Aborde el avión. Cheque mi boleto y decía “15-AA” Entonces camine por el angosto pasillo hasta la fila 15 y de ahí busque el asiento AA. Mi asiento era el que daba a la ventana. Por lo menos en el largo y caluroso viaje iba a poder ver el paisaje. Puse mis cosas en la parte de arriba y me senté en mi sitio.
Saque mi celular del bolsillo de mis jeans porque sonaba. Era mamá. ¿Tan rápido me extrañaba? Me quería pero… ¿Tanto?
*LLAMADA*
-Bueno ¿mamá? - dije en tono de fastidio
-¿Estás bien pequeña?
-Si mamá, llevamos menos de media hora separadas. ¿Algo más que se te ofrezca?
-Si- dijo y escuche como tomaba aire- Disculpa si tardo es que son las emociones de que ya eres grande y ya no me necesitas
-Si mamá, al grano
-Bueno, cuando llegues te recogerá Niall
-¿Horan?
-Si, _______ {tn} Tu hermanastro.
-Ok, ¿y cómo lo reconoceré?
-Hace unos años fuiste y lo conociste pequeña. Te acordaras
-Mamá. Yo tenía seis estaba a punto de cumplir siete. El ahora debe tener diecinueve o veinte. Ya paso por la pubertad como yo. Debió haber cambiado aunque sea un poco.
-Si, pero aun asi lo reconocerás.
-¿Mi padre no quiere venir por mi? ¿Tanto me odia?
-No. Mi vida cálmate. El tiene trabajo. Su esposa Maura tiene club de lectura. Es Niall o nadie.
-Da igual. Espero conocerlo. SI me voy con otro y me descuartiza ya no es mi problema
-¡¡______ {tn}!! No digas tonterías. Nadie te robara, ni mucho menos te descuartizara. ¿Quieres que vaya contigo para cuidarte?
-¡Mamá no! Tengo diecisiete, confía en mí.
-Está bien. Bueno, adiós. Creo que ya tienes que apagar el teléfono. Te cuidas y me llamas cuando llegues
-Si ma’, adiós
-Te…-y colgué antes de que lo dijera, ya tenía mucho con que Niall me recogiera como para escucharla.
*FIN DE LA LLAMADA*
Cuando colgué voltee al sentir a alguien presente. Por estar hablando con mi madre no me fije que uno de los dos asientos que estaban a mi lado se había ocupado. A mi lado estaba un chico. Todo el camino vino roncando. No me dejaba dormir. Estaba cansada de escuchar su respiración tan áspera. Fui al baño, me moje la cara con la poca agua que salía del lavamanos. Regrese a mi asiento y seguía roncando el tipo. No hay respeto. Definitivamente no hay respeto.
Después de largas horas de viaje mi trasero estaba adolorido, mi cabeza zumbando y me pesaban los ojos. Llegamos cuando estaba a punto de agonizar y en cuanto la azafata indico que podíamos bajar yo Salí como rayo. Fui al lugar donde se recogían las maletas y después al lugar donde supuestamente estaba Niall. El cual como yo lo predije no estaba.
Después de esperar por una larga hora me senté en una silla y me dormí. No recuerdo en que soñaba, solo sé que era lindo. Una mano empezó a moverme un poco y al abrir los ojos lo primero que vi fue unos ojos azules hermosos y una sonrisa linda.
-Hola – dije dormida-Debes ser Niall
-El mismo- sonrió y yo cerré los ojos- ¿Tienes sueño?
-No –dije sarcástica- la luz de la sala me daña la vista
-Tu vista es muy delicada pequeña
-No me digas pequeña –dije con el seño fruncido-
no soy pequeña
-Tienes 17, yo 19 eres pequeña
-No pues si eres súper grande
-Lo sé- sonrió- vamos que vine en taxi.
Me ayudo con algunas maletas y fuimos al estacionamiento, tomamos un taxi y Niall dio una dirección.
-¿Por qué llegaste tarde? -Dije ya despierta
-Se me olvido
-Se ve que te importo.
-No es que no me importes, de hecho eres como una hermana para mi, o algo asi- sonreí- Hay algo que deba saber de ti.
-Tengo 17, soy un poco bipolar, y odio la palabra “Amor” –hice una mueca al pronunciar la palabra.
-¿Por qué?
-Simplemente no creo en esa palabra ni en lo sentimientos
-¿Alguien te lastimo? – pregunto preocupado
-Es más que eso, la relación de mis padres fracaso, mi novio engañaba a una chica con migo y yo no lo sabía, y muchas otras cosas.
-Mi mamá también fracaso y no en uno si no en dos matrimonios, tu padre es el tercero, mi papá el segundo, y con el primero no tuvo hijos. Yo he pasado por 4 relaciones y todas fracasaron y sigo creyendo en el amor.
-Por que eres un tonto
-Y tu no- sonrió – me caes bien hermanita, ¿Te puedo llamar hermana?
-Si – sonreí – es lindo tener un hermano después de tanto tiempo.
-Lo mismo digo- y todo el camino estuvimos callados.
