06

19 2 0
                                    

Eras hijo único, no me enteré hasta tiempo después.

Nunca hablabas de tus padres, ni siquiera cuando la maestra lo pidió.

Yo intenté preguntar, muchas veces, hasta que al final me atreví.

Tú solo sonreíste, no había felicidad en ese gesto, y murmuraste que algún día lo entendería.

El Día Que No VolvisteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora