Mientras más dulce la fantasía, más dolorosa es la realidad.

16.5K 1.2K 51
                                    

Así pasaron los años, tal como predijera Frigga Thor se había convertido en uno de los mejores guerreros utilizando a mjolnir para defender Asgard y Loki en el hechicero más hábil pudiendo engañar los ojos de cualquiera, ambos ya eran adultos. Las visitas de Thor a la habitación de Loki se hicieron cada vez más seguidas, al principio sólo eran cada 30 días para cumplir su labor de "héroes de Asgard" como ellos lo llamaban de pequeños, pero al pasar los años ambos comenzaron a necesitarlo buscándose por los pasillos del palacio para esconderse en algún rincón y entregarse, a veces en las bibliotecas, a veces en las cocinas, a veces en el bosque donde entrenaban los soldados, el lugar no importaba, pero lo que tenía inquieto el corazón de Loki era que su hermano nunca le había besado ni dicho que le amaba, que él consideraba que era necesario pues en todos sus libros los amantes se besaban mientras hacían cosas de ese estilo.
Y eso era lo que pasaba por su cabeza en estos momentos...
-Thor, más despacio.... Aaaah... ten cuidado....- pedía Loki mientras su hermano entraba en él
-eso intento... pero no importa cuántas veces hagamos esto siempre estás estrecho...
-pues nunca ha parecido molestarte...ah! ¡Con cuidado imbécil!-
-nunca me ha molestado, es tan apretado y placentero ¿estás listo?-
-sí, ya muévete-
Thor comenzó el vaivén despacio tratando de que su hermano no sufriera y al notar que le gustaba a ambos comenzó a acelerar mientras repartía besos por todo el cuerpo de su hermano... pero nunca en los labios...
-Thor... ah ah ah... me voy... a correr...-respiraba demasiado agitado para poder armar una oración más larga
-yo... ah... ¡también!-
Thor se corrió dentro de Loki y este al sentirlo se corrió entre ambos cuerpos, aprovechando lo agitado que estaba su hermano Loki se dio impulso para alcanzar su boca y besarle, apenas fue un roce pero Loki sintió que estaba en Valhala y que flotaba
-¿Qué demonios haces? ¡No me beses!-
Loki le miró sorprendido, le había bajado de golpe de su mundo de nubes
-sólo quería saber que se sentía, sólo es un pequeño beso-
-no lo hagas más, eso es de amantes-
Loki sintió que una daga atravesaba su corazón y sus ojos se humedecían, pero antes de que Thor pudiera verlo lo empujó a la puerta de su habitación.
-ya hicimos lo que querías, ya vete, después nos vemos-
-oye pero dame mi ropa- reclamó Thor ya afuera de la habitación
-¡ponte otra y muérete!- Loki le cerró la puerta en la cara y sus lágrimas cayeron por su rostro, siempre se había sentido la pareja de su hermano, cuando veía a sus padres caminar juntos por los jardines y robarse besos a escondidas se imaginaba a sí mismo y a Thor robándole besos y suspiraba enamorado, cuando tenían sus encuentros pasionales atesoraba cada momento y cada beso y caricia que su hermano le daba.... Pero ahora sabía que era sólo sexo para el cabeza de músculo de Thor, o tal vez sólo cumplía su deber con Asgard... de cualquier forma se sentía utilizado. Continuaba con sus deprimentes pensamientos cuando escucho la voz de su hermano afuera.
-vaya, el idiota se viste rápido- se acercó a la ventana a observar y deseó nunca haberlo hecho, afuera se encontraban Thor y Sif, hablando animadamente... sobre él
-te juro que no sé lo que le pasa, estábamos muy bien haciéndolo y de pronto comenzó a gritarme como loco- ese imbécil tenía que tener la cabeza llena de aire para hablar de él bajo su ventana
-está demente, ¿y cuánto tiempo más tienes que hacerlo con él? –eso no era nada nuevo, él sabía perfectamente que Sif lo odiaba porque estaba enamorada de Thor, además no había alguien en todo Asgard que no supiera que los dos príncipes copulaban.
-hasta que me case y tenga hijos, hasta entonces debo hacerlo con él- el tono que Thor usó para decir eso, como si no viera la hora de que el momento llegará rompió aún más si era posible el corazón de Loki.
-bueno, pero... en una semana más será tu coronación, entonces podrás elegir alguna dama que reine a tu lado y te dé hijos, hasta yo podría hacerlo si tanto apuro tienes- Loki se alejó de la ventana para dejar de escuchar, como odiaba a Sif, por suerte Thor era demasiado torpe para notar sus insinuaciones, pero él las notaba perfectamente, antes ya las había hecho con él presente.
Caminó a la biblioteca y buscó algo para tranquilizarse, se sabía todos los libros de memoria, y ahora los odiaba todos, cuentos de amantes que morían juntos, cuentos de amantes que vivían felices juntos, cuentos de familias felices y cuentos de animales... ¡que también se enamoraban!, tomó el de los estúpidos animales que se amaban y lo aventó lejos, pero al hacerlo vio un libro escondido detrás, estaba de costado atrás de varios libros para que no se notará que estaba allí, era un libro que él nunca había visto, lo tomó intrigado y leyó la gastada y vieja portada, "hechizos de amor" decía el libro, Loki no quería saber nada más sobre ese maldito sentimiento... pero la curiosidad le ganó y abrió el libro, "para hacer que tu hombre te ame", eso le hubiera gustado pero él no quería que las cosas fueran así, quería que Thor le amara de corazón, no por un hechizo, "para hacer que otra se enamore de tu hombre", eso no lo necesitaba, ya era un hecho gracias a la maldita Sif, "para hacer que tu hombre jamás te sea infiel", no puedes serle infiel a alguien por quien no sientes nada, "para esperar un hijo o hija de tu hombre".... Se detuvo ahí y se quedó quieto como una estatua, sintió que su sangre se enfriaba... un hijo.... Un hijo de Thor, así Thor no podría abandonarlo e incluso cabía la posibilidad de que lo desposara para cuidar al niño, entonces se enamoraría de él, y técnicamente no estaba hechizando a nadie para que lo amara, sólo se estaba hechizando a sí mismo... no tenía nada que perder y mucho que ganar, se llevó el libro y recolectó todo lo que necesitaba para hacer la poción que se bebería, cuando tuvo todo listo lo vació en un pequeño frasco de vidrio y se lo llevó a la boca, pensó en cómo sería el bebé, un mini Thor tal vez, eso sería tan hermoso, un pequeño... e inocente... no podía.
No podía hacerle esto a Thor, ni al pequeño que aún no existía, no podía traerlo a un mundo donde seguramente sería odiado por su padre, si Thor no quería sus besos mucho menos querría un hijo de él, alejó el frasco de su boca y lo tapó dejándolo en su habitación sobre un estante, esperaba usarlo algún día, pero ese día se veía tan lejano.
La semana pasó y él se comportaba lo más frio que podía con Thor, no soportaba tenerlo cerca, hacía que su corazón saltara en su pecho, pronto Thor sería coronado y sabía que cuando eso pasara correría a buscar cualquier dama que le diera hijos y así librarse para siempre de Loki, pero él no lo soportaría, así que decidió traer gigantes de hielo que impidieran la ceremonia y así Thor nunca se alejaría de él. La coronación dio inicio y el dios del trueno entró sonriente y rodeado de aplausos, una vez que llegó a las escaleras le guiñó un ojo a Loki haciendo que su madre sonriera pensando que todo estaba bien entre ellos dos... pobre mujer, que equivocada estaba.
Los gigantes de hielo interrumpieron la ceremonia como Loki había planeado, pero no contaba con que su hermano partiría a jotunheim en venganza, por suerte su padre los salvó a tiempo, pero una vez que se encontraron en el bifrost comenzó el sermón del Padre de Todos.
-¡¿Cómo puedes ser tan irresponsable?! ¡¿Acaso eres un crío?! ¿No te parecía suficiente poner en peligro a uno de ustedes dos? ¡Tenías que llevarte a tu hermano! ¡¿Qué parte de si mueren ambos Asgard perece es la que no alcanzas a entender?! ¡Tú deber es protegerlo y lo arriesgas llevándolo a misiones suicidas!
-¡Loki sabe pelear! ¡Es un hombre! ¡Un guerrero!
-¡no es un guerrero ni un hombre! ¡Está aquí para ejercer un papel que normalmente ejercería una dama y lo sabes!
-¡si no hubiese querido ir me lo habría dicho! ¡Eres un viejo estúpido y anticuado! ¡Loki debe saber defenderse no sólo saber copular!
Odín miró a su hijo menor que presenciaba todo en silencio y cabizbajo, al ver su rostro pudo comprender de inmediato todo, Loki era listo, no fuerte, jamás participaría en una guerra por voluntad propia, le ama, amor no correspondido, era lo que sus ojos mostraban mientras oía a Thor gritar, y entendió que su hijo mayor era demasiado inmaduro y torpe para notarlo.
Thor fue desterrado y Loki caminó rápidamente a la cámara de armas donde sabía se encontraba el cofre de los antiguos inviernos, en jotunheim había notado como su piel se convertía en la de un jotun y ahora necesitaba comprobarlo, tal como sospechaba al tocar el cofre todo su cuerpo cambió de color.
-no esperaba que lo descubrieras por ti mismo- la voz de su padre sonó fuerte tras de él
-no soy tu hijo ¿verdad? Ni siquiera soy asgardiano –su voz se quebraba al saber que toda su vida era una mentira.
-no, no lo eres, eres un jotun-
-¡soy un monstruo! ¡Soy el monstruo con el que los padres asustan a los niños por las noches antes de dormir!-
-tampoco eres eso-
-me trajiste cuando atacaste jotunheim ¿cierto?, ¡me robaste junto con el cofre! ¡¿Por qué?!-
Porque...-Odín respiro profundamente antes de continuar- la hermana menor de Thor que debía nacer, la nueva copa de Asgard, murió durante el parto, y Asgard caería en la depresión si se vivían tantos años de infertilidad hasta que Thor contrajera matrimonio... vi como cambiabas de forma y supe que hacías magia por lo tanto servirías para ser la nueva copa-
-¡¡me trajiste para ser la prostituta de Thor!! ¡Para remplazar a tu hija muerta! ¡Para que Thor tuviera algo con que entretenerse como quien bota un juguete y compra otro!
-no cambies mis palabras, te traje para que Asgard no muriera y porque sentí pena de lo débil e indefenso que estabas- el Padre de Todos comenzó a toser sintiéndose adormecido
-¡no fue así! ¡Por eso siempre has preferido a Thor! ¡Él es tu hijo, yo sólo soy la concubina real! ¡Sólo sirvo para que tu hijo se desahogue! ¡Nunca me viste como algo más que un depósito de semen!
Mientras Loki gritaba hasta cansarse, Odín cayó desmayado, Loki dejó de gritar y corrió a buscar a los guardias, pero sabía que ya nada sería como antes.
Continuará

La copa y el vino de AsgardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora