Capitulo cero...
La vida nunca había sido buena con ella, le habían arrebatado a sus padres en el momento que más los necesitaba, era solo una pequeña de 3 años Cuando su madre murió a causa de una enfermedad que la atacaba y solo 2 año más tarde el asesinato de su padre justo frente a sus ojos, para la pequeña de 5 años fue el golpe más duro que pudo recibir y fue aquello que lleno de odio y sed de venganza su corazón.
-Sabes, mi padre siempre me dijo - habló mientras quitaba el seguro de su arma tranquilamente - que las venganzas nunca son buenas.
-¡Por favor!-suplico con lágrimas recorriendo sus mejillas - ¡por favor no me mates! - suplico una vez más retorciéndose en la silla a la que estaba amarrado, ella solo lo miraba sin sentir una pisca de remordimiento, ni compasión por aquel hombre al que pensaba matar.
- suplica todo lo que quieras - y se dio la vuelta - Nada te va a salvar -y lo apunto con el arma
-¡Por favor! - Gritó - ¡piensa en mis hijos!, ¡Por favor! - Suplico al borde de la desesperación mientras lloraba desconsoladamente - Me necesitan
-¿Tus hijos? - Gritó molesta - ¿Que piense en tus hijos? - Caminó cargada de odio hasta él presiono el arma en su sien - ¿alguno de ustedes se detuvo a pensar en mí?
- Sacrl... - Hablo nervioso y con el tono quebrado - yo solo...
- ¿Alguno pensó en mí? ¿En que era mi padre? ¿Qué lo necesitaba? -Comenzaba a temblar y levantar más de lo necesario la voz
- ¡No sabíamos que estabas ahí! - Grito aun bañado en sudor y con la voz temblorosa
- ¡Aun así!, ¿pensaron en mi cuando le dispararon?, en que yo lo necesitaba ¿¡He!? - Y recargó más fuerte el arma en su frente - ¿¡alguno lo pensó!?
- Scarlette - suplico con los ojos cerrados - yo, yo solo seguía ordenes
-Tu solo seguía ordenes - repitió con sarcasmos y soltó una pequeña risita - sí, pues bueno, eso es lo de menos, todos están muertos - y se alejó de él un poco más tranquila mientras el abría los ojos como platos por lo confesado
- ¿L-los mataste a todos? - Pregunto nervioso
- vamos- dijo ella sonriendo - no fue muy difícil
-No me hagas nada por favor - Suplico una vez más - Lamento lo que hice, en verdad - y dio un leve suspiro
- ¿Lo lamentas? - Pregunto molesta una vez más y un atisbo de sorpresa podía asomar se - ¿tú, lo lamentas? - cargo el arma y se giró a él
- sí, yo no quería, tenía que cumplir órdenes
- ¡Al diablo tus ordenes! - Grito molesta - ¡Al diablo tus estúpidas ordenes! - apunto el arma y jalo del gatillo
El sonido del arma resonó por todo el almacén vacío seguido por el aullido de dolor del sujeto en la silla, después de esto, los único sonido audibles fueron los gemidos y los pasos de Scarlette por todo el lugar.
Él se retorcía por el dolor generado por aquella bala que atravesó su pierna izquierda, mientras ella lo miraba, sin ningún tipo de sentimiento, sin compadecerse de aquel que gimoteaba e intentaba alcanzar su pierna.
-Eso que tú sientes ahora - se acercó lentamente a él y susurro cerca de su rostro- ¡No es ni la mitad de lo que yo sufrí cuando lo mataron!
- ¡Me disculpe! -Grito, con los ojos cerrados por el dolor y apretando las manos en puño - ¡Diablos Scarlette!
-¡Te disculpaste! - Dejo caer con toda la fuerza que pudo su mano abierta sobre su mejilla - ¡Tus disculpas no me sirven de nada! -y soltó otro golpe sobre su rostro - a estas alturas de mi vida
¡ni verte muerto me sirve!
Lo miro con todo el rencor acumulado desde hace tantos años, se giró y decidió dar por terminada aquella conversación, y comenzó a alejarse
-Scarlette - Grito suplicante -Scarlette ¡Por favor no lo hagas! - Pero ella seguía caminando sin prestarle atención - Scarlette!
- Lo único malo de esto - y comenzó a girarse hacia el - es que tendré que mudarme de aquí, comenzaba a gustarme vivir aquí
-Scarlette - suplico una vez más sabiendo que no serviría de nada -Scarlette... - y cerró los ojos y comenzó a tomar aire para añadir algo más.
Pero ella no escucho más que el disparo, seguido del grito ahogado de él, se acercó para asegurarse de que el disparo había dado en el lugar correcto y que él moriría.
- lo siento - susurro mientras la sangre brotaba de su pecho y comenzaba a escurrirle por la boca, la miro una vez más -de verdad lo siento
Y sin dar tiempo a más un segundo disparo retumbo en toda la bodega, la sangre brotaba de su pecho y ella solo lo miraba
- Fuiste el único que se disculpó- camino a la salida tranquilamente y cerro mientras se ponía sus lentes -Que pena.
Ahora tendría que marcharse de aquel país y comenzar todo de nuevo, había terminado su venganza y ahora podría empezar de cero, camino hasta su auto, saco un cigarrillo del mismo y lo encendió para después alejarse del lugar sin siquiera mirara atrás.
....
-Buenas tardes puedo ¿ayudarle? - una señorita con uniforme azul y un ridículo gorrito estaba observándola del otro lado del mostrador, sonriéndole de lado a lado, con los labios pintados de rojo y un poco de pintalabios en un uno de los dientes.
-Sí, un boleto para el primer vuelo que salga - E intento devolverle la sonrisa
-Necesito un destino para buscar los vuelos - contesto en un tono de disculpa pero sin desvanecer la sonrisa de su rostro.
-El primero que le aparezca - contesto un poco de mala gana y luego se aclaró la garganta para añadir de una forma más amable y fingiendo complicidad -me voy de vacaciones y no sé a dónde ir
-Lo lamento no puedo ayudarle - comenzó a teclear unas cuantas cosas y mirar su pantalla por momentos - pero dado su historial de vuelos con nosotros, puedo ofrecerle un viaje a paris que sale en 20 minutos - me dice mientras me mira con una sonrisa complice en la cara, es la primera vez que viajo en la aerolínea no hay un jodido registro
-Me parece perfecto - y suelto una pequeña sonrisa - me l devuelve y solo levanta la vista para pedir los documentos necesarios
- Aquí tiene -coloco una hoja sobre el mostrador y mientras hablaba marcaba cosas con un marca textos- un boleto con destino a parís, sale en 20 minutos puerta 415-B - Le entregó sus papeles - que tenga buen viaje - y le regalo una sonrisa
-Gracias -Contesto levemente a su sonrisa y comenzó a caminar aun con sus gafas puestas mientras arrastraba sus maletas
Después de ser revisada al igual que sus maletas antes de abordar el avión, coloco sus maletas en la cinta transportadora, para después subir al avión.
Se colocó en el asiento de la ventana, se colocó los auriculares, cerró las cortinas y se dispuso a dormir el resto del viaje, de aquel viaje que la cambiaria.

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Criminal Love
Fiksi PenggemarLa novela es completamente mía, quizás no tenga la mejor historia ni esas cosas pero trataré de hacerlo menor posible es mi primer novela y nada, espero que les guste. Ya la habia subido una vez pero perdi mi contraseña un bueeen tiempo y ahora la r...