El chico del 5-A [Adaptación]

Capítulo 6: liberen al gato, parte 2

Habíamos quedado anteriormente que tras varias disputas con aquel peludo animal SeungRi, que según Bae había conseguido propia personalidad después de una infartarte tarde de sexo vivida con él, optó por tomar como rehén al cuadrúpedo animalito Gaho.

— ¡GAHO! — Ji abrazaba fuertemente a Seung.

— Ya, ya Yongie, recuperaremos a tu gato.

— Sólo debemos regalarle unas florcitas al histérico ese y listo, problema resuelto — digo Young Bae sonriente.

— No es tan fácil, por lo que me han contado, Ri no es alguien que haga estas cosas deliberadamente — Seung acariciaba la cabeza de Ji que lloraba en su pecho.

— Ok, florcitas y una noche de sexo, de lo último me encargo yo, con todo el dolor del mundo... — recibió miradas incrédulas de los otros dos — ¿qué? tengo que sacrificarme...

— Bueno, bueno ¿podemos centrarnos en el tema de que Ri aún tiene a Gaho de rehén?

— ¡GAHO! ¿POR QUÉ TE FUISTE A SER REHÉN DE SEUNGRI?! ¡TENÍAMOS TANTO QUE HACER! ¡TANTAS PLANTAS QUE ORINAR!

— Mira, ahí está Ri — Bae señala la ventana del 1-A que se abrió dando un golpe.

— ¡¿QUÉ ESPERAN PARA REPONER MIS PLANTAS?! ¡¿A QUE EL SOL SE APAGUE?! ¡¡DEJEN DE HABLAR IDIOTECES Y HAGAN LO QUE LES MANDÉ O GAHO TENDRÁ UN HORRIBLE Y GATUNO FIN!! — cierro la ventana.

— ¿Soy yo o se ha vuelto más violento? — el moreno estaba sorprendido.

— Jajaja, yo que tú me cuido, probablemente la próxima vez querrá ser el activo — se rio Ji a lo que su vecino puso cara de real angustia.

— Em, Ji Yong, nos desviamos de nuevo del tema — dijo el cartero.

— ¡CIERTO! LIBEREN A GAHO.

— No sé porque eso me suena a película Yanqui de hace veinte años.

— Si, pero le cambiaron el nombre.

— Es que si no, había que pagar derechos de autor.

— Emmm

— ¡LIBEREN A GAHO! ¡LIBEREN AL GATO! — Ji saco una pancarta con letras gigantes.

— Dame una pancarta, quiero protestar contra SeungRi — Bae también quería reclamar contra su vecino.

— ¿Hm? ¿Por qué? Que yo sepa no te ha dejado con ganas de nada — dijo Ji mirándolo de reojo.

— ¿También eres chismoso? ¡Me quejo porque siempre anda husmeando por mi ventana!

— Pero deberías reponer sus plantas Ji, tu gato las echó a perder — Seung Hyun dio su más sensata opinión.

— A Gaho le gusta orinar ahí ¿qué culpa tengo yo que mi gato optó por usar las plantas de Ri como baño químico?

— Yo sólo digo...

— ¡ESCUCHAME BIEN, G-DRAGON! — Ri abre la ventana casi rompiéndolas en el acto.

— Aaah ¡Usaste mi otro nombre de pila!

— ¿Qué las pilas no se llaman Duracell? — Todos los miraron a Bae molestos por su mal chiste — sólo quería meter un chiste porque estoy perdiendo protagonismo.

— Nunca fuiste protagonista ni de tu trasero, Young Bae — Ji le sonrió.

— Déjame vivir de ilusiones donde soy el protagonista de un fic absurdo que trata de campo, vaquitas de colores y una perturbadora escena de hermanos sanguíneos teniendo relaciones.

— Creo que el café realmente afectó su cerebro — dijo Ri desde la ventana.

— ¿Qué café? — quiso saber el mayor de todos.

— El que se tomó en... ¡ESPEREN! Yo aún estoy enojado con ustedes.

— ¿Conmigo? — pregunto Ji con carita apenada apuntando su propio rostro.

— ¡SI!

— ¿Conmigo? — pregunto Bae.

— ¡TAMBIÉN!

— ¿Co.....? — Iba a preguntar Seung — ¡Bah, ya que! Ni siquiera te conozco bien.

— ¡LIBERA A MI GATO!

— Miau — Gaho apareció y se posó en el marco de la ventana de Ri.

— ¡GAHO! ¡Haz vuelto!

— Miau — negó con la cabeza y salto de vuelta hacia el interior de la casa de Ri.

— Parece que la pasa mejor con SeungRi — Seung Hyun estaba realmente sorprendido.

— ¡Es que Ji casi nunca lo alimenta! — dijo Ri.

— ¡GAHO! — se echó a llorar de nuevo al pecho de Seung Hyun.