Sospechas

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7 malditos días, ¡Toda una maldita semana intentando descifrar el enigma de la muerte de mi querido Eren!.

Ya el tiempo de ignorancia que llevo hacia este tema me desespera y empiezo a marcarme como inútil, resumiendo: mi autoestima y esperanza se van al suelo, pero de algo tengo claro y es que no puedo asegurar que el asesino sea un demonio, hay algo dentro de mi que me pide no confiarme.

-¡Levi!-  el estrepitoso golpe de la puerta me confirmo de quien se trataba.

-Que quieres Hanji- dije cortante -No tengo tiempo para perder-

-¡No es eso!- afirmo -En la sangre de Eren encontré un veneno, le fueron introducidas grandes cantidades-

Al no ver mas que con función de parte del azabache por sus ultimas palabras del momento decidió continuar.

-Una sola gota de ese veneno es suficiente para derrumbar al de mejor condición, el hecho es que este es de difícil acceso, los únicos que pueden son los altos oficiales-

-Como Erwin...- pequeños recuerdos de extraños comportamientos posteriores a la misión llegaron.

-Esto confirma parte de tus sospechas sobre el homicida humano-  sin decir mas me dirijo hacia la oficina de este en busca de evidencia.
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Afuera de los cuarteles, por los jardines se encontraba aquel despreciable peluquín oxigenado con aires de satisfacción y tranquilidad que de por si no tardo en ser perturbada por una cuchilla presionando en su manzana de Adán, al predecir la razón esbozo una sonrisa.

-Vaya Levi ¿a que se debe tal atrevimiento?- aun así se mantenía quieto cual estatua, si se movía su garganta seria cortada sin mas.

-No me vengas con tus asquerosas palabras- afirmo mejor la empuñadura de la cuchilla -¡tu eres el desgraciado que mato a Eren!-

-Bueno ¿y que si lo hice?, esa abominación híbrida merecía morir-
La ira y sed de venganza lo llevaron a buscar acabar con ese asqueroso rubio.
Primero, segundo y tercer ataque en busca de atravesar piel fallaron. Cuarto ataque fue atrapado por la mano del contrario, pero aun así seguía haciendo fuerza.

-Si lo hubieras visto, tan cansado después de aquella masacre que el genero como la bestia que es, te admito que era muy atractivo, ¡me hubiera gustado probarlo en la cama!- el azabache lanzo una patada pero esta también fue nula -Aun así tuve la oportunidad de escuchar sus gritos cuando lo atreverse con esta misma cuchilla-

En sorprendentes fracciones de tiempo había atravesado a Levi con la misma navaja con la que mato a Eren.

Directo al estomago, con la sangre saliendo a montones, su cuerpo debilitándose a tal punto para desistir al ataque.

-¿Que tal si mueres para hacerle compañía?- de una patada lo tiro al suelo y a pasos lentos se aproximaba.

-De todos modos ya no tienes nada por que pelear... Nada por que vivir-

Te amo solo a ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora