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La manada

 La noche había llegado a Beacon Hills, para Derek no fue necesario que le diesen una de las tantas habitaciones que tenían el Instituto, el ya había tomado su antigua habitación la cual estaba intacta, era realmente extraño, normalmente cuando un Cazador de Sombras se iba a las semanas limpiaban su habitación, sin embargo la suya estaba igual, quizás no estaba del todo sucia, lucía limpia como si alguien se hubiese tomado la molestia en limpiarla cada semana.

 ─Hey... ─escucho una voz detrás de él y se dio la vuelta, encontrándose con Isabelle apoyada en el marco de la puerta─... ¿te sientes bien al regresar a casa?

Isabelle se había vuelto para Derek una buena amiga, quizás en Beacon Hills solo tuvo a Malia todo el tiempo, en cambio cuando llego a Los Ángeles los Lightwood lo habían recibido con gran regocijo, aunque siempre tenían una que otra misión,  la chica se había vuelto su confidente y su mejor amiga. Quizás en el mundo de los Cazadores de Sombras las personas homosexuales no fuesen bien vistas, en cambio, ya Isabelle estaba acostumbrada a eso, ya que su hermano igual era gay, como él. Recordó entonces cuando Izzy intento que ambos salieran pero no funciono, ambos no eran compatibles.

─En eso estoy... ─admitió Derek soltando un largo suspiro─...solo es raro volver.

─¿Por tu prima?

─Se que me odia por haberla dejado.

─Es joven, de seguro entenderá ─Derek asintió─. Ya va siendo hora ¿vamos a la sala de armas?

 ─No será necesario ─de su chaleco Derek saco una pequeña daga y uno de los cuchillos serafín haciendo una mueca con los labios─. Traje esto conmigo.

Los cinco jóvenes se habían encontrado en el pasillo formando un semicírculo entre ellos, por más que Liam tratase de convencer a Malia que fuese con ellos, ella prefirió quedarse con Kira y la entendía, quizás él no tuviese a su propio Parabatai, cuando quiso pedírselo a Brett éste ya era mayor de edad y se había ido del Instituto, lo cual había dejado algo triste al castaño.

El tener a cuatro nuevos reclutas le resultaba un tanto extraño, ya que desde hace un tiempo solo eran él, Kira y Malia, ya hacia un tiempo no habían mas nuevos Cazadores de Sombras que viniesen al Instituto. Miro a Alec y a Isabelle quienes estaban hablando entre ellos mismos y Lydia que estaba ahí parada jugando con sus propios dedos, aún en su mente se preguntaba la historia sobre ella, como había terminado convirtiéndose en una Cazadora de Sombras.

─Muy bien todos ─dijo Derek con voz autoritaria, entonces pensó en el tono de voz que tomaba Malia cuando entrenaban─. Ya es hora de que vayamos hacia el bosque y averigüemos que es lo que están tramando estos lobos. ¡Liam! ─el cuerpo de Liam se estremeció al escuchar su propio nombre─ Tú eres el único que vendrá con nosotros ya que fuiste al bosque, así que necesitamos que seas nuestro guía en lo que nos vamos aventurar. Lydia ─esta vez la voz de Derek paso hacia la chica la cual estaba a su lado─. Tu eres nueva en esto, así que ten por seguro que tendrás mi total protección, incluso la de todos nosotros, pero seguro como ya te han dicho en la Academia debes cuidarte por ti misma a veces, no siempre tendrás a otro Cazador de Sombras contigo ─la pelirroja solo asintió con la cabeza. La mirada de Derek paso por todos ellos hasta volver sus ojos a Liam─. Liam tu aún sigues en entrenamiento, así que ten cuidado. Por ahora será mejor que tu y Lydia se marquen algunas runas en ustedes.

Liam asintió con la cabeza y miro a la chica a los ojos, ésta sonrió un poco al ver al muchacho. Saco su estela y marco algunas runas que iban a necesitar esa noche en los brazos de Lydia, observo como esta cerraba los ojos, el castaño imagino que era para soportar el dolor de las runas, incluso él aún no se acostumbraba a como estas ardían en su piel.

[#1] Into the Shadows [Sterek & Malec] (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora