La morgue ©

-02-

Terminaron de leer el informe, me estremecía cada vez que Drey usaba las palabras «un veneno desconocido», «nada normal». Creo que en mis pruebas de sangre no saldría ese veneno ni el líquido verde, no estoy segura, pero tendría que hablar de eso con Josh; uno de los chicos que me metió en este infierno, pero, el único que me cae bien.

Salimos de la morgue, ese lugar olía horrible, pero yo lo soportaba, en cuanto, mi madre y mi padre se tapaban la nariz, y estoy segura de que se asombraban al ver como aguantaba ese olor a muerte.

Tome mi celular y busque en mis contactos Josh, cuando apareció su número lo llame, le dije a mi madre que iría al parque y que volvería a casa luego, ya que el parque quedaba solo a dos cuadras del hospital, fue rápido llegar.

Llame a Josh dos veces y no contesto, así que empecé a marcar otro número, el número de otro chico de los que me convirtieron en esto, Steven.

— ¿Sharon? ¿Qué sucede?—contesto Steven, pero justo en ese momento me entro otra llamada, Josh.

— Eh, ven al parque que está a dos cuadras del hospital de inmediato, tengo que colgar—le colgué a Steve y conteste a Josh.

— ¿Qué pasa, Shay?

— ¿Puedes venir al parque que está cerca del hospital? Es urgente.

— Claro, casualmente estoy en la heladería que está enfrente, ya voy para allá.

Me colgó, me senté en una banca frente a la fuente que tenía forma de cisne, me hice bolita y comencé a llorar, pero sentí que tocaron mi hombro.

— No llores... ¿Qué sucedió?—me dijo Josh.

— ¿Cómo sabes que estaba llorando?—dije y pase una mano por mi rostro, donde deberían de estar lágrimas, pero no, estaba llorando sangre.

— Nosotros, los que somos de esta especie lloramos sangre, no te preocupes, ahora dime, ¿Qué pasa?

— Ayer discutí con Alana, porque vio el líquido verde en mi ropa, me dijo bestia, que si estaba loca, y yo...—se me rompió la voz y volví a llorar, esta vez, con Josh abrazándome.

— ¿Qué le hiciste?—levante la cabeza, pase mis manos por mi rostro quitando la sangre, seguramente mi rostro estaría manchado de rojo, Josh me tomo por los hombros—, ¡¿Qué le hiciste a Alana, Shay?!

— La mate...

Josh abrió los ojos y se levantó, comenzó a caminar en círculos, despeinándose, llego Steven, Josh me dio una toallita húmeda para quitarme la sangre.

— ¿Qué pasa, Sharon?

— Ayer mato a Alana—dijo Josh por mí.

— Cállate, Josh... tú sabes muy bien que no fue ella, que fue esa cosa lo que la mato.

— ¡Pero Sharon se siente culpable por eso!

— ¡Lo sé! Solo digo que debes tener muy en claro que fue él y no ella, él se enojó demasiado y la mato, nunca había hecho que nosotros matáramos a alguien, solo lo dejábamos en estado grave—hizo una pausa y me miro—, ¿Qué te dijo Alana?

— Me dijo que estaba loca, que como era posible, que era un monstruo...

Fui interrumpida por Steven.

— ¡Eso fue lo que lo enojo!

— Y, les quería preguntar algo...

— ¿Qué cosa, Shay?—me pregunto esta vez Josh, Steven solo me miraba atentamente.

— En una prueba de sangre... ¿Puede salir nuestra especie, o que no soy de este mundo o algo así?

— No, tranquila, de eso no te preocupes, ¿Alguna otra pregunta?—pregunto Steven.

— ¿Qué es esa cosa? ¿Por qué decidieron convertirme a mí, y a Laura en esto?

Ellos se miraron.

— No sabemos con exactitud que es, pensamos que es un demonio, y...—Steven interrumpió a Josh.

— Él nos obligó a convertirlas, dentro de algunos meses en las obligara a hacer lo mismo.

— ¿Pero por qué a nosotras?

— Porque... aunque no parezca, sabemos que ustedes sabrán controlar sus emociones, sabrán controlarlo a él para que no haga lo que se le dé la gana con ustedes.

— Pero, entre ustedes y nosotros hay una sola diferencia... ustedes se convierten solo cuando están enojadas, nosotros podemos convertirnos cuando queramos, así sea para asustar a alguien, solo tienen que aprender a controlarlo—dijo Steven.

— ¿Por qué nosotras no?—pregunte, Steve se quedó callado, creo que era la única pregunta que él no podía responder.

—Porque ustedes son nuevas en esto, poco a poco podrán descubrir nuevas cosas...

— ¿Cómo qué?—pregunte de repente, Josh rio por mis preguntas.

— Como aún no están desarrolladas, lo único que hace es alargar sus uñas, poner los dientes filosos, tornar los ojos negros, y salir alas de ángel, ¿no?

— Si, per...—Steve me interrumpió.

— Sabrás que esta desarrollada cuando con esas alas blancas puedas volar, con esas uñas de bestia romper cosas con solo darles un leve toque.

— ¿Alas blancas?—pregunte.

— Si, alas blancas, ¿Por qué la pregunta?

— Mis... mis alas son de ángel, pero negras.

Ellos abrieron los ojos al tope, y se miraron entre sí.

(...)

Era raro volver a casa y estar en mi habitación, y ver la cama de Alana vacía, su closet con su ropa ahí dentro, pero... sin verla a ella ahí.

Las palabras de Steven sonaron en mi mente de nuevo.

«Ustedes se convierten solo cuando están enojadas, nosotros podemos convertirnos cuando queramos, así sea para asustar a alguien, solo tienen que aprender a controlarlo»

— Controlarlo...—susurre para mí misma.

«Sabrás que estas desarrollada cuando con esas alas blancas puedas volar, con esas uñas de bestia romper cosas con solo darles un leve toque»

— Volar...—volví a susurrar.

Pero... ¿Por qué mis alas son negras?

- - -

— ¿Shay?—escuche que me llamaba una voz melodiosa, una voz que moría por escuchar nuevamente—, ¿Dónde estás? ¡No te veo!

Corrí hasta estar frente a Alana, la abrace, pero ella se separó de mi con un empujón.

— ¡Eres un monstruo!—me grito, y el reacciono a sus palabras, me convertí nuevamente en lo que yo llamaba ''la criatura de la noche'', y justo cuando él iba a tratar de hacerle daño, trate de ponerme rígida para que el no pudiera moverlo, y funciono, Alana sonrió al darse cuenta de que lo había controlado—, ¡Muy bien! Ojala hubieses tratado de hacer eso mientras estaba viva...

Se desvaneció.

— ¡Alana! ¡No! ¡Alana no te vayas!—gritaba yo, repetidas veces, hasta que vi como una criatura igual que yo, con las alas negras, se acercaba a mí.

— Eres la criatura de la noche... eres como yo, por eso tus alas son negras, muy pronto serás... el nuevo monstruo—susurro con eco, era la voz de un hombre.

Sentí como volvía a ser humana, pero, al terminar de caerse las plumas de mis alas, caí, al suelo, y ahí entendí esa expresión de ''Sentí que el mundo se me venía encima, y el cielo me aplastaba'', pero, antes de que la brillante luna me aplastara, sentí que todo se tornaba negro, me desmaye.

- - -

Abrí mis ojos, estaba temblando, y una leve capa de sudor estaba sobre mi cuerpo.

— Fue solo un sueño... fue solo una pesadilla, Sharon—susurre para mí misma.

***

Espero les haya gustado el capítulo.