Vengeance. Nuevas especies.

Capitulo 7.

Era un sábado por la noche, muy noche. Ven y yo estábamos sentados en el sofa de la sala en posiciones que no consideraba cómodas para el. Mi hombre/Macho estaba sentado en una posición de indio recostado y yo estaba sobre el, mis piernas estiradas hacia un lado y apoyando mi torso en su extenso y musculoso pecho.

-¿No estas incomodo? -De verdad me preocupa su comodidad. Hace dos noches comenzamos a seguir una especie de rutina. Cuando salia del taller venia aquí y pasábamos unas horas juntos, hasta que cayera el sol, momento donde el se iba a dar una ducha y yo, junto con brass, me adentraba en la cocina para comenzar a cocinar la cena. Después de la cena me encerraba en mi habitación para dormir un rato y después de dos horas el me despertaba con besos posesivos, me encantaba que fuera así conmigo, esa mania de protegerme de todo y todos, no lo se, muchas mujeres detestarían un hombre celoso, en cambio a mi me encanta que Ven fuera así... tan posesivo y hombre de las cavernas.

-Solo un poco, pero no quiero que te muevas. -Me muevo mas sobre el y pongo mi frente en su cuello, ven comienza a jugar con mi cabello- ¿Cuando es tu próxima cita con trish? Quiero acompañarte ¿Me dejarías o prefieres ir sola? -Sonreí y deje un beso en su pecho, sobre su corazón.

-Quiero que estés ahí, me haría muy feliz.

Estuvimos en silencio por unos minutos, el siempre buscaba a acariciarme, no tenia sus manos lejos de mi cuando estábamos juntos. El programa de animales salvajes había terminado cuando el volvió a hablar.

-Eh estado pensado.... -Parecía incomodo, y no me refería a la posición en la que se encontraba sentado, también tenso. Después de estar durante varios segundos en silencio deje de ver los créditos para concentrarme en el.

-¿Que has estado pensando Ven? -Acaricie su mejilla y el desplazo su mano de mi muslo a mi vientre, instantes después se le unió su otra mano.

-En la habitación del bebe...

Ah eso, bueno yo también había pasado varios días pensando en eso, trish me había revisado varias veces ya y todo iba de maravilla. El bebe estaba bien formado y sus signos vitales no dejaban nada que desear, crecía y crecía dentro de mi y yo estaba asombrada de todavia no haber explotado. Sin decir mentiras tenia una barriga que cualquiera diría tendría gemelos dentro. Habia pensado que como no me movería de aquí durante bastante tiempo tendría al bebe en mi misma habitación, claro que no era muy grande a decir verdad, no había mas espacio que el suficiente para caminar.

-Yo estaba pensando en re-acomodar la habitación, así podría meter una pequeña cuna, se que se desarrollara de prisa así que tampoco es necesario tener una, podrías hacer un moisés actualizado, en internet hay muchos modelos ¿Te molestaría hacer eso?.

-No cariño. -El bebe pateaba firmemente como siempre lo hacia cuando el estaba cerca.- Pero en realidad lo que quiero es poder regresar a mi habitación -Mis ojos se abrieron como platos, ¿estaba pidiéndome lo que yo creo que me esta pidiendo?- No... no creas que quiero que muevas tus cosas a la habitación que estoy ocupando actualmente... En realidad pienso que ese seria un lugar perfecto para ser su habitación -Hundió su nariz en mi cuello y gruño- Pero si no quieres... -Volvió a gruñir.

Hice que me soltara y me levante de sus piernas, el se sentó como normalmente se haría y me miro, estaba enojada, me lo decían sus ojos fríamente azules. Me miraba como en el primer día.

-No me mires así, me lastimas.

Me acerque a el, me senté en sus muslos, estábamos frente a frente y el, como no podía dejar de tocarme, me empujo un poco mas cerca haciendo fuerza en mis glúteos. Todavía tenia el gesto agrio pero por lo menos no me miraba como hace unos segundos.