Voces Anónimas

Lo digo así, insolente-mente:

No suelo hablar de esto.
Prefiero escribirlo, pero nunca mostarlo;
Prefiero solo ocultarlo y finigir que lo olvido...
Pero olvidar la muerte es imposible,
Tal como mis sentimientos.

Cuando poso mi mirada,
No es para apartarla,
No es para ignorar lo que tengo de frente. 
Yo veo algo más profundo,
Estudio tus facciones y admiro tus movimientos.
Yo contemplo lo que hay tras las miradas. 
Cuando te veo fijamente,
Desnudo tu alma.

Mis labios se mueven;
Sin ritmo, sin sentido. 
Porque no hay quien entienda lo que digo. 
No hay por quién mis palabras suspiren;
Ni mi aliento robe.
Las palabras ya no son necesarias, ni los corazones comprendidos.
Las palabras se reducen a una sensación fría que corre por un circuito nervioso
Sin sentimiento.
Ya nadie es auténtico. 

Aveces prefiero apagarlo,
Ocultar mi inocente realidad...
No soy así por coincidencia,
Ni por despecho;
No soy egoísta por que así lo quiera.
Aveces me gusta pensar que soy diferente
Y así soy felíz. Me gusta serlo. Me gusta no ser como los demás.
Es algo que sucede inconcientemente.

Tengo metas y sueños.
Tengo mi vida pensada
Y mi día planificado. 
Rebusco las palabras y sueño con encontrarlas.
Me alejo de las actitudes tóxicas
Y no va conmigo la pedantería. 
No me gusta enamorarme
Ni romper el corazón. 
Creo en el tiempo perfecto
Y lo bueno que es encontrarlo.
También en los errores
Y las oportunidades.
Nos soy tan malo, ¿verdad?

Sólo me gusta estar a solas a veces,
Disfrutar de mi propia compañía...
Salir a correr solo y discutir conmigo mismo mis propios argumentos.
¡Es fácil conocerse!
Pero difícil amarse.

Date la oportunidad de conocerte,
De amarte y quererte. 
De estar un día a solas, en silencio y ver la estrellas,
De ver más profundo
Y decir solo que sea cierto.
Te aseguro que vales más que la suma de tus partes.
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Regresó voces anónimas. (?