En busca de ella

2-.

"Con el paso de los años, las palabras se desvanecen"
—La ladrona de libros

Con forme fui creciendo las cosas cambiaron, poco a poco, segundo a segundo que se convirtieron en días, después en meses luego en años y ahora estamos aquí.

Justo en el lugar donde debemos estar pero... ¿por qué aquí? ¿Por que en este lugar lava cerebros?

—¿Por que aquí?, yo no pertenezco a este lugar Zainet.
—Y yo odio la comida de la cafetería, pero como tú dices por algo pasan las cosas-sonrió victorioso por no poder reclamarle a mi ideología.
—"Pir ilgi pisin lis cicis" - dije imitándola como niña chiquita.—te odio.
—Ni tú te la crees— dijo con una sonrisa.

Zainet era mi mejor amiga desde los 10 años cuando ella le tocó en mi salón, me caía mal en un principio pero estábamos en el mismo grupo de amigas, me resigne a hablar con ella pues conviviría con ella todo el año escolar así que le empezó hablar, a ella también le habían lavado el cerebro pero cuando ella cumplió los 12 años le confesé sobre mí no creencia y sobre mis verdaderos pensamientos al respecto; dejamos de hablar alrededor de dos meses pero un día se acercó a mí banca y me dijo que lo que le había confesado, le dio vueltas por mucho tiempo y que ahora no estaba segura de sus creencias; desde entonces hemos sido muy unidas, nuestras amigas que teníamos en común se empezaron a alejar de nosotras pero no nos importaba, nos teníamos una a la otra.

—Oye, ¿recuerdas a Jason?
—Sip — dije muy segura pues me hablaba de él todo el puto tiempo.
—Me di cuenta de que es un idiota.
—Aleluya creí que tendría que golpearte con la cruz del Señor todo poderos.
—Marte, no jodas
—También te amo
—Ja-Ja-Ja muy graciosita, bueno para alegrar más tu vida conocí a un chico.
—Ay no otra vez — dije murmurando y poniendo los ojos en blanco sin que lo notase.
—Si, lo quiero conocer no va a ser tan apresurado las cosas como con Jason.
—Pues suerte con ello.
—Me invitó a salir hoy en la noche
—Y vas a ir?
—Si pero...-me miró con una cara diciendo me todas sus maléficas intenciones.
—Antes muerta
—Por favor me dijo que iba a llevar un amigo suyo y que yo podía llevarte a ti.
—¡¿Que hiciste que?!, No, gracias que amable, pero tengo mejores problemas.
—¿Como cuál?
—Cualquier otro— le dije con una sonrisa
—me saco la lengua como niña chiquita— Sorry not sorry cariño pero ya acepte por ambas
—¿Que hiciste que?
—Llegó tarde a clases nos vemos en la salida y pasamos a mi casa por ropa digna.
—No esper...... idiota— me dejo sola para no reclamarle.

No me mal interpreten amo a mi mejor amiga y haría cualquier cosa por ella pero realmente no tenia ganas de salir y menos a una cita y diez veces menos a una cita doble.
Simplemente no.Demasiado drama par este cuerpo.
~~~~~~~~~

Pasaron las clases y como no compartíamos ninguna ese día Zainet y yo, decidí esperarla en el estacionamiento, donde se encontraba el coche de su mama donde ella se venía a la escuela, me puse mis auriculares para matar el tiempo hasta que escuche una alarma, era muy raro que sonara a esas horas se escuchaba en todos los lugares en toda la ciudad.
Saque rápidamente mi celular y llame a Zainet para decirle dónde rayos se encontraba, por qué seguramente ya había escuchado la alarma.

Toda la gente estaba corriendo hacia sus casas teníamos 10 minutos para ir hacia un lugar seguro, le mande mensaje a mis papas para decirles que estaría con Zainet. Y que no se preocuparan, me respondieron que les avisara cuando estemos seguras.

Poco después de que volviese a marcar por segunda vez llego mi queridas amiga corriendo como alma que persiguiese el Diablo.

—ya llegue, ya llegue, !ahora vámonos!

Subimos al auto y avelareamos lo más que podíamos  hasta llegar hasta su casa, bajamos corriendo sin siquiera cerrar las puertas, y bajamos a su sótano donde se encontraba el padre de Zainet y su hermana pequeña Sheril de cinco años de edad.

—Hasta que llegan— mencionó su padre, mientras que Zainet abrazaba a su hermana al oír el primer estruendo de una bomba, había caído cerca pero no lo suficiente como para destruir la casa.

La pequeña de cinco años abrazo más fuerte a su hermana mayor y me extendió la mano para que también la abrazara, poco después nos encontrábamos todos agarradosde las manos u cerrando los ojos a cada estruendo que se oía y apretándonos las manos a cada pequeño temblor causado por la misma bomba.

Recordé que tenía que mandarles mensaje a mis padres, así que saque el celular y les envié un mensaje de texto.

De: Marte Hora: 5:17pm
Estoy bien no se preocupen, ¿está bien Eder?

De: Mamá Hora: 5:20pm
Si estamos bien, te mando mensaje en caso de que pase algo más, por cierto Eder dice que te extraña.

De: Marte Hora: 5:27pm
Dile que yo también y que ya casi acabe, dile también que cante la canción que le enseñe.

De: Mamá Hora: 5:34
¿Que canción?, bueno está bien, supongo después me cuentas, te quiero hija :)

Leí su mensaje pero no le conteste hacían 5 minutos no caía una bomba y como lo marcaba la ley teníamos que esperar una hora, si en ese transcurso no sonaba ninguna bomba, podríamos salir.

—"Maldita sea la hora en que estallo la guerra"—susurre para mis adentros.