Capítulo 10

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~¿Pero tu estas bien? ~ hable al notar que Lu dejaba de sollozar.
~Si,  solo que ya sabes el.. el duelo ~sono demasiado dolida.
~Lu, yo solo quiero que sepas que... ~no quería sonar cruel ~ yo estoy aquí para lo que necesites pero, es solo un libro~ hubo un momento de silencio y derrepente más sollozos.
~Sabes Jane,  te lo agradezco pero,  el no merecía morir ~ más sollozos de su parte.
~ OK mira,  hagamos algo,  hoy pasa todo tu duelo, llora todo lo que quieras,  pero por favor ven mañana,  te necesito por si no termino de limpiar algunas cosas.
~Claro ~dijo sonando más tranquila ~te prometo mañana ir con un poco más de animos, te quiero.
~Yo también Lu.
Termine la llama que llevaba más de una hora con Lu,  al parecer había muerto alguno de sus tantos "chicos literarios" , por eso no me había contestado ninguna llamada el día de ayer hasta ahora y toda la conversación estaba girando sobre ese chico que había muerto y el cómo se encontraba de luto,  sin duda Lu le tomaba a cada libro que leía un cariño muy especial.
Resignada a que tendría un día muy agitado, decidí ponerme en marcha para comenzar con la limpieza profunda ya que mañana esperábamos al enigmático Ethan Russell, que era como ahora yo lo llamaba.
Tome los productos de limpieza y me dirigí primero al cuarto de los señores en donde di una limpieza profunda pero general,  a continuación fuí directamente a la nueva habitación de la señorita Lily en donde solo limpie los únicos muebles que no estaban cubiertos por plásticos ya que ella si llegaba dentro de dos semanas como normalmente había dicho,  y por último me dirigí al cuarto del joven Ethan en donde acomode todo perfectamente y solo hice una limpieza muy básica por que ya estaba muy cansada,  sin duda Lu mañana tendría que ayudarme.
Intentaba bajar las escaleras con dos bolsas de basura cuando Manuel me vio, inmediatamente corrió para ayudarme a bajar.
-¿Quieres que te de una mano con esto?-dijo mirando las bolsas.
-Claro,  son sólo basura pero te juro que estoy muy cansada - hice un gesto de exageración y el rió.
-Y a todo esto dónde está tu maravillosa loca amiga Luisa.
-Tiene un pequeño problema con algún...
-Personaje literario -termino la frase y yo solo asentí -esa chica si que esta loca -dijo tomando las dos bolsas y saliendo con ellas.
Yo solo sonreí por que muy en el fondo sabia que tal vez Lu si estaba un poco loca pero aún así era la mejor amiga del mundo.
Totalmente agotada me deje caer en uno de los sillones de la sala y trate de relajarme,  cerré mis ojos y sentí como poco a poco me dejaba llevar por un sueño profundo.

El lejano sonido del teléfono me despertó, haciendo que yo me levantará muy exaltada,  mire en dirección hacia donde se encontraba y me dirigí lo más rápido que pude.
~Mansión Russell ¿en que puedo servirle?  ~ trate de sonar lo más tranquila posible.
~¿Quien contesta? ~respondio la voz que me hizo estremecer la primera vez que la oí.
~Señor Ethan,  soy Jane la sirvienta...
~¡Ahg! Claro,  comunicate con Marta o con Mateo.
~Claro señor solo déjeme ver si se encuentran por qu....
~¿Que acaso tu nuca sabes nada? ~dijo haciendo que yo calleja automáticamente de mi transe por su voz.
~Claro que se muchas cosas, solo que yo me estaba en otro tipo de asuntos...
~Huy disculpe usted Reina de Inglaterra por hacer que interrumpa sus asuntos ¿pero que puede estar haciendo? ,  lavando unos cuantos trastes y tendiendo camas.
~Sabe ~dije tratando de tranquilizarme,  yo no aguantaría ni un comentario más de ese tipejo que se cree el dueño y señor de todo (aun que claro lo era) ~ tal vez no tendré la clase de la Reina Isabel, pero si más educación que usted,  así que si usted quiere hablar con Mateo o con Marta tendrá que localizarlos usted,  por que  estoy de que quiera que realiza las cosas en cuanto usted diga,  así que se mete sus indicaciones por donde usted quiera.

Colgué y sentí como mi cólera comenzó a crecer, nisiquera traté de escuchar si el respondía algo,me senté nuevamente en el sillón y comencé a respirar lentamente para tranquilizarme, pero entonces me di cuenta de lo que había hecho,  ¡HABIA MANDADO A LA GOMA A ALGUIEN QUE NISIQUIERA CONOCIA Y QUE ERA HIJO DE LOS SEÑORES RUSSELL!  y que aparte mañana vendría seguro a tomar riendas del personal como sus padres lo hacían.
Un escalofrío me recorrió de pies a cabeza,tome mi rostro entre las manos y me llene de nervios por que sabía que tal vez mañana seria despedida y todo por haber perdido los estribos por el mal comportamiento de ese chico creído,   sin duda mañana seria mi fin y no quedaría nada de Jane Burrell.

El acuerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora