Mi compañero de Trabajo [Editando]

Capítulo 15

—Luigi, ¿Te sientes bien? ¿Te duele algo? —Dijo el castaño en broma, el pelo negro rio un poco.

—¿Qué? ¿Apoco no te gusto el beso? —Le dijo este al castaño, cierta voz placentera.

—Claro que me gusto, tonto. —Nicolás volvió a besar al chico, de manera apasionada. —Pero, ¿Qué paso? ¿Qué decisión tomaste?

—¿Qué no vez tonto? Elegí estar contigo. Las cosas con mía no se llegaron a resolver, y oficialmente termine con ella.

—Pues, que mal. Pero esa zorra te traiciono, no debías seguir teniendo compasión con ella. Pero me alegro que no hayan llegado a un arreglo. ¿Estás seguro de la decisión que tomaste?

—Si no sabía qué decisión tomar, no te hubiera citado aquí. —Dijo el chico y beso al castaño.

—Luigi, es que no quiero ser el causante de un desorden que tengas en tu cabeza.

—Nico, tú eres mi desorden desde el día en que te conocí. Antes me arrepentía de esto que sentía, pero no puedo privarme de darme una oportunidad con el chico que me hizo ver las cosas claras.

El castaño no estuvo más que feliz, por la noticia. Lo menos que él se imagina es que el pelo negro le iba a salir con algo así. La pareja acordaron que mientras tanto, ellos por ahora se conocerían bien, ya que ellos no conocen casi nada de la vida del otro. Y era lo mejor para ver si la relación podría sostenerse para llegar a algo más que amigos, sino el ser pareja.

La pareja salieron del baño en donde estaban ya que no podía ocultarse más, pero aun no le dirían a nadie lo que está pasando entre ellos. Lo harían más bien como un secreto.

Al llegar a su departamento, Nicolás no se aguantaba las ganas de estar callado. Tenía que contarle a alguien, ya sea su amiga Jessica o su padre, que es el hombre principalmente que quiere ver feliz a su hijo. Pensaba llamar a su amiga y contarle todo; pero al ver las llamadas de su padre, decidió llamarlo a el primero.

Mientras tanto, Luigi se encontraba en su departamento hablando con su mejor amigo de infancia; es un chico que tiene muchos años fuera del país. Pero que Luigi y el no habían perdido contacto, el pelo negro le estaba contando sobre todo lo que había pasado con su compañero de trabajo;

Conversación telefónica.......

—Pero, ¿Crees sentirte mejor estar con ese chico? —Pregunto el hombre con voz seria.

—Yo preferí darme esa oportunidad con nico, que nunca quise darme. Yo realmente veía como una aberración la homosexualidad, pero cuando conocí a nico, sentí que muchas cosas que quise vivir con mía en términos del amor. Con este chico es muy diferente. No sé cómo explicarte....

—Eso es porque estas enamorado, ¿Nunca sentiste eso por mía?

—La verdad, al principio sí. Pero luego ese amor que sentía por ella se estaba desvaneciendo mas y mas. Hasta que ella dejo de ser la mujer que yo conocí, pero hasta ahora no me había dado cuenta de eso.

—Bueno amigo, yo te deseo lo mejor del mundo. Sé que serás tan feliz con ese chico que como lo fuiste con mía. Bueno, te dejo.... Tengo que atender a mi esposa. —Hablo el chico del otro lado de la línea despidiéndose.

—Te cuidas Carlos, y me saludas a tu esposa. —Espeto el pelo negro alegre.

—¡Así será! —Dijo este y colgó.

El pelo negro se quedo un poco pensativo, con respecto al cambio que ha dado su vida por completo. Pero, ¿podrá el joven ser alguna vez feliz con la persona que ahora escogió luego de mucho tiempo estando con mía? Eso se lo dejaría al tiempo. Estaba pensando llamar a nico para saber del chico y escuchar su voz, pero un ruido del timbre de su puerta lo interrumpió. Curioso por saber quién es la persona que lo llama a esta a hora en su casa, lo hizo ir rápidamente a abrir la puerta cuando.....

—¿Mía? ¿Qué haces aquí? —Pregunta el joven impresionado de ver a su ex, sabiendo ella que ya terminaron.

—Vine para explicarte tranquilamente todo lo que paso. —Espeto la joven y entrando al departamento sin el permiso del pelo negro.

—Mía, yo creo que tu yo dejamos todo claro. ¿O me equivoco?

—Solo quiero aclarar lo que viste el otro día en mi casa, además tú entraste sin pedir permiso.

—¿Se te olvido la cena que teníamos ese día? La cual tu me dejaste plantado, y yo de tonto que pensé que te había pasado algo.

—Yo quería ir, pero se me presento ese tipo. Y me quería violar, y no tuve más remedio que aceptar.

—Que bajeza la tuya mía, mira lo que estás diciendo. ¿Tú no sientes dignidad por ti o qué? ¿Hace cuanto perdiste eso?

—No me digas eso Luigi, que yo te amo. Yo...

—No, lo tuyo no es amor. Más bien es una obsesión, te veo y no reconozco a la mujer de la que alguna vez me enamore.

—Luigi, ¡Por favor! No digas eso. Que me duele, yo si te amo.

—Porque no mejor te vas a donde tu negro, y a mí me dejas en paz. Que ya me tienes harto.

La joven se quedo un momento en silencio pesando en la actitud de su ex y llego a siguiente conclusión.

—¿Por qué te quedas callada? ¿Qué no te piensas ir de mi casa?

—Hay otra, ¿verdad?

—¿Otra qué?

—Pues, otra mujer idiota. Porque no creo que porque solo te pegue los cuernos me hayas olvidado de la noche a la mañana. Aquí hay otra mujer, o....... —La joven pelo rojo se quedo otra vez pensando de nuevo, y otra vez llego a la conclusión. —Es nico, es tu amigo el marica.

—¿De qué rayos hablas? ¿Qué tiene que ver Nicolás en esto?

—Que ustedes dos podrían andar juntos. Mi olfato de mujer me lo dice, tu comenzaste un romance con ese desgraciado.

Luigi cansado de lo que estaba escuchando de mía, decidió sacarla del departamento, porque el joven ya no aguantaba más las calumnias de su ex.

—Lárgate de aquí, ya mi paciencia se termino. —Decía el chico mientras tomaba a su ex novia del brazo, y sacándola del departamento. Esta hacia protesta para que él se detuviera.

—Me la vas a pagar Luigi Hurtan, juro que les haré la vida imposible a ustedes si descubro que andan juntos. —Dijo la joven en tono amenazante desde la puerta.

—¿Me estas amenazando?

—Más bien es una advertencia, para ti y para ese marica de Nicolás Hernández. Los dos me la van a pagar, ¿Escuchaste? ¡LOS DOS!!!!

—Voy a llamar a la policía si no te callas, y esta vez haré que metan presa de por vida. —Dijo este y cerro de golpe la puerta.

Los niveles de locura de la joven llegaron a tal extremo que parece que esta se obsesionó con él. Pobre de ella, tan buena chica que era cuando la conoció y mira como termino, es por eso que uno no conoce bien a las personas hasta convivir tiempo después. Y eso le toco vivir al pelo negro. Luigi pensaba llamar a Nicolás para contarle lo sucedido, pero al ver la hora que eran, prefirió no molestarlo por esta noche. Ya mañana le podrá contar todo en el trabajo.

Hola....

Aquí un nuevo capítulo... espero les guste y me ayuden con votos, y comenten.

Hasta el próximo capitulo........