Tengo ganas, gracias a ti tengo ganas de todo
como nunca había tenido antes.
Tengo ganas de escribirte miles de páginas.
Tengo ganas de una vida entera contigo para demostrarte lo muchísimo que significas para mí, lo mucho que me haces sentir con a penas nada, y lo muchísimo que me haces sentir cuando das todo por mí. Una vida no me parece suficiente, pero lo voy a dar todo para que no se me quede corta.
Tengo ganas de darlo todo por lo que realmente merece la pena, de darlo todo por ti, darlo todo por esto que tenemos, por esto que hemos labrado después de tanto tiempo.
Tengo ganas de dedicarte mil letras.
Tengo ganas de explotarte mil veces esa sonrisa que me vuelve loco, que me hace evadirme de todo cuanto me preocupa, que hace que explote mi sonrisa como con nada ni nadie.
Tengo ganas de picarte, que me piques, y luego comernos a besos.
Tengo ganas de hacerte temblar mil veces, y que no sea de frío. De notar cómo se te acelera el pulso apoyado en tu pecho, acelerado pero más seguro que nunca.
Tengo ganas de quitarte el frío con unas palabras cuando estemos lejos, de saber que aunque no te tenga delante también te hago sonreír sin querer frente a la pantalla.
Tengo ganas de tapar esas grietas ocasionadas por el pasado con mil experiencias nuevas, de caer contigo si es necesario, pero para levantarte mil veces más.
Tengo ganas de sentir las marcas de tus uñas, y que más tarde recorras el trazo suavemente con tu índice, para mostrarme hasta qué punto te hice sentir.
Tengo ganas de que nos digan mil veces que nos complementamos como nadie, que nos digan que somos tal para cual, que nos vean un futuro juntos, que hagamos felices a quienes quieran vernos felices, y rabiar a más no poder a quien no lo quiera.
Tengo ganas de mil momentos más junto a ti, ya sabes, de estos que luego no dejamos de recordar; y ganas de esos momentos con los que soñamos tener en un futuro y que vemos tan posibles.
Tengo ganas de flipar con esa magia que tienes, que tenemos, el resto de mis días.
Tengo ganas de no dejar de vivir en ese mundo al que me transportas cuando estamos a centímetros, al que nos transportamos, del que nunca queremos volver.
Tengo ganas de esa escapada que tenemos pendiente y que cada vez está más cerca.
Tengo ganas de ti, de todo contigo,
de nada sin ti.
