En busca de ella

1.-

"Aquello contra lo cual no quieras aceptar, déjalo seguir su camino"
—En busca de ella

Marte.

Así es, mi nombre es Marte Aubriot, ¿muy común no?...No. Soy una chica que va en busca de la realidad o tal vez una que sea aceptado para mis ideales, nada de religión como "Dios todo poderosos que todo lo sabe", no; yo no voy para esas cosas, no me quedan y no creo que lo hagan, tal vez a menos de que algo extraordinario me pase y caiga en ese juego mental, en el que todos caen como en una red de pesca.

Las cosas van más allá de lo que podemos creer, esa es mi realidad y la verdad no la quiero cambiar, por el momento estoy bien con esa "ilusión" dirían mis profesores mediocres.

Voy a un instituto donde la mayor parte de mis compañeros, han sido lavado sus pobres cerebros con mentiras como que el "Señor creador de la tierra y el universo" existe realmente; mis padres muy católicos y creyentes de Jesucristo, me metieron a esta hermosa escuela (nótese el puto sarcasmo) y por el momento estoy atrapada en este sitio donde mi realidad no es aceptada.

Soy atea desde que tengo buen uso de la razón, a mediados de quinto grado cuando tenía alrededor de los once años, en una misa que organizó la escuela, un día festivo el "Padre" dijo: "Señor, no soy digno de que entres a mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme".
Justo en ese momento sentí como un golpe en la cabeza, de esos que no entienden el significado de una palabra u oración. No podía comprender aquellas palabras tan  ilógicas para mi cerebro en desarrollo de aquel entonces; ese mismo día después de llegar a la escuela le pregunte a mi padre su significado.

-Padre, ¿a que se refiere con eso?
-Marte, el señor todo poderoso, que todo lo ve y todo lo sabe, nos ha mandado a la tierra por qué somos pecadores, pero si confiamos en el y su salvación, estaremos bien.
- pero....yo no he pecado, he sido buena niña, eso es muy injusto,  no entiendo por qué el tiene que decidir eso, yo sé que soy buena niña, ¿por qué con eso no basta?
-hija ya lo discutimos y hazme el favor de no faltarle el respeto al señor todo poderoso que te ha dado la vida.
-en la escuela me dijeron que mi mamà fue quien me dio la vida.
-¿ a si?
-si -dije muy segura de mi razonamiento- y que nosotros hemos evolucionado a lo largo del tiempo, ¿sabias que antes éramos como una especia de changos?
-¿pero que te enseñan en esa escuela?, Jesucristo fue quien nos salvo, nos dio la vida en este paraíso, nos dio  la opción de elegir nuestro camino mientras sigamos creyendo en el. Todos somos hijos de Dios. - lo dijo como si fuese la verdadera respuesta a todo- y no se discute más.

Desde muy chica he tenido el pensamiento o tal vez presentimiento de qu todo lo que me rodea es una hermosa ilusión, una fantasía que como todo tiene su parte desagradable como él hambre, la pobreza y el constante dolor del alma en cada ser vivo, tal vez algún día despierte de este sueño, de esta fantasía o ilusión y veré lo que realmente estamos hechos más allá de energía, de los "protones" y "electrones" más allá del polvo de estrellas del que estamos hechos.

Después de la plática sobre creencias, que naturalmente termine perdiendo, subí a mi habitación y estuve pensando varias horas hasta la hora de la comida; un mes después después de pensarle mucho y darle vueltas a la cabeza sobre la verdadera existencia de "Dios" decidí en no creer más en esas cosas que dicen y buscar yo a lo largo de mi vida mi propio Dios, algo o alguien que este de acuerdo con mi pensamiento, que todo lo que creemos, sentimos, vivimos, soñamos y lo que nos rodea, va más allá de lo que podamos imaginar.

Encontrar aquel ojo en el cielo, que todo lo ve y que pueda leer tu mente, tal vez... yo soy la creadora de las reglas sintiendo todo pero sin poder cambiar la de los demás; algo así como la canción de "Alan Parsons" "Eye in the sky (un ojo en el cielo)"

Desde el momento en el que nací o posiblemente en el vientre de mi madre, tal vez incluso cuando mi alma estaba siendo creada, el universo o más allá de este han conspirado para que me planté estas preguntas sobre la verdadera existencia, para que cada acción forme parte de un camino que formamos, no como las carreteras o el dibujo de un lápiz que hacemos al crear un "garabato" "dibujo" "rayón" "mancha" tal vez..."arte"

Nadie lo sabe o tal vez pertenece a una forma de vida simplemente diferente y hemos sido elegidos para vivir en un momento y en un lugar exacto para conocer, aprender ir más allá de un sueño; los Egiptos, hace más de cinco mil años creían que los sueños eran mensajes de sus Dioses, tal vez sea cierto o tal vez no.

¿Acaso podemos darle valor a una profecía?