Después de que Misha se fuera, Jensen se quedó acostado en su cama mirando el techo. No pensaba nada en ese momento. Simplemente, miraba.
Hasta que sin darse cuenta, se quedó dormido.
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Despertó. Miró el reloj. Las nueve am. Giró la cabeza, la cama era demasiado grande. Faltaba algo. Alguien. Su Misha.
Basta- se dijo. Y se levantó de la cama. Hoy era el día en el que Jensen volvería a su casa, con su familia. Así que tomó sus cosas y se fue el aeropuerto.
El avión aterrizó a la mañana siguiente, a las 8 am.
Jensen salió de ahí, pero no fue a su casa. No. Fue a un bar, como Dean hacía. Se pidió muchas cervezas, al menos seis de ellas, y tequila.
Cuando miró el reloj, se dio cuenta de que eran las 11 de la mañana. Y se dijo a si mismo que tenía que volver a su hogar.
Pero, ¿quería volver realmente a su casa?
