N/A: Si lees esto te doy una nutella, ahre
1• Soy una floja asquerosa que no ha actualizado la historia, a pesar de estar de vacaciones, lose y lo siento. ❤
2•La historia ya va por los 15.5k de leidos y no he hecho ningun puto especial porque la historia esta recien empezando, Vale?. No tengo de quien consha hablar y de que consha van a hacer.
3•Dentro de lo posible (si mi pereza me lo permite) hare un maratón. Los capitulos seran largos y varios.
Advertencia: Posible divisacion de Lemon leve
(?Disfruten el capitulo👽
•☆•☆•☆•
Maratón 1/?
Apenas se "integro" al grupo de chicos con su plan de antes en mente, solo pasaron unos segundos para no soportar mas el hecho de que el chico de los ojos rojizos no le quitara la mirada de encima y retirarse de aquel grupo.
Se fue caminando del grupo, discretamente0 para que ellos no sospecharan nada y se dirigia hacia el bar de la casa de Haruka.
-¿Lo de siempre? -preguntó una voz conocida. Yuu se giró, en contrandose con Takeru, el barman que se presentaba cada que Haruka organizaba una fiesta.
-Mas fuerte, si puedes -respondió, con la mirada perdida en la variedad de alcohol organizada detras del barman, la mayoria de los liquidos presentes alli, siendo ya conocidos por el.
(N/A: Los menores de edad si beben, superenlo.)
-Como si eso fuera posible -habló el barman, refiriendose a que el dichoso trago de por si era fuerte. Sirvio su precido trago y se dispuso a atender a unas chicas sentadas 2 asientos mas lejos de el.
Lo probó, sintiendo un sabor a tequila nuevo, ¿De coco? ¿Vainilla? pensó, no supo su sabor especifico pero le habia gustado. Sintió como ese sabor se deslizaba por su garganta, calentandola a su paso. Un saber tan dulce y adictivo, pero a la vez fuerte.
Lo probó de nuevo, saciandose de la sensacion que aquel liquido le otorgaba. Y de nuevo, Y de nuevo. Hasta que la copa estuvo vacía.
Vaya, pensó, agitando la copa, enfrente suya. ¿Cuanto era eso? ¿250 ml? Bleh. Tenia buena resistencia asi que ignoro la cantidad de liquido que podia abargar la copa. Riendo por lo bajo, recordó aquella vez que una simple copa le habia provocado la vergüenza de su vida.
-Eh, Takeru -llamó al peligris, el cual se volteó al segundo siguiente-. Dame mas de esta cosa.
-A su orden jefe -bromeó el chico, sirviendole una copa "doble"-. ¿Ves que tengo buen ojo?
-Vale, Vale. Si entendí -replicó-. ¿Y la copa doble porque?
-Supuse que me pedirias mas, Yuu. Conociendote -bromeó. En ese momento, Yuu diviso por el rabillo del ojo como el par de chicas de antes miraban confundidas la escena.
-Vaya confianza, no? -murmuró una de las chicas, pensando que no le escuchaban.
Los dos chicos rieron por lo bajo. Pues al pensalo, era bastante raro que un chico cualquiera tuviera tal confianza con el barman.
Cuando ya hubo por la mitad de la copa doble, sintió como alguien se sentaba en el asiento a su lado -estando desocupado un montón de sillas altas en el bar-.
-Piscola 70 -Pidió el muchacho a su lado, con una voz grave y raspada. Takeru sirvió su pedido y se dirigió a lavar vasos, algo lejos de ellos.
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Amar para enfermar
Novela Juvenil¿Cual es el propósito de amar si siente que lo enferma, que lo debilita y lo exprime? Quizá su curiosidad por lo inexplicable fue su mas grande error. [Historia en edición 23/04/17]