Solo Mía

Oliver...

Oliver 

Abre la puerta, esta sorprendida, cualquiera lo estaría. Todos pensaron que había muerto, estoy tan avergonzado, casi un año atrapado, eso no es de vampiros como yo. 

La veo inmóvil, me rio, sigue estando igual de bella, aunque debo admitir que esta mas sexy que nunca, ¿Serán ideas mías? No. Estoy muy seguro que lo está. 

~¿Puedo pasar a mi casa?.~Hablo cuando veo que ella no lo hace. Parpadea varias veces.

~Por esta razón quería renunciar a mi poder, esta mierda me hará llorar luego, es solo parte de el, ¿No es así? Después de mucho tiempo, ahora si funciona, y no es justo. No quiero, llorare... Vete, no quiero volver a sufrir por esto ¿Sabes cuantas noches llores? No. No sabes, regresa no quiero mi don.

¿Qué mierda acaba de decir? Piensa que soy solo una ilusión. Cuando no es así, estoy vivo. Bueno o eso es lo que parece, ya que al ser vampiro mi corazón no late. 

~¿Qué te pasa Andrae? ¿Piensas que soy algo creado por tú don? Estas equivocada, pequeña soy yo, Oliver... Tu vampiro, ahora déjame entrar quiero darme una ducha.~ Le respondo haciéndola a un lado para entrar. 

Entro y... Dios, esta todo igual nada ha cambiado, eso es especial hay un nuevo olor en el castillo, y estoy muy seguro que es el de mi hija, es muy parecido al de An, ni la he visto y ya la amo debe de ser igual de bella que ella, sigo el olor y entro a una habitación al lado de mi habitación, bueno ahora parece que es de Andrae, pero eso cambiara ahora será nuestra. De nuevo. 

Toco la puerta y nadie habla, pero aun así decido entrar y ella esta ahí dormida en su cama, ya es una niña muy grande ya parece una niña de un año, casi dos. Es increíble me siento perdido ¿Qué hago? ¿La despierto? Quiero abrazarla hasta nunca soltarla, después de tanto pensarlo la cargo con mucho cuidado con la intención de despertarla, mas que ella no se de cuenta, pero es imposible abre sus ojos. Es tan idéntica a mi y a An pero tiene un parecido mas semejante al mio, ni dos segundo observándola y ya estoy completamente seguro que la amo, adoro esta niña. Quiero ser el padre que debe tener, no tendrá novio será solo mía, no soportaría que alguien la dañara o la tocara.

~¿Cómo se llama?.~ Le pregunto a An cuando noto su presencia. 

~Morgen...~ Responde, esta nerviosa pero no entiendo el por qué. 

~Mañana...~ Susurro el significado de su nombre, es encantador y a la vez extraño ¿Cuántas Morgen hay en el mundo? 

~Oliver, debemos hablar.~ Dice yo asiento y acuesto a Morgen -Mi hija.- en su cama y agarra su sueño muy rápido. Sonrio y voy a mi despacho Andrae me sigue.

Andrae. 

Es hora de hacerle cara al asunto, en algún momento se enterara de lo que ha pasado con James, quizás me odie y a James igual pero es mejor que se entere de mi que de alguien más. 

~Oliver yo...~ Me interrumpe. 

~Tuviste romances con James.~ Responde seco ¿Cómo mierda se entero? ¿Me matara? 

~Solo dime algo.~Dice aún más seco y viéndome directo a los ojos, así me domina. Soy suya sabe como dominarme.

~¿Qué?.~Pregunto nerviosa por su pregunta. 

~¿Te entregaste a el?.~ Se nota que le teme a mi respuesta, pero sonrió de lado, obvio no. Siempre he sido de el, de nadie más.  Al ver mi sonrisa se tranquiliza un poco, pero igual no quita su mirada de angustia. 

~No.~ Niego diciendo toda la verdad. ~Ni mi cuerpo, ni mi sangre han sido de el, ni de más nadie toda la vida he sido solo tuya.

~Solo mía...~ Dice sonriendo, pero corta la sonrisa.