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El tiempo es una carga, es lo que creo.

Por la mañana finaliza mi mudanza, solo faltan unos cuantos cargamentos por lo que los espero frente a la gigantesca mansión.
Un par de chicos algo mas jóvenes que yo hablan sobre el magnífico lugar.

- ¿Conoces "El Bucle Peregrine"?.

- ¿Te refieres a la mansión Peregrine aquí en Gales?.

- Dicen que su seguridad es increíble.

- Si, pero son departamentos solo para gente importante y de sociedad.

Tengo un mal hábito.

- es por eso que cada inquilino tiene a un miembro del servició secreto ¿No?

- Si, un guarda espaldas... Mira, al parecer el es un nuevo inquilino

El chico me señala y yo miro hacia otro lado restándole importancia.

- Creo que lo he visto en alguna parte...

- Es el heredero de una familia rica, de sangre noble por lo que se...El conglomerado O'Connor...

- Parece ser el centro de atención- me dice uno de los hombres que descargan mis cosas del camión de mudanzas.

Llevo haciéndolo
desde pequeño...

Y no es algo que
pueda controlar...

- ¿Acaso recibir la atención de aburridas madres de familia me haría mas feliz? No quiero ser el tema de habladurías tontas entre amigos - saco una sonrisa confiada de lado - ¿Porque no te dedicas solo a hacer tu trabajo?

El hombre se siente avergonzado así que solo asiente y pone de nuevo manos a la obra mientras trata de alejarse de mi.

Pondré cara de valiente y abusare verbalmente de la gente sin razón...

Este es mi mal habito...

Después de unos minutos mas quedo solo en el portón de la entrada con el carrito de carga que lleva mi equipaje.

-¡Enoch! - volteo a verlo, el chico de tes pálida que dice ser mi amigo.

- Millard... - hago parecer que no me importa su presencia para que se aleje. Hace lo contrario.

- Finalmente decidiste venir aquí- sonríe

Espero a que llegue junto a mi para empezar a avanzar dentro de la lujosa mansión. El me mira de reojo.

- ¿Te arrepientes por tu hostilidad sin sentido otra vez?

Volteo a verlo con recelo y aprieto mas fuerte la agarradera del carrito.

- No se de lo que me hablas...

Me dirige una mirada triunfante y yo aprieto los labios.

- ¿Es todo lo que has traído? - señala mi carrito, unas cuantas maletas.

- Ya han bajado todo lo demás - digo mas relajado - Deja de fingir estar preocupado por mi, solo vivimos cerca uno del otro , pero no tenemos nada mas en común.

- Pero se mucho mas de ti, como aquella vez en sexto grado que unos chicos te invitaron a jugar...

(El recuerdo se reproduce instantáneamente:
- Enoch, ¿quieres jugar Soccer con nosotros?
- A las ovejas les gusta andar en grupo - fue mi respuesta)

- Sin embargo todo ese día pasaste triste mientras los veías jugar.

- No los veía, solo los estudiaba y estaba enfermo ese día! - conteste de inmediato.

- También me escribiste una carta muy formal después de que nos peleamos.

- No lo hice! - me exalte - solo practicaba mi caligrafía!

El permaneció callado y finalmente entramos

Este lugar es conocido como la Mansión Peregrine, pero su verdadero nombre es el Bucle Peregrine.
Un complejo de departamentos para la élite, donde solo los elegidos pueden vivir.
O, eso es lo que la gente debe pensar.

Yo... Solo vine aquí para estar solo.

Entro al ascensor junto con Millard, aprieta el botón 5, mi pisó.

- Estoy en el piso 3 - me dice con una sonrisa cuando el ascensor se detiene -Llámame si necesitas ayuda.

- No la necesitó - respondo mientras las puerta se abre de par en par, salgo y le dirijo mi cortes agradecimiento.

El asiente y las puertas se cierran. Dejándome sólo.

Vuelvo a tomar el carrito, sin embargo me olvido de la correa floja, que sin querer piso haciendo tambalear el carrito.

Todo se resume a hacer caer un par de maletas. Con resignación recojo una de ellas, la mas grande, cuando volteo hacia la otra, una chica de tés clara y pelo rojo e intenso me sonríe con la maleta en las manos, me la entrega.

- ¿supongo que ahora debo agradecerte? - le hablo con fastidio.

Ella niega sacudiendo la cabeza a ambos lados y se inca en una rodilla frente a mi, lleva su mano izquierda al pecho y yo me quedo totalmente desconcertado.

- Tales palabras no son necesarias, he esperado tanto tiempo para conocerlo - levanta la cabeza hacia mi y veo un ligero sonrojo en su rostro y un pequeño charco retenido en sus ojos - Joven O'Connor.

- ¿Estas... Llorando? - <<Cuanta euforia>> pienso mientras la veo, ella vuelve a bajar la cabeza en señal de respeto.

- A partir de hoy, es mi deber velar por su seguridad diaria, mi nombre es Olive Abroholos

- ¿Es broma o algo por el estilo? - ella niega - una chica velando por mi seguridad, creó que es una verdadera burla.

- Nada de eso - respondió cortésmente.

- Entonces eres del servició secreto ¿no? - ella asiente - no he firmado contrato contigo.

- ¿Esta diciendo que no me necesita?

- Es exactamente lo que digo

- Entonces - de la nada me entrega una funda alargada, y da unos pasos atrás para ponerse totalmente de rodillas y con las manos al piso. Yo saco la gigantesca catana - Le ruego que me deseché ... <<Espera, ¿que?>>

- ¿D... Desecharte?

- Solo existo para usted, y si usted no me necesita, mi vida pierde significado.

- Deberías apreciarte un poco mas! - mi voz parece eufórica, nunca pensé estar tan sorprendido alguna vez en mi vida.

-Es tan amable por considerarme -habla de nuevo mientras junta sus manos en forma de suplica - por favor déjeme ser su sirviente.

Esta loca...

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⏰ Última actualización: Mar 07, 2017 ⏰

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