𝓘𝓷 𝓽𝓱𝓮 𝓝𝓪𝓶𝓮 𝓸𝓯 𝓛𝓸𝓿𝓮 ‹ʲᵇ›

«01»

—Ann, te he visto demasiado despistada, ¿qué sucede?— me dice Hailey, mi mejor amiga.

Últimamente he tenido sospechas sobre mi esposo Justin, y por eso cité a Hailey hoy para contarle haber que opina al respecto.

— Hailey, llámame loca o lo que tú quieras, pero siento que Justin me engaña con alguien — le digo con una mueca de dolor.

— ¿Qué dices? Ann, él te ama. Sé que sería incapaz de hacer algo como eso — Me aconseja mi amiga.

— Sé que me ama, pero ha estado llegando tarde en la noche y muchas veces llega con olor a perfume de mujer, él dice que es de su madre, que ha ido a visitarla. Intento creer que en realidad es así, pero la consciencia me dice que no le crea— Le cuento.

— Ann, confía en él. Si te dice que es de su madre, es porque así es. No creo que teniéndote a ti como esposa busque a otra persona. No es idiota Ann, sólo piensa un poco tú — me intenta animar.

— Está bien— le sonrío a mi mejor amiga.

Pasamos toda la mañana hablando de cosas sin sentido y algún romance que se trae ella por ahí.

Llegando las 12 pm, decido que es hora de ir a casa, Justin llega a comer a las 2:00 pm y su comida debe estar lista para ese entonces. Él me ha dicho que contratemos a una sirvienta, pero yo le digo que no. Siento que es mejor hacer la comida yo misma.

Voy manejando en mi auto al ritmo de la canción "24K magic" de Bruno Mars. Excelente canción, cuando llego a casa abro la puerta y me hayo a Justin sentado en la sala.

— Hola mi amor— me dice y después vuelve su vista hacia él televisor.

—Hola— me acerco a él y le doy un beso en los labios.

— ¿En dónde estabas?— me pregunta sentándome en sus piernas.

— Hailey me dijo que tenía algo que contarme, así que me citó en Starbucks— le cuento, obviamente mintiendo.

— Ahh okey — me dice sonriendo.

— ¿Y llevas mucho tiempo aquí?— le pregunto dándole un beso en los labios.

— No mucho, quizás 10 minutos— me dice quitando un mechón de mi cara para ponerlo atrás de mi oreja.

— Okey— le digo — Iré a hacer la comida amor— le doy un beso y me intento levantar pero él me agarra de la cintura y no me deja levantar.

— Te ayudaré a hacerla— sonríe y yo me río. Él frunce el ceño — ¿Qué es gracioso?— me pregunta molesto.

— Amor, ¿tú cocinando?— le digo y vuelvo a reír.

— Ann..— me dice en tono de advertencia.

— Lo siento bebé, ¿qué quieres comer?— le pregunto sonriendo.

— ¿Qué tal si hacemos pizza?— Me pregunta.

— ¿Hay todo lo necesario?— le pregunto.

— Sí — me responde.

— Está bien, vamos pues— le digo y nos disponemos a preparar la pizza.