A veces sentía un vacilón inmenso recorrer mis venas alojándose después de varios recorridos en mi corazón abriendo paso a un sofocación en mis pulmones que me dejaba absorto de todo. Así me sentí cuando me di cuenta que habían sonado las 12 en punto y ya era Año Nuevo, se me había ido de las manos todo el dolor que sentía en ese momento incluso dude si quiera en festejar puesto que no quería festejar un año más sin ti a mi lado, pero me rehusé, a pesar de que no la pase en grande no deje que tu ausencia me hiciera tanto mal por primera vez y dije: "¿Que tal si por primera vez en tanto tiempo me decido a olvidar tu asqueroso rostro y tú repugnante forma de querer?."