y mucho delineador en la linea de agua, y así lo estoy haciendo como todas las veces que salgo a alguna fiesta.
Para el peinado solo plancho mas mi pelo, ya es lacio así que nada fuera de lo normal.
Cargo mi cartera cruzada negra y salgo a la calle, tomo un taxi y en 5 min. ya estoy ahí.

La música a todo volumen, adolescentes bailando y chicas perreando pegándose a las entre-piernas de aquellos chicos alzados como conejos.
Hay alcohol y hasta drogas se pueden ver chicos fumando cigarros que parecen ser de marihuana.
Encuentro a mi grupo y me uno al baile, no me gusta mucho bailar porque no se hacerlo y cuando todos se agachan al ritmo de las canciones cumbieras soy la única que sigue como tonta en pie.
Ay... dios.
Me voy retirando de la ronda en la que no me siento de cómoda y pido lo de siempre, Gancia. Me recuerda mucho a cuando era pequeña y... Bueno no es momento de anécdotas.
Dándole un sorbo a mi bebida desvío la mirada hacia la derecha y no puedo creer a quien veo, aunque no debería de sorprenderme esta chica conoce a toda la escuela, es Tobias se ve muy bien arreglado.
Iba ir a saludar pero miro a la izquierda y esta Valentin, mi corazón palpita con fuerza tiemblo a mas no poder. Dios como puede ser que este chico me pueda de esta manera! Si ahora me lo pidiese estaría siendo su esclava.
Estoy embobada, ciegamente enamorada y necesito un golpe de realidad ahora mismo antes que el se de cuenta de como lo miro, para mi suerte me tocan el hombro y es el chico a mi derecha que solito me reconoció y vino a saludarme.
Una verdadera sorpresa.

- Hola! - Dice en una perfecta sonrisa.
- Como estas? Lamento mucho lo de la vez pasada - Digo gritando, el volumen de la música no es el adecuado para socializar de ninguna manera le doy otro sorbo a mi Gancia antes de que la garganta me quede a la miseria.
- No te preocupes, yo tampoco iba concentrado en el camino...! ¿¡Quieres bailar!?-
- ¡Claro! -
Con vaso y todo vamos a la pista dispuestos a desgastar las suelas del calzado de cada uno.
****
Se hicieron las 6. Am. y yo seguía riendo con Tobias camino a mi casa.

- Y viste la chica que vomito? Pobrecita! - Dije asombrada
- Ñeh... estará bien Rocio siempre hace lo mismo. - Dice de forma desenfadada.
- Si tu lo dices - Sonrío. - Bueno, aquí es mi casa, la pase genial me sacaste muchas risas hoy, me as caído bien. Piensa que eso es un cumplido por que yo odio a todo el mundo ja.-
- Esta bien nos vemos entonces...- Se da la vuelta pero regresa antes que saque las llaves.- ¿Me podrías pasar tu numero de whatssapp?-

-Hummm ok - le dicto el teléfono y finalmente se va.

A sido una noche estupenda pero me hubiese gustado que Valentin la compartiera conmigo...

Ingreso a mi casa haciendo el mínimo ruido posible, subo a mi habitación y me desvisto, me pongo el pijama y finalmente me tiro a la cama. Sweet Dreams Em.

Espero que guste este capitulo.
Xoxo

Sofi