Escucho la puerta abrirse. Mi padre ha llegado de eso no hay la menor duda. Inconscientemente mi cuerpo comienza a temblar, tanto el como yo sabe que se aproxima lo peor. Mantener la calma es mi mejor opción, dejare la opción de lanzarme por la ventana para cuando intente matarme.
Unas horas antes le había dicho a mi madre lo del teléfono celular. No había quedado de otra, de cualquier forma se enteraría, además, el celular me lo compre yo, sudándome el cu... así que no creo que le interese mucho pero sé que el mayor problema no es ese.
¿Por qué justo hoy Thomas no pudo quedarse con sus amigos a emborracharse y perderse como acostumbra?
Ella se lo contara, le contara lo ocurrido para librarse porque mientras más buena parezca ante los ojos de mi padre más esperanza tendrá de que no la ataque. Esos son sus ilusos pensamientos, ya que el miedo no la deja ver más allá y siempre hará todo lo que a su esposo le complazca, aun así cuando sabe que nada de eso servirá.
(***)
—¿Es que acaso nunca puedes solucionar nada? ¡Eres una inútil Brenda! Tanto tú como la mocosa esa solo se pueden arreglar de una manera
—No Thomas, por lo que más quieras. Prometo darle su merecida lección a esa chiquilla, pero por favor no me golpees.
Desde mi habitación puedo escucharlo todo. Se ha desatado la tormenta. En cuanto acabe con mi madre vendrá por mí, como todas las noches lo hace o al menos todas las noches en la que se encuentra en casa. Cualquier cosa que agote su paciencia, cualquier cosa que lo enfurezca la calma conmigo, con sus golpes; solo que esta vez la causante de su ira soy yo misma y por muy insignificante que sea el motivo se que eso lo enfurece aún más. Yo soy su blanco, mi madre y yo somos su bolsa de boxeo.
Aunque a la final no se quien se encuentra peor, si mi madre o el monstruo de mi padre. Si es que ambos se merecen ser llamados así...
Mi cara duele, mis piernas duelen, todo mi cuerpo duele pero lo que más me duele es mi alma. Sus golpes poco a poco van siendo más fuertes y esta noche no había sido la excepción, Thomas es la persona más despreciable del mundo, es un monstruo que se va llevando por el medio a todo el que se cruce en su camino y yo para el soy un obstáculo. Algo que debe destruir poco a poco y para mi desgracia... lo está consiguiendo.
La luna se encuentra oculta entre las nubes, escondiendo todo su brillo. Observo como lentamente se va perdiendo de mi vista y como la noche se coloca en un tiniebla total, una lágrima ahora se desliza por mi rostro reflejando la tristeza y el dolor en el que estoy sumergida. Soy como la noche, ocultando su luna interior, perdiendo poco a poco su brillo y llenándome de una oscuridad total.
¿Por cuánto tiempo será así? ¿Por cuánto tiempo mi madre estará bajo la tutela de mi padre? Y ¿Por cuánto tiempo más me obligara a mí también a estarlo?
Pero mi mayor pregunta es, si seré capaz de soportarlo... Me siento más insegura, más allá de los maltratos de Thomas están los miedos que he cosechado, están los defectos que cada día me recuerdo y me empeño en alimentar, están las virtudes que no soy capaz de reconocer y esta ese desamor que no me permite volver abrir las puertas de mi corazón.
Logro conciliar el sueño sumergida en mis pensamientos y de repente voy admirando una familia llena de ternura, una madre que me escucha y nunca se separa de mí, un padre que me protege. Pero sobre todo veo a una chica segura de sí que sonríe plenamente y contagia todo su alrededor de felicidad.
Holaa cosuras:) ¿como han estado? Yo me encuentro supeerr bien.
No había podido publicar porque el wattpad desde mi compu no quiere subir los capitulos, pero bueno mejor es tarde que nunca. No se olviden de votar si les esta gustando...
¡Me despido con besos y abrazos!
Chauuu.
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Help me
RomanceSabrina Jones, una chica de 16 años que se encuentra perdida en su propio ser. En un mundo de prejuicios y etiquetas ¿será capaz de poder subsistir? Ilusiones y sueños ocultos entre nubes de oscuridad. La motivación y la valentía serán la clave par...