Capítulo 2: "Cambia tu apariencia personal"

441 55 6
                                    

Si quemar todos nuestros recuerdos fue difícil, imagínense lo que es tener que eliminar a mi ex novio de todas mis redes sociales.

Cristina había mencionado que para poder superarlo, tenía que eliminar todas las fotos que tenía con él en mi perfil de Facebook, Instagram, twitter e incluso en mi galería de fotos. Era como eliminar la parte virtual de mi relación con Adam.

Comencé por lo más sencillo, eliminar nuestras fotos de Instagram. Tampoco era como si utilizara mucho aquella aplicación, pero de igual manera había publicado un par de fotos ahí.

Antes de hacerlo, revisé los comentarios y descripciones. ¿Cómo no me había dado cuenta que Adam nunca me había puesto un comentario? ¡Ni un maldito like!

Era inaceptable y me sentía tonta por no haberlo notado antes.

Se me fue haciendo más fácil la tarea, a medida que fui cayendo en cuenta que a mi ex novio nunca le importaron nuestras fotos, estados de Facebook o enlaces que yo como tonta compartía en su perfil.

Para ese momento, la opción "Eliminar" se había vuelto algo que presionaba inconscientemente.

Estuve toda una tarde eliminando cosas en mis redes sociales.

Luego seguí con las imágenes y videos de mi galería de fotos, pero ya me encontraba tan harta y decepcionada de aquel imbécil, que no se me hizo difícil.

Estaba en un tal arranque de valentía, que aproveché hasta de sacarlo de mi lista de contactos telefónicos- aunque aún tenía su número grabado en mi memoria- y borrar las canciones que me recordaban a él.

Mi teléfono se encontraba renovado, sin recuerdos de él, pero lamentable era que aún mi corazón siguiera con toda nuestra historia a flor de piel.

Suspiré entrecortadamente y luego dejé mi teléfono a un lado.

Encendí mi computador y coloqué música. Para mi estado de ánimo, me venía bien una lista depresiva, así que le di play a un mix de Música romántica de los 2000 y me dejé llevar por la melancolía.

(....)

Como buena amiga, Cristina se había presentado nuevamente en mi casa para cerciorarse que no atentara contra mi vida.

-¡Que no voy a suicidarme! -le repetí con fastidio y suspiré mientras me tumbaba en la cama.

-No, porque hoy nos iremos de compras- hice una mueca de desagrado y negué con la cabeza.

-¿De compras?, ni hablar- mi amiga soltó una carcajada y luego se acercó a mi closet.

Revolvió mi ropa y sacó algunas prendas con una mueca de asco en el rostro.

Ya, tampoco vestía prendas de última moda, pero tampoco me parecía a una indigente... ¿o sí?

-Todo lo que saqué, se irá a la basura y me importa bien poco si te parece bien.

Me acerqué con rapidez al montón de ropa que mi amiga había sacado de mi closet.

La mayoría de ellas, las había comprado en las boutiques de oferta.

-Cris, no pienses que te desharás de mis camisas- fruncí las cejas y tomé las prendas entre mis manos.

-Ya está decidido, Georgia.

Entonces mi amiga tomó toda la ropa que se encontraba en el suelo de mi habitación y la fue metiendo en una gran bolsa negra.

-Tienes que cambiar tu apariencia- decía mientras seguía con su tarea auto-impuesta.

En ese momento supe que no tenía alternativa y debía decirle adiós a mis viejas camisetas y pantalones holgados.

(...)

Cristina tenía una tremenda facilidad para escoger tenidas de ropa que combinen a la perfección, todo lo que a mí me faltaba, porque mi sentido de la moda no estaba para nada desarrollado.

Mi amiga había seleccionado para mí un par de vestidos que no eran para nada de mi agrado, pero aún así estaba encerrada en un probador con ambos vestidos en mano.

Negué con la cabeza y comencé a probarme el primero, que era completamente de color negro.

Asomé la cabeza entre la puerta del cubículo y el exterior de éste. Cristina inmediatamente entró en el probador y me hizo dar una vuelta.

-¡Genial! Te queda excelente- suspiré con resignación y me encogí de hombros. A mi parecer, mis piernas se veían extremadamente gordas, pero por lo visto mi opinión no valía de mucho.

-Sí, me veo súper genial. - ironicé cada palabra, pero ni por eso la sonrisa de satisfacción no lograba desaparecer del rostro de mi amiga.

Media hora estuve entre vestidos y pantalones ajustados.

Luego de eso, entramos a una tienda que sólo tenía zapatos de tacón.

-¡No puedo caminar con esas cosas! ¿Quieres que consiga un yeso en el pie? - abrí los ojos con asombro y tomé un par de zapatos entre mis manos.

No, definitivamente no lograría ni en mis mejores sueños caminar con un par así.

-Conseguiremos unos más bajos. Tienes que aprender a caminar con tacones- Cristina pasó a mi lado y caminó hasta encontrar a una vendedora libre.

Me senté en un sillón negro de cuero que se encontraba dentro de la tienda y me acomodé en él.

Odiaba salir de compras, por eso nunca lo hacía.

-¡Estos quedarán perfectos con el vestido azul! - la vendedora me extendió un par de tacones azules, mientras mi amiga me observaba con un brillo especial en los ojos.

Entre quejidos y negaciones por mi parte, me coloqué los zapatos y traté de caminar con ellos.

Parecía bambi aprendiendo a caminar, de seguro.

Arrastré cada paso, con miedo de caerme o torcerme el pie. Me sentía totalmente ridícula.

-Solo necesitas práctica- la vendedora me sonrió con amabilidad. Claro, que fácil se oía eso.

-Cristina, te declaro oficialmente la peor amiga del mundo- mi amiga soltó una carcajada y luego me guiñó un ojo.

-Para servirte.

(....)

Finalmente, si había comprado los malditos tacones que Cristina había escogido, pero sabía que no llegaría a utilizarlos nunca, era imposible caminar con esas cosas en los pies.

Entré a casa con las bolsas y las deposité en mi cama.

Había sido un día largo y me sentía igual que el día de ayer; cansada y triste.

Se suponía que al otro día, Cristina y yo iríamos a la peluquería después de clases. El problema no era decirle adiós a mi cabello largo, sino que Adam asistía a la misma universidad que yo.

Iba a ser la primera vez que lo vería luego de nuestra ruptura y todo mi cuerpo lo sabía, porque no dejaba de temblar y pensar en ello.



N/A

¿Les va gustando?

Pd: Capítulo dedicado a lizethsifuentes <3

Como sobrevivir a un mal amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora