Recuerdo muy bien el día que mi padre nos abandonó a mí y a mi hermano mayor luego de que mi madre muriera. El tomó sus cosas con la excusa de que se iba de viaje por un tiempo sin saber que nunca más lo volveríamos a ver. Mi tía se hizo cargo de nosotros hasta que mi hermano Thomas cumplió dieciocho, consiguió trabajo en New York y se fue. Se podría decir que a partir de ese momento las cosas cambiaron un poquito...
-SAMANTHA BAKER! ¿¡QUE ES ESTO!? –Gritó mi tía a las 9 de la mañana luego de una de sus salidas con "amigas" mientras yo había hecho una gran fiesta con todos los del instituto en su ausencia. Me levante muy perezosamente sin entender nada.
-¿Eeh? –abrí los ojos sin poder acordarme de nada de lo que había pasado la noche anterior.
Mi tía miraba todas las botellas tiradas, los vasos rotos y los cigarrillos por todos lados.
-Esto se fue de control, señorita! Yo no la crie para que me haga estas cosas. –Me gritó ensordecedoramente.- Hoy se acaba todo esto, te vas a New York pero a un internado.
(...)
El taxi me recogió por el aeropuerto y me llevo al internado directo. Estaba segura que de esta no había vuelta atrás... Llego y me quedo estupefacta de los dos grandes edificios. Aún así lo que más quería era salir de ellos.
-Gracias, aquí tiene. –le di el dinero y me baje del taxi. Camine por el gran sendero que conducía hacia los dos edificios.
-Señorita Baker, la estaba esperando. –me llama una señora, al parecer impaciente, desde adentro del edificio. Caminé curiosamente hasta donde estaba ella.- Entré por aquí.
La seguí hasta su oficina y me senté en frente de ella.
-Aquí tiene sus horarios de clase y el reglamento. Le informo que este edificio es exclusivo para directores, profesores, la gente de limpieza y sus respectivos salones. El edifico que ve a su izquierda es el de las habitaciones, los primeros cinco pisos son los de las mujeres y los últimos cinco son los de los hombres. A las 12AM se prohíbe salir de sus habitaciones con excepción de los viernes y sábados que pueden salir solo hasta las 3AM. El que desobedece los horarios o las reglas, se le dará un castigo. El campus en horarios de clase solo está habilitado para los del equipo de lacrosse. –Dijo con voz arrogante mientras la miraba con pocas ganas.- Ah y tu habitación es el quinto piso, habitación 136.
Gracias. –dije mientras me levantaba del cómodo sillón para agarrar los papeles y mis maletas.
Por suerte como era nueva y tenia maletas, me dejaron subir en el ascensor hasta el quinto piso. Busque por media hora mi habitación pero por error me choqué con un chico que parecía estar apurado y se cayeron mis papeles al piso.
-Podrías ser más cuidadoso? –dije mientras agarraba mis papeles.
-No te vi.
Esa voz masculina me dejo perpleja.
-Un perdón no estaría nada mal. –reclamé mirándolo por primera vez.
Dios mío, donde estuvo este chico toda mi vida? En New York jaja, que tonta soy.
-Eso no es lo mío. Soy Cameron por cierto... Un gusto chocarte. –me dijo mientras se iba.
Estaba tan en la cima pero con esa actitud egocéntrica, diu. Seguí caminando hasta encontrarla, toque la puerta mientras entraba y me encontré con una chica. Era sencilla pero linda, tenía cabello negro y no era muy alta, parecía muy amable.
-Hola, vos sos mi compañera? –me pregunto mientras me examinaba de arriba a bajo con su laptop en sus manos.
-Si esta es la habitación 136, entonces sí. –reí a la par con ella.
-Esta es tu cama, podes dejar tu ropa en ese mueble. Lo que sí, el baño es compartido. –dijo mientras dejaba su laptop en su cama y se levantaba para mostrarme todo.- Acomoda tus cosas y anda al otro edificio. En planta baja al fondo esta la cafetería, te espero ahí. Por cierto, me llamo Alexia Brown.
Buenas días/tardes/noches, voy a tratar de no interrumpir su lectura pero quería decirles que este capítulo no fue muuuy largo pero quise hacer la introducción de los personajes principales, aunque falten algunos, pero no se preocupen porque van a aparecer mientras vaya transcurriendo los primeros capítulos.
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Un giro inesperado
أدب المراهقينSamantha Baker, es una rebelde sin causa trasladada a un internado en New York en consecuencia de sus malos comportamientos y sus fiestas descontroladas. ¿Podrá este internado darle a un giro de 90 grados a su vida? ¿O será Cameron Hoult quien se lo...