Capítulo 15.

16 1 0
                                    

La noche anterior había terminado de una manera rutinaria en mi vida. Esa noche tenía todas las papeletas de qué recibiría una llamada más de Kyle y una vez más volvería al lado de Jay. En realidad no sé la razón pero siempre vuelvo a él y no porque Kyle llame, creo que en el fondo es lo que necesito. Estar cerca de Jay.

—Ah, mierda, mierda. —dijo Jay a mi lado. —Has estado genial. —dijo más tarde mirándome.

—Jay. —dije.

—Oh, no. —dijo. —Alice. Deja los consejos para otro día, de verdad.

—Siempre estas igual y esto me empieza a cansar. —dije.

—¿Que te empieza a cansar? —me preguntó desde la cama.

—Tu comportamiento conmigo.

—Alice, estas todo el día viviendo en un cuento de princesas, despierta de una vez y date cuenta de que esta es la vida real.

—Me parece muy fuerte que tú me digas a mi esto. —dije. —Tú que no dejas de prometer y solo para hacer esto. —dije señalando lo que acabábamos de hacer.

—¿Por qué estas cosas y ahora? —dijo.

—¿Por qué?

—Si. ¿Por qué? —dijo.

—Me dijiste que me valorarías más. —dije. —Hazlo de una vez y no me hagas verme como todas aquellas chicas que están cerca de vuestros coches para que os las folléis a cambio de un poco de fama.

—¿Te sientes así?

—Me haces sentirme así. —le contesté. —Dime que diferencia existe entre ellas y yo.

—Tú eres mi novia.

—¿Sabes lo que significa eso? —dije.

—Te pedí que estuvieras conmigo porque te quiero, Alice.

—No todo es decir te quiero, Jay.

—¿Y que más necesitas?

—Tú deberías saberlo.

Me vestí y salí de aquella casa en dirección a la mía.

POV'S JAY

Bajé las escaleras pensando en lo que Alice me había recalcado un millón de veces en este último mes y vi fuera a mi amigo.

—Idiota. —le dije a Kyle y aquel me miró ofreciéndome mi droga favorita.

—Capullo. ¿Y,  Alice? —dijo él.

—Se acaba de ir.

—¿Y eso por qué? —preguntó.

—Sigue con el mismo cuento de siempre.

—¿Y qué tiene de malo que te diga las cosas a la cara?

—No se que le pasa, tío. —le dije mientras fumaba. —Últimamente está muy pesada con que la valore y me cansa que me lo recalque cada vez que nos vemos.

—Tal vez si lo hicieras dejaría de decírtelo.

—¿Y qué narices le digo o hago? —le pregunté.

—Tú conoces a tu novia.

—Cada día las mujeres se me hacen más complicadas. —dije fumándome el último calo de aquel porro y lo tiré. Tanto Kyle como yo giramos nuestra cabeza hacia nuestra entrada y por allí aparecieron dos amigos nuestros.

—Hijo de puta. —dijo Jordan y me miró riéndose.

—Cabrón.

—¿Ha caído? —preguntó Jordan.

Treat You Better (Shawn Mendes)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora