DANGEROUS LOVE || MARICHAT +15 || (En Edición)

Capítulo 11

- ¡Es tu culpa, idiota!- exclamó uno de ellos apuntando a uno de los hombres, el que estaba a cargo al parecer.

- ¿¡Y yo cómo carajos iba a saber que era Chat Noir?! Además tú eras el que le traía ganas a la chica, ¿o no, maldito enfermo? - respondió este.

- No es culpa de nadie más que de esa mocosa, de seguro es una de las zorras que se coge. - dijo el tercero.

Los tres se encontraban discutiendo en la madrugada, en un callejón.

- ¿Primero intentan lastimarla y ahora la insultan? Que falta de caballerosidad. Se ve que no han aprendido nada de mi ¿verdad?

Los tres hombres miraron a donde provenía aquella voz, en la entrada del callejón en una pose relajada se encontraba él de nuevo.
En un instante cada hombre tomo en su mano su propia arma, listos para el ataque.

- ¿Qué te pasa gato? Creí que eras más compartido.

- Oh mon amie, te equivocaste de especie... - Chat comenzó a acercarse a paso lento.

Los hombres se posicionaron listos para defenderse mejor de lo que lo hicieron con anterioridad, pero no contaron con que el felino de su espalda sacara una pistola y en tres tiros perfectos, perforó cada cráneo.

~•~

Marinette se encontraba en su descanso, en una de las mesas del restaurante del Tío Sheng hablando con Alya y Nino.

- Solo digo que seria algo justo que encarcelaran a Chat Noir. ¡Merece incluso pena de muerte.

- Alya no hables así, ¿Qué tal y si es solo un simple muchacho? - defendió Nino con sutileza.

-¡ Si! Un simple muchacho que asalta bancos, roba a pobres y ricos, no tiene ningún escrúpulo y le da igual incendiar un edificio entero lleno de personas. ¡Piensa bien Nino! Si no te conociera, diría que lo estas defendiendo.- se cruzo de brazos y lo miro con una ceja enarcada.

- ¿!Qué?! ¡No! ¡P-por supuesto que no Alya! Es solo que...- Nino llevo su mano a su nuca, rascandola en respuesta al nerviosismo.

- Que puede que sea un chico que oculta algo. - ambas miradas se giraron a ver a la chica de ojos azules que hace unos instantes se encontraba Solo de observadora.- Quiero decir, ¿Y si no es tan malo como todos dicen y piensan? ¿Y si solo usa esa fachada de chico malo para ocultar algo? como, no sé, dolor, sufrimiento, quizá hasta miedo. Puede que no sea lo que parezca.

Ambos morochos miraron un tanto impresionados por la profundidad en sus palabras. Pero Alya echo a reír.

- Ay Mari, eres tan linda e inocente. Entiendo que seas muy buena con todos, pero hay personas que simplemente no merecen compasión o piedad.- Palmeo su hombro derecho.

- Mari, y ¿por qué de repente el interés? - preguntó Nino mostrando intriga al ver como ella defendía a su amigo.

- Bueno, es que...- Ahora la nerviosa era ella.- He visto algunos vídeos de Ladybug, este, en el Ladyblog. - Alya sonrió con orgullo. - Y, pues, eh, pues he notado que Ladybug piensa que todos tenemos algo de bondad dentro, ¿Qué tal si él también? Pero hay algún obstáculo que le impide mostrarle.

Alya lo pensó por un momento, pero no dijo nada, mientras tanto Nino la miro suspicaz, un tanto alegre de que por fin una persona no juzgara a su mejor amigo sin siquiera saber quien era en realidad.

El silencio fue interrumpido por el sonido de un celular, indicando recibir un mensaje. Fue Nino quien saco su teléfono y lo leyó. Sus facciones se cambiaron instantáneamente preocupando a ambas.